Rebel song *Alexei +18*

Me aferré cual felino a su cuello cuando me tomo y me llevó hasta el sofá, jadeando con mis piernas en torno a su cintura y dejando escapar un leve gemidito cuando se sentó conmigo encima, sintiendo cómo ahora podía clavarle más a fondo en mi interior. 

-¿Así de sexy? -pregunté cambiando mi tono por uno inocente y juguetón, deslizando mis manos por sus hombros y moviéndome lentamente sobre su miembro a la vez que me mordía el labio inferior, mirándole con la misma intensidad que él me miraba-. ¿O aún más sexy? Dime... dime de nuevo, Cerb.. ahh... dime que tan sexy te parezco ahora -le pedí con falso tono de súplica, pasando una mano por mi mecho terminando de quitarme la camisa que aún me colgaba y bajando hasta tomar su mano, llevándola a mi boca empezando a lamer sus dedos con deseo, y todo esto, sin dejar de moverme sobre su miembro, condenadamente lento.

condenado hechicero sexy.... miren que ponerse en esa pose de sensualidad mirarme de esa manera y andar lamiendo mis dedos... y para colmo...  moverse de esa manera tan lenta cuando veníamos a un ritmo bastante decente.

- demasiado sexy... es... es difícil controlarse estando cerca tuyo... uno tiene el impulso constante de querer poseer tu cuerpo  sobre cada mueble.... le declare sonriendo mientras el lamia mis dedos de esa manera, lo cual solo me daba mas ideas.... y por que no? había que ponerlas en practica, el se movía tan lento sobre mi... mejor darle algo para que reconsiderara sus velocidades...  una vez mojo bien mis dedos, los saque de su boca y  los lleve a su trasero,  comenzando a   jugar con su intimidad a un ritmo lento dado que no sabia en que estado estaba  alli tampoco, introduciendo con mucho cuidado un dedo mientras el se movia sobre mi.

- tan sesy que uno no puede aguantarce hacer estas cosas...- le dije  inclinandome hacia el lamiendo su pecho y agarrando su miembro con mi otra mano masturbandole, asi, atacandole por todos lados, la cosa era mas divertida...

Dejé escapar un gritito ahogado al sentir sus dedos en mi trasero, aunque gemí con fuerza al sentir cómo introducía uno de sus dedos en mí... eso y sus lamidas y caricias en mi miembro, fueron mi perdición. Su dedo en mi interior dolía y se sentía un poco más extraño que de costumbre, pero a decir verdad no me molestaba en lo absoluto, sino que simplemente... me sentía extraño... tal vez el poder de mi magia era tan grande, que al sanarme, había vuelto incluso a ser virgen... lo cual era extraño también.

Empecé a moverme con mayor rapidez sobre su miembro para distraer un poco el dolor, clavándole profundo en mi ser a la vez que medio enterraba las uñas en sus hombros de los cuales me afirmaba, gimiendo sin parar, notando cómo me torturaba...

-Ahh... ahhh... dioses... y por qué... por qué no me posees.... sobre cada mueble de ahora... ahhh... en adelante? -gemí ladeando el rostro, con la respiración agitada y mi cuerpo estremeciendose por el placer. Sentía que los espasmos me recorrían por completo y que pronto llegaría al orgasmo, pero seguía queriendo más de él, sólo de él.

sonreí ante sus gemidos, soltando unos tambien yo al sentir sus uñas clavándose en mi piel proyectando placer a todo mi cuerpo. tambien sonreí bastante por su comentario, pero no respondí realmente a por que no le poseería de ahora en mas sobre cada mueble, la razón era simple, era porque alexei no era mi pareja, y porque era humano... y yo.. yo era un sádico sexual irremediable... y terminaría por matarle, prefería mejor poseer su cuerpo muy de vez en cuando y disfrutarlo bajando mis ritmos a los que un humano podía soportar.

seguí masturbando su miembro y moviendo mi dedo en su interior mientras el ritmo sobre mi miembro lo marcaba el, mordisquee su cuello y lamí el lóbulo de su oreja antes de besarle lastimando solo un poco sus labios, un poco tenia que saciar esa rara sed de sangre mía, me era imposible sino llegar a ciertos puntos de excitación al parecer... gemí ante esos sutiles hilillos de sangre en sus labios.

