En la casa del jefe (priv)

Rodee su cintura con mis manos, dejandolas sobre sus caderas, heche la cabeza hacia atras dandole espacio para que su boca trabajara.

-Algo asi a lo Viva las Vegas? - pregunte - Casino y musica swing... quizas podriamos contratar una banda y alguien que cante algo de Sinatra, me gustaria - comente sonriendo, moviendo mis manos entonces por sus muslos, acomodandome mejor debajo de su cuerpo.

Sonrei mirandola directamente a los ojos, metiendo las manos debajo de la sudadera, sin dejar de acariciar sus piernas.

-No muchos conocen mi pasado como mortal - sonrei socarronamente mientras llevaba mis manos a su cintura - Pero bueno... el Vanity Death era un bar... antro o como quieras llamarle.

-Seria muy interesante - murmure sobre sus labios, sin dejar de mirarla, sin explicarme la razon por la cual recogia su cabello - Te gustaria ir a un lugar mas... "comodo".

Murmure, pegandola mas a mi cuerpo, para besarla nuevamente, bajando las manos por su cintura y dejarlas recargadas en sus nalgas.

Gruñi ligeramente, sintiendo el frio liquido derramado en mi piel, seguido por su aspera lengua, el peso de su cuerpo sobre el mio, comenzaba a sentirme excitado, no tanto como para que ella lo notara, pero mi cuerpo se sentia caliente. La tome por la cintura nuevamente, moviendola para poder ponerme de pie.

-Vamos - sonrei, tomando su mano, tirando de ella en direccion al segundo piso, hasta hayar la que seria su habitacion, del otro lado de donde se encontraba la de Andrew.

No pude evitar mas que carcajearme, realmente no pensaba llevarla precisamente a esa habitacion, pero dado a que era una de las mas grandes.

-Espero que te agrade el lugar - mensione - Creo que va a mas a doc a tu persona, las otras son demaciado sobrias, incluso la mia... - dije mirando la bizarra coleccion de dildos, aun recordando la primera vez que entre al lugar, y la cara de sorpresa de Adrian, era como volver a nuestro tiempo, a nuestros años de adolescentes mortales y nuestras vidas "normales".

- Es bueno probar cosas nuevas - sonrei - Y si se te dan nuevas oportunidades, hay que aprovecharlas... yo trato de hacerlo, y bueno... - levante los hombros, acercandome hasta la cama, sentandome en la orilla de esta, sin dejar de mirar el lugar... sonriendo socarronamente, recordando las pocas veces que habia utilizado aquel lugar, sin duda, un fetiche demaciado perverso.

Me rei ligeramente, sin moverme demaciado, sintiendo el frio metal de las eposas de plata en la muñeca, agradeciendo que aquellos mitos sobre la plata fuesen una total farsa. La mire fijamente a los ojos, sin borrar la sonrisa de mis labios.

-Tu sabes... Whiskey, definitivamente siempre sera mi bebida predilecta - comente, en un tono de voz sumamente bajo, sensual.

Solte un gruñido placentero al sentir el frio liquido corriendo por mi piel desnuda, seguido por el aspero tacto de su lengua, la miraba de fijamente siguiendo cada uno de sus movimientos dejandole hacer, sonriendo de forma complaciente.

- Nunca he usado esos dildos en mi persona... no tengo ese tipo de necesidades... - conteste - aun que no esta demas experimentar un poco... siempre es bueno.

Solte una fria carcajada, sus pensamientos en ese momentos eran facil de recolectar y eran divertidos.

- Tu crees que fue de a gratis la transformacion? - pregunte sonriendo y asintiendo cuando sugirio romper los ajustados pantalones de cuero - O que solo era amigo de manita sudada de Rivers?

Sugeri, era facil, y obvio que con los unicos que Rivers habia sido pasifico eran Jukka, Edward y Demian.

-Solo la primera vez - sonrei - Aun que durante mucho tiempo no recorde exactamente como fue - dije y solte un gruñido al sentir sus uñas rasgando el pantalon de cuero, y nuevamente le frio liquido en mi piel, era simplemente encantador sentirse excitado a por "caricias" de ese tipo, lacibas y unicas en su especie, distintas al toque calido de manos mortales, el frio tacto de los vampiros era algo incomparable.

Cerre los ojos, casi ronroneando al tacto de su lengua, apretando los dientes cuando senti sus colmillos en la piel de mi cuello y nuevamente el licor en mi cuerpo, era un circulo vicioso aquello, era algo casi "nuevo", puesto a que nunca habia estado en aquella posicion "sumisa" con nadie, usualmente todas y todos mis amantes habian jugado el papel sumiso frente a mi.

-Supongo que algo asi debe ser regla general - murmure levantando ligeramente las caderas. - Aun que he de aceptar que esta vez evite esa parte del "sexo con el sire".

El liquido ambarino se derramo de mi boca por todo mi cuello y pecho, antes de que pudiera tragarlo, y sin dejar de mirarle fijamente a los ojos a la espectativa de lo que sucederia.

- Me va a dar un paro cardiago - murmure jugando con la situacion - Esto es albo bizarro, sabes... y nuevo, estando yo en este lugar de sumisión.

Separe a penas los labios, ligeramente sintiendo el duro pezon contra mis labios, saque mi lengua de forma lenta, como lo harian las verdaderas serpientes, lamiendo aquel endurecido pedaso de carne humeda, bebiendome la gota de whiskey en ella, abriendo mas la boca atrapando entre mis dientes su pezon, succionandolo casi con hambre y lujuria, mirandola directamente a los ojos.