Borderline - priv -

Sonrei, sintiendo como mis colmillos crecian dentro de mi boca, mientras las imagenes de Andrew entraban directo a mi mente, provocando reacciones en mi cuerpo demaciado indebidas debido al lugar en el que estabamos y quien estaba con nosotros.

Cerre los ojos, apretando los puños y buscando la cigarrera, tomando uno de los cilindros, poniendolo en mis labios, buscando sacar esas imagenes, aun que no seria tarea facil.


-Ahora eres un vampiro, uno muy poderoso, tanto como lo es Darius, pese a ser joven - escuche a Jukka hablar con calma, en ese monotono tono de voz.

Escuche sus palabras y lleve mis manos a mi rostro, todo estaba *normal* palpe mis mejillas, mis labios y toqué las afiladas puntas de los dientes que ahora sobresalían.

Intente ponerme en pie con algo de dificultad - Es real - murmuré para mi - esto realmente es real - mire a mi alrededor, las cosas eran más clara de lo que recordaba haberlas visto, era como sí toda la vida hubiera visto.

Caminar me resulto raro - Esto es ..... Genial - sonreí

Sonrei al ver la forma en que Andrew volvia su vista y su rostro a todo lugar, pues sabia que su persepcion del mundo habia cambiado, tood tenia vida ante sus ojos y era algo... extraordinario, cuando se es humano y pasa la transición, todo cambia y es magico, al menos los primeros años.

-Es real, demaciado real - dije y me acerque a el, deseoso de estrecharlo entre mis brazos, ya sin temor a lastimarle con mi fuerza.

Quizá no estaba pensado con mucha claridad las cosas y había tomado muy precipitadas las cosas, la cantidad de veces que había oído hablar a varios vampiros sobre "su maldición" , ¿Como podía ser esto una maldición? 

Mire a Jukka y luego a Darius, las dos caras de la moneda y ahora yo era como ellos.

Un escalofrió volvió a atacar mi equilibrio y me tambalee un poco hasta uno de los pilares de la cabaña, iba a decir algo cuando una ráfaga de ya no tan helado viento me trajo un aroma, "Diablos, desde cuando Darius huele tan comestible" sacudí la cabeza dando unos pasos atrás sujetando mi estomago - ¿Cuanto mas va durar esto?

Era extraño, ver como si se alejara de mi lado, quizas buscando acostumbrarse a su nueva naturaleza, que al parecer le era fantastica.

-Tres días - dije - Tu cuerpo aun tiene que desechar todo aquello que no te sirve mas, tienes que acostumbrarte a tu nueva naturaleza y te provocara dolores, aun que tal parece que en tu caso no sera tan... pesado - indique.

¿3 días? ¿Acababa de decir que eso iba a durar 3 días?! Bueno sonaba razonable de alguna forma.

- No sera tan pesado? - levante la mirada para verlo - entonces por que siento como si me estuvieran pasado el estomago por una trituradora - caí de rodillas cuando estas perdieron la fuerza, vomitando algo cuya consistencia no quise mirar pero que por el olor buena parte de eso era sangre.

Levante la vista a mirando por turnos a ambos - quiero ir a casa - murmuré - No se donde sea eso pero quiero ir a casa

-yo estaba drogado... muy drogado... cuando me transformaron, Andrew - conteste y me agache cuando el parecio caer al suelo, desechando todos los solidos de su estomago - Practicamente ... habia muerto por una sobredosis de heroina, pero... Jukka llego a buen momento... justo antes que mi vida se esfumara en un viaje de lo mas placentero... y aquí estoy ... observandote cambiar... y mejorar y ser pefecto.

Sonrei y lo ayude a levantarse, sacando un pañuelo de la chaqueta.

-Iremos a casa... aun que no creo que sea prudente si es que tu hermano sigue ahi... - murmure - Tu quieres ir?

"Hey, bien allí papa" grite mentalmente.

- No me hubiera molestado estar en un viaje mientras .... - luego recapacite mis palabras, el hecho de que técnicamente yo también había estado drogado carente de sentido de todo lo que pasase a mi alrededor volvió a mi - mejor olvídalo.

Cuando me ayudo me sostuve de su brazo sin soltarlo - eso será un problema - el que me viese así empeoraría las cosas - yo sólo quiero ..... Llévame a dónde sea - me estreche más a el para ayudarme de su cuerpo para mantenerme en pie, sonreí ligaremente - Tenemos una muy bonita luna hoy.

Mire a Jukka - ¿También vendrás ..... Papá?

Volvi la vista hacia donde estaba mi procreador, el ser al que debia agradecerle todo lo que tenia en ese instante, no solo mi inmortalidad, también el tener a Andrew entre mis brazos.