- hha... muévete.. un poco mas..... gemi sobre sus labios aunque no espere mucho a que el aumentara el ritmo, mas bien con el dedo que profanaba su intimidad comense aincitar mas movimientos de su parte, mas velocidad, buscando mas placer, sintiendo que pronto nos correriamos ambos.

Gemí ahogado contra sus labios al sentir la rudeza de su beso y el sabor de la sangre, sintiendo apenas el ardor de esa herida entre tantas sensaciones placenteras. Asentí entre gemidos a su pedido y siguiendo también el ritmo que aquel dedo me marcaba, empecé a moverme más rápido sobre él, gimiendo y jadeando ahogado al hallarme mordiendo mi labio inferior, haciéndolo sangrar más de manera inconsciente. 

Mi cuerpo se estremecía de placer y al notar que ya llegaba al final, aumenté un poco más el ritmo de mis movimientos, cerrando los ojos ante el inminente orgasmo y gritando su nombre, arqueando la espalda totalmente y pegando nuestros pechos.

la sangre... en ese momento.. su sangre... delicioso nectar que despertaba sensaciones que no recordaba sinceramente de donde venían... lo mismo había pasado anteriormente con alexandre... como podía la sangre excitarme tanto si no era un vampiro?

gemí ante la vision de su labio lastimado y ante la manera en que su cuerpo se tenso alrededor de mi miembro al llegar a su orgasmo, regalándome la vision de su cuerpo arqueado de placer, lo pegue a mi moviendolo aun sobre mi miembro besando ese labio herido, devorando esa sangre por algún motivo ajeno a mi naturaleza lycana, y el sabor, los sonidos los aromas, todo, me llevaron al éxtasis de placer, derramándome en su interior, gimiendo en sus labios, jadeando, saque mis dedos de su interior aunque mantuve los movimientos por un momento mientras lamia sus labios maltrechos, como curandoles, como hacen los canes, disminuyendo el movimiento hasta dejarlo solo en el provocado por nuestras agtadas respiraciones.

- hhum..... como te sientes?....- pregunte soltando algunos jadeos recostandome contra el respaldo, apollandolo a el sobre mi pecho.

Mi cuerpo se estremecía totalmente por el placer tanto del orgasmo como por la forma en que sus manos me instaban a seguirme autopenetrando y casi sin darme cuenta, cerré mis ojos concentrándome en cada agradable sensación y luego, en cómo sus manos me pegaban a su pecho cálido. 

Creo que incluso medio ronroneé cuando lamió mis labios de esa forma, abrazándome luego a su cuello y apoyando mi frente sobre su hombro, jadeando aunque con una leve sonrisa tímida que obviamente él no podía ver.

-Bien... me siento bien, gracias a ti -murmuré en voz baja, demasiado agitado aún y dejando tiernos besos sobre su piel. Sin embargo, una vez mi cuerpo empezó a relajarse otra vez, noté un agudo dolor en mi sexo, sintiéndome un poco resentido aunque Cerberus realmente había sido delicado conmigo. Las piernas me temblaban y mis muslos estaban tensos, pero en sí, yo me sentía bien, satisfecho y seguro entre sus brazos.

sonrei ante su respuesta aunq ue el temblore de sus muslos sobre mis peirnas era notable para mi asi que con cuidado le ayude a lebantarce, separando nuestros cuerpos, dejandole recostado en el sillon y sentandome a  la altra de su cabeza en el piso.

- me alegro que te encuentres bien... pero deberías descansar... dije acomodando mis pantalones y buscando en los bolsillos una caja de cigarros prendiendo uno.

- quieres uno?... una manta? seguro hay aqui alguna para cuando me quede  de dia porque haya mucho trabajo o algo... - dije mirandole apoyando la cabeza sobre el sillon.

Asentí cuando me dijo de descansar y me acurruqué en el sofá una vez me ayudó a recostarme, notando una extraña humedad entre mis piernas y empalideciendo ligeramente al comprobar que era sangre, aunque casi nada, en realidad. Negué con la cabeza cuando me ofreció un cigarrillo y me abracé a mis piernas, suspirando y mirando la alfombra, evitando verle a los ojos porque me había puesto algo nervioso.

-Creo... ¿hay baño aquí? Necesito limpiarme... creo que estoy sangrando un poco -dije aún pálido, estirando una mano hacia él y tomando una de las suyas, entrelazando mis dedos con los ajenos para no sentirle tan lejano y para asegurarme bien de que no entraría en pánico, no ahora que iba tan bien.

me gire cuando dijo eso... como el ambiente olia a su sangre por sus labios maltrechos no me habia dado cuenta... que estupido....

- si... h.. hay un baño pribado aqui en la oficina con ducha si quieres...e..estas... estas bien? es grave? - le pregunte apagando el cigarro en el piso y girandome para obserbar su rostro.

-Tranquilo... no es nada... -creo que en realidad ya sabía a qué se debía y me dio algo de pena, vale que ahora era relativamente justificable que me sintiera como un primerizo pese a mi experiencia... porque prácticamente sangraba como un primerizo. Una vez lo asimilé, mis mejillas ardieron debido al rubor.

-Creo... que eres mi segunda "primera vez"... definitivamente no volveré a usar magia para sanarme -comenté totalmente rojo de la vergüenza, optando por finalmente cubrirme el rostro sintiéndome cohibido.

- que soy tu segunda primer.... que? ja... jajjaja...- comence a reir cuando cahi en la cuenta de lo que me decia... pero no de forma burlona ni mucho menos, sino de manera divertida, pro que la forma en que lo decia era divertido, la forma en la que se habia cohibido.

ahora entendia por qeu lo estrechod e su cuerpo y por que el dolor que sentia, no era solo cuestion de lo sucedido sino que su magia habia vuelto su cuerpo virgen nuevamente en ese sentido... magia retorcida, si tenia....

- vale.. vale, lo siento, no queria reirme, no fue adrede... ven te llevo.- dije levantandome, de todos modos ya tenia el pantalon subido, asi que pase una mano por su espalda y la otra por debajo de sus rodillas y lo levante, llevandolo al baño.

- es una ducha... espero no te moleste...- dije al ver la regadera al entrar al baño.. en realidad no podia esperar mas, no era una casa al fin y al cabo era un baño en una oficina de gerente de bar... le deje parado sobre el piso y le abri las canillas regulando el agua a temporatura tibia, sonriendo aun con la idea de que en cierta forma habia desvirgado su cuerpo.. era raro.

- ya... ahora si quieres mas caliente ponla tu a tu temperatura... te esperare aqui o afuera... hum....- busque con la mirada y encontre un armarito donde habia dos toallas y una bata. - aqui.. aqui tienes asi te puedes secar tranquilo, ahora traigo tus prendas...-

-Malvado, no te rías! -le regañé a la vez que cubría más mi rostro, muy avergonzado al oír su risa y tensándome un poco cuando me tomó en brazos, sintiendo leves punzadas de dolor aunque realmente no eran nada, si las comparaba a dolores anteriores... Me abracé a su cuello cuando me cargó y me llevó hasta el baño, notando con alivio que había ducha y que podría limpiarme como corresponde.

-Descuida, ducha está bien. No tienes que acompañarme, a menos que quieras ducharte conmigo... -me encogí de hombros, realmente no me molestaba o incomodaba si quería ducharse conmigo, aunque en todo caso prefería que esperara fuera, me sentía un poco raro y el agua me ayudaría a relajarme. 

Cuando salió en busca de mis ropas, me metí al agua notando que estaba bastante bien de temperatura, lo cual me ayudó a relajarme y despejar un poco mi mente... cayendo recién en la cuenta de que estaba en un bar, en la oficina de Cerberus, y que le había hecho distraer de sus obligaciones... no sentía como que yo le molestara estando allí o robándole parte de su tiempo, pero sí, me sentí mal, un poco estúpido por eso. Y por muchas otras cosas, empecé a sentirme realmente estúpido y mal. 