-Iremos a Volkommen, entonces - comente - Avisare que no regresaremos hasta que tu hermano este lejos- "O muerto", pense, sin desearlo realmente, pero el saber que estaba enfrentandose a Skarsgard, no era muy alentador, era posible que ambos terminaran muertos en aquella batalla.

Asentí con la cabeza, a decir verdad no le daba importancia a donde exactamente íbamos, tampoco me importaba donde estaba exactamente mi hermano o como estaba, llámemoslo "Ejono post evento traumático inducido", luego me quede pensando un momento si realmente volvería a verlo.

- Supongo que de alguna forma el ya no es mi hermano - murmuré - ellos ya no son mi familia - eso provocaba en mi un extraño sentimiento, tal vez por el estaba dejando drásticamente todo lo que conocía.

Pero estaba feliz con mi decisión - Oye te invito una sangrita ¿Qué dices? - bromee

Rei, realmente algre con ello y senti la presencia de Jukka detras de nosotros, quien simplemente permanecia en total silencio, casi como una sombra.

-Ire con ustedes a Volkommen, solo para asegurarme que Andrew estara bien y a buscar a ... Belial -dijo, haciendo ese espacio prolongado antes de pronunciar el nombre de aquel ser al que practicamente perteneciamos, otra cosa mas que me unia a Jukka de forma irremediable, nuestra eterna condena.

Asenti ligeramente y volvi a mirar a los ojos a Andrew.

-Acepto esa sangrita - le conteste - Pero en cuanto estemos a salvo... lejos de todo este bullicio... -le dije y me separe un poco de el, lo suficiente para poder andar y salir de la casa, para tener un espacio despejado para poder levantar el vuelo en direccion a Volkommen, o lo que quedaba de ella, aun sintiendo la pesades y culpa de haber dejado a Adrian a merced de sus amantes.

Bueno como yo era un completo novato en cuestiones como esa, digo apenas tenía menos de un par de horas desde que había vencido a la no muerte y ese no es tiempo suficiente para aprender cosas propias de mi nueva naturaleza necesite un poquito de ayuda para ese viaje.

Belial, oír ese nombre me hizo pensar un par de cosas sobre esa *persona* durante el viaje, incluso llegue a una loca muy loca conclusión de forma que lo primero que salió de mi no a al pisar el sueño fue - Yo también quiero hablar con Belial.

Llevarlo entre mis brazos habia sido facil, y el viaje relativamente corto, no habia pasado mas que una hora y aun nos quedaba tiempo para buscar un lugar seguro donde pasar el dia, aguardando por una noche mas. Sonria, casi de forma tonta, como hacia mucho no lo hacia, pero dicho gesto desaparecio de mi rostro cuando menciono el tan "aterrador" nombre.

-No - se adelanto a contestar, Jukka - Tu no tienes nada que hablar con ella... - Dijo tajante y siguio sus pasos, adentrandonos cada vez mas dentro de la ciudad que comenzaba a lucir mas como antaño. - Dormiremos en uno de los edificios cercanos al parque central.-  indico seriamente, y podia sentir que estaba tenso, aun que su rostro parecia no reflejar nada.

Me quede sorprendido con la respuesta, ni siquiera lo había pensado, Jukka se había negado y le tomo sólo un segundo, luego comenzó a caminar sin esperar mi respuesta - Tal vez si lo haya - murmuré por lo bajó mientras encogí los hombros.

Precipitado pero mi idea sonaba coherente en mi mente, demasiado como para despecharla tan rápido.

- Esta bien - espere a que mi cálido soporte diera un paso para hacer lo mismo - necesito un baño - le sonrei.

-En cuanto lleguemos al hotel... tomaras un baño y dormiremos - sonrei y segui los pasos de Jukka, que seguia tenso, au que comprendia aquello, sabia, de alguna forma, que ella estaba cerca, quizas vigilando, como siempre, o buscando a su hijo.

-Hay algo que deberias saber hacerca de mi, Andrew.- comente, despues de guardar silencio unos cuantos pasos - Pero lo hablaremos mañana, en cuanto vuelva a anochecer - dije y sonrei, apretando mi abrazo en torno de sus hombros al tiempo que entrabamos dentro del loby del hotel.

Sentí un vórtice en el estómago bastante humano a mi parecer, cuando alguien decía que debíamos hablar usualmente eran problemas y si venían de Darius eso aterraba más, me mordió la lengua para tragarme las preguntas respecto a eso - Esta bien  - respondí nervioso aferrando mis manos a su ropa.

- Darius .... Realmente hace una hermosa luna está noche - murmuré sintiendo su ligero apretón alrededor de mi

-Todo parece mas hermoso ahora... por que todo lo ves como realmente es - indique, sonriendole, pegandolo mas a mi en cuanto entramos al cubo del elevador - Y yu y yo hacemos una excelente pareja, no lo crees?

Pregunte, separandolo para mirarme en sus ojos, sus bonitos y brillantes ojos azules.

Sonreí ligeramente, si lo que el decía era cierto es como hubiera estado viviendo con una venda que nublaba las cosas y luego mire al frente donde la espalda de Jukka se había quedado quieta, luego gire la cabeza para ver a darius, entonces hice lo que no había hecho desde que abrí los ojos a la no-vida, mirar su rostro detenidamente, hermoso, fue la palabra que pude haber mencionado si hubiese encontrado la forma de hacerlo - Eso es una proposición? por que ..... - me acerque a el murmurando bajito  - mi padre esta aquí al lado y te puedes meter en problemas  - trate de no reírme.

Sonrei, pegandolo mas a mi cuerpo, ignorando el hecho de que Jukka estaba cerca de nosotros.

-Es mas que una propuesta - conteste - Y por el, no creo que debamos preocuparnos, dormira en su propio cuarto y tu y yo en el nuestro.

Compartiríamos habitación, levante una ceja divertida, no es algo que me desagradara al contrario, después de lo que había pasado realmente no deseaba separarme de el - Estoy moribundo, pervertido - y solté reír.

Salimos del ascensor de la misma forma en que entramos, primero Jukka y luego yo literalmente colgado de Darius. 

- ¿Vas a quedarte? - pregunte a mi padre - realmente desearía hablar contigo cuando deje de sentirme un asco - no quería que se fuera, estaba pasando por un episodio de apego sentimental y no deseaba que ninguno de los dos vampiros presentes fuera arrancado de mi lado, a la vez mis manos se aferraban más a la ropa de Darius.

Escuchaba con atencion a sus bastagos, sentia de alguna forma lo que ellos expresaban con sutiles palabras y el como el corazon de ambos vampiros latia ante la cercania del otro, sin embargo, por mas que intentaba, no lograba comprender que era eso... ese sentimiento que ambos se profesaban, obviando claramente la lujuria latente de ambos.

-Me quedare, si eso es lo que deseas - dijo - Pero necesito arreglar unos asuntos, estare fuera un par de dias, quizas, pero volvere... 

Indico y solo entonces volvio a verlos, mientras se quitaba la chaqueta que llevaba puesta, dejandola sobre el respaldo de un sillon.

-Por el momento, hasta que no logre localizar a Belial, me quedare aquí.

- Gracias - murmuré estirando el brazo para tocarlo y luego me arrepentí, yo era una masa horrible de lodo, sangre seca y sudor, así que recogí mi mano apenado, mirando lo que mi cercanía le había hecho a la ropa de Darius.

- Ahora vuelvo - dije soltándome de su abrazo tambaleándote entre los cuartos buscando el baño.

Por suerte no sucedió ningún accidente penoso en el camino, sin embargo, apenas mis rodillas tocaron el azulejo cerca del escusado solté una nueva carga de cosas-que-no-quiero-saber-que-son-o-eran.

Me arrastre hasta la tina, abrí una de las llaves sin importarme fría y caliente y sin esperar a que la tina se llenara me resbale dentro con todo y la ropa puesta.

Lo vi alejarse, notando su cansancio y hastio, sabia que sentia, de alguna forma, aun que el estado en el que habia estado el cuando lo encontramos, en comparacion al que me encontraba cuando Jukka me encontro, distaba mucho de ser parecido.

Me movi por el apartamento, dejando mi chaqueta sobre el respaldo del sofa, y me recoste ahi, aguardando.

-No quiero que me odie - murmure, mientras cubria con mi brazo mis ojos- No quiero que ninguno de los dos me odie... 

Senti la opresion en mi pecho, sintiendo culpa por haber abandonado asi a Adrian e insertidumbre por el futuro con Andrew.

Poco a poco el agua comenzó a llenar la tina, mojando mi cuerpo, eso fue una sensación demasiado placentera y relajante,  pase mi manos sobre una mancha rojiza en mi brazo y esta se borró dejando tras de sí una piel blanquísca.

Luego mire las marcas de mi mano y torcí los labios, recargue mi cabeza en la tina, sintiendo los párpados pesados y las energías abandonando mi cuerpo por completo, abrace mis piernas.

Y en la soledad de ese cuarto de baño, mi cabeza tuvo la oportunidad de ponerse a pensar nuevamente.

¿Qué se supone que estaba haciendo? Estaba basando mi vida en una fantasía, en una ilusión irreal, estaba en una lancha anclada