Y ahogado... y esa sensación conocida, que me indicaba que era la hora de irme, y huir de todo. Era como si me estuvieran ahorcando y necesitara correr lejos, pero no quería irme, ¿dónde más podría estar a salvo de Lucifer? Me llevé ambas manos al rostro, dejando que el agua caliente se llevara la sangre y el sudor de mi cuerpo, terminando por caer de rodillas en la regadera, echándome los cabellos hacia atras.

fui por su ropa y la junte del piso y del sillón.... cuando llegaría el día que aprendiera a dejar la ropa de las personas que desnudaba solo en un lugar?... reí para mis adentros y cuando supuse que ya le había dado tiempo para que al menos la sangre se fuera con el agua, volví al baño, para encontrarle con esa expresión, arrodillado bajo la ducha, era una expresión que podia adivinar, no necesitaba haberla visto antes.

- piensas huir?- pregunte tranquilo dejando la ropa en un canasto junto al lavabo, para luego voltearme y acercarme a distancia para no mojar mi pantalón que era el único que tenia para trabajar allí esa noche. - eres consiente... de que vivimos en la misma casa y de que te cruzare de todos modos verdad? porque... soy un lobo al fin y al cabo y siempre puedo encontrarte... porque eres mi amigo y me preocupas. le dije mirándole con una expresión amable, para que no lo tomara a reto. suspiro y se saco el pantalón y la ropa interior para poder darse un baño rápido.

- me harias un fabor?- pregunto mientras se sentaba detras de el bajo la ducha y le abrazaba ligeramente para que se sintiera protegido.- te quedarias a dormir en la oficina? hasta que termine la noche, luego yo te llevaré a casa. lo harias?- tomo un jabón y comenzó a limpiarse, porque no podia andar oliendo a sexo junto al muchacho de la barra que le ayudaba... por el simple hecho de que era un lycan y estaría oliendole toda la noche....

Me sobresalté cuando regresó y me dijo aquello, aunque le sonreí levemente, sin mucho ánimo. Cuando se sentó tras de mí, me recargué en su pecho y le abracé por el cuello, quitándole el jabón de la mano y pasándolo por su amplio pecho en silencio, sólo un breve silencio en lo que ordenaba un poco mis ideas.

-En algún momento me iré, ¿sabes? Y dudo que puedas encontrarme... siempre tuve ese don de desaparecer -comenté, suspirando y subiendo la vista a verle-. Algo debe ir mal conmigo. Ojalá no fueras tan buena persona, me haces sentir... arg, odio esto, olvídalo -negué con la cabeza y dejé de abrazarle, poniéndome de pie y dándole la espalda, incapaz de verle. 

-Supongo que puedo dormir en el sofá mientras te espero -comenté, cerrando los ojos y dejando que parte del agua me diera en el rostro, llevándose todo rastro de posibles lágrimas, pues me sentía frustrado y tonto.

- no olvides que soy "Cerberus, el can del infierno"- dije bromeando al referirme a mi como al demonio guardián. - voy a encontrarte donde sea que estés, porque eres parte de mis intereses, ademas tengo que asegurarme de que no te pase nada nunca, viene así como con el combo de amistad cerberiana sabes?- le conté.

escuche lo que decía leyendo sus movimientos y su lenguaje corporal, no dije nada.. porque si se referia a lo que creia yo que se referia, no podia corresponderle.... no porque no fuera un buen prospecto... sino por el simple hecho de que en mi cabeza lo unico que predominaba era saber quien era yo y que eran esas memorias perdidas y revoloteadas que aparecían cada vez que me convertía en crynos, memorias que cada vez tenían menos sentido... como no sabia siquiera quien era yo... como podía pensar en querer a alguien y condenarle a estar con quien no sabia quien era?..... por ese motivo, no dijo nada.

- bien entonces esta decidido... bueno salgamos del agua que tengo que volver a trabajar para que no digan que me la paso de bago... auqnue trabajo todos los dias como si para ello viviera...- dije parandome y saliendo de la ducha hablando en tono de broma para distraer a Alexei de sus pensamientos.

tome una toalla y comence a secarme, dejando una toalla y la bata para alexei.

- sal que te convertiras en pasa de uva. dije sacando la lengua

"Sería bonito si me encontraras", pensé para mí, suspirando profundamente sintiéndome ahogado otra vez, con la inminente necesidad de salir corriendo a la casa y hacer mis maletas, de marcharme e irme lejos, en donde realmente, no pudiera encontrarme. Definitivamente debía ir algo mal conmigo, si cada que me sintiera de esa forma con alguien, terminaba huyendo y dejando todo atrás.

Me giré a verle y le sonreí cuando dijo lo de volver a su trabajo y la forma en que se desvivía trabajando a diario, quedándome un poco más bajo el agua una vez se salió y empezó a secarse. Dejé que el agua terminara de llevarse un par de lágrimas y luego cerré las manillas, temblando ligeramente y tomando una de las toallas, envolviéndome totalmente a la vez que me secaba.

-Igual, sería una pasa sexy, ¿no? -comenté con una amplia sonrisa, prefería guardarme lo otro y hacer como que todo iba bien. Me salí de la regadera y me envolví en la bata, secando con la toalla mis cabellos mientras miraba el suelo.

le mire cuando me pregunto eso y sonrei.

- serias la pasa mas sexy de todas.... eceptuando probablemente por Quinn... el padre de morgan, no lo recuerdo pero tengo que asumir que para mi era la pasa mas sexy del universo... pero tu, eres la pasa mas sexy luego de el te parece?- todo lo dije en tono chistoso para que la idea de la comparacion le animara.

termine de secarme y me puse la ropa interior y los pantalones asi como los borcegos... pense en ponerme la remera... pero... que mas daba si no lo hacia? total y venian mas clientes a la barra...

- ven, te busco las mantas para que te cubras bien, tu mientras vistete o te hara mal.- le adveri saliendo del baño y buscando donde podian estar las mantas, al encontrarlas las deje sobre el sillon, esperando a que saliera del baño.

Le quedé mirando con una sonrisa algo forzada cuando dijo eso, sintiendo como que me hubieran volteado un balde de agua fría encima... Aunque no comenté nada, preferí no hacerlo porque mi lengua, lo sabía, se volvía venenosa. Supongo que su intención fue buena, pero... no pude evitar sentirme... mal. 

No dije nada y sólo me limité a sonreír, terminando de secarme y asintiendo a sus palabras con la cabeza. Cuando salió del baño, tomé mis ropas empezando a vestirme algo lento... reconsiderando el quedarme allí... De hecho si lo pensaba bien, ya debería estar haciendo mis maletas y dejando de hacer el idiota en donde no me llamaban.

Terminé de vestirme y salí del baño, mirándole y volviendo a sonreír con cierta falsedad, aunque hacía mis mejores esfuerzos para que aquello no se notara. Me acerqué al sofá y pasé los dedos por las mantas, en silencio-. Deberías volver ya a trabajar, estaré bien, creo que puedo apañármelas de ahora en adelante -comenté con tono amable, sin mirarle.

bien... tremendo idiota era yo... evidentemente... compararlo con alguien no fue mi mejor idea aunque ponia todo su esfuerzo en ocultarlo... instintos de perro son instintos de perro.... suspire. viendo como acariciaba las mantas y decia eso.

- suena a que te iras en el minuto en el que cierre esa puerta, para nunca volver, aprobechando que aun me quedan barias horas de trabajo... dije sin contenerme, porque si no lo decia no seria yo, yo no sabia guardarme nada... evidentemente....

me sente a su lado y tome su cabeza con una mano inclinandole y agachandome un poco besando sus cabellos humedos.

- lo siento... quise compararte con quien mas quice en mi antigua vida.. pensando que eso te animaria... no soy bueno para estas cosas realmente... no se atar mi lengua y callarme... como ahora jaja, aunque probablemente compararte con un amor que no recuerdo tampoco sea lo mejor... no te vayas, si? se que es egoista pedirtelo, pero no te vayas... eres lo mas cuerdo en mi retorcida existencia en estos momentos... y eso dice mucho no?- no sabia que decir o hacer para que no se sintiera mal...

Suspiré pesado cuando adivinó mis planes con tanta facilidad, me hacía cuestionar mis dotes de actuación y eso tampoco era bueno, ¿verdad? Dejé que besara mis cabellos sin decir nada, con la vista gacha porque de alguna forma, sabía que él sabía lo que me pasaba... y si no lo mencionaba, o no preguntaba, probablemente fuera porque no estaba interesado en nada de ese tipo...

-Eres egoísta... -fue lo único que dije, en un suspiro, a la vez que me abrazaba de su cintura y ocultaba el rostro en su pecho, grabándome su aroma en la mente. Creo que de alguna forma sentía que me estaba despidiendo de él, pero a la vez, me daba pena dejarle solo, más aún si me pedía de aquella forma que me quedara.

sinceramente.. me dolió que me dijera eso... que era egoísta... pero probablemente tenia razón, por lo que sonreí triste mientras me abrazaba de esa manera, probablemente a el le dolía mas mi pedido que a mi su observación.

- si... es posible... que tengas razón en eso... admití volviendo a besar sus cabellos, soltandole para que si quería se separara, y si no quería, no lo hiciera. - te iras?-

Me mordí la lengua al notar que le había herido y cuando me soltó, sólo me limité a subir la mirada y sonreírle levemente, esta vez, una sonrisa sincera pero triste.

-Si me voy, probablemente hagas un desmadre en la cocina, y tampoco quiero que dejes de comer -comenté simplemente, sin dejar de abrazarle. Me dolía y me sentía ahogado y agobiado, pero no podía irme, sin él... ¿qué haría? Normalmente nunca me importó el no tener a dónde ir o qué hacer cuando huía en el pasado, ya que siempre conseguía arreglármelas... pero las cosas ya no eran como en los años 1990's y bueno... yo le quería de verdad.

-Anda, ve a trabajar. Si te corren por mi culpa, juro que me iré sin pensarlo dos veces -le advertí con una leve sonrisa y tono divertido para relajar un poco el ambiente, sin embargo, yo mismo me sentía demasiado ansioso y dolido. Me estiré y besé sus labios fugazmente, para luego acomodarme entre las mantas, dudaba poder dormir pero al menos usará el tiempo para pensar qué hacer...

le escuche y sonreí, a tiempo de recibir aquel beso fugaz... me sentía mal conmigo mismo por ser tan egoísta para con alexei en ese momento, pero no dije nada, porque terminaríamos mal ambos...

- trata de descansar...- dije levantándome - cuando lleguemos a casa por la mañana te haré un buen desayuno si?... te veo en unas horas. dije desordenando levemente sus cabellos, tome la cajetilla de cigarros de mi chaqueta y aun preocupado por alexei, salí de la oficina.

mi compañero de barra, estaba mas que atiborrado, el bar se había llenado en demasía... y había algunas peleas cerca de la barra tambien... como podía ser? yo me ausentaba que? una hora dos horas? y eso era un desmadre??, comencé a patear culos y dar ordenes de manera terrorífica y en pocos minutos el lugar estuvo controlado, volví a la barra, donde mi compañero lycan me abrazo desesperado agradeciendo mi regreso. rodé los ojos haciéndole un chiste de que no podía andar sin mi, viendo como de inmediato surtía efecto mi estrategia de atender la barra sin camisa y comenzando a trabajar, con un cigarro nuevo en la boca. aunque de mi mente no me sacaba a alexei y sus penas, de las cuales ahora tambien era culpable.

Apenas desapareció por la puerta... me levanté de un salto, mirando a mi alrededor viendo la ventana. Corrí hacia ésta y la abrí, notando que daba a la calle... Sin embargo, cuando estaba a punto de saltar hacia afuera, me detuve. ¿Qué estaba haciendo? ¿Huiría de nuevo? 

"Un Linnankivi es fuerte y seguro, nunca se rinde", recordé el lema de mi familia, sintiéndome demasiado mal. Si me vieran ahora, con otro apellido que no me pertenecía, temeroso y frágil, sería, y ahora con razón, la vergüenza de la familia. Terminé por sentarme en el borde de la ventana con una pierna colgando hacia afuera, cubriéndome el rostro con una mano en gesto de frustración. 

Estaba a un salto de dejarlo todo atrás, pero no podía hacerlo. Al menos, el frío que entraba por la ventana me ayudaba a pensar con mayor claridad, y no me importaba temblar un poco cada que soplaba el viento. Pensé en Sarah... y en lo mucho que la necesitaba ahora. ¿Estaría viva? ¿Estaría vivo cualquiera que conocí en mi antigua vida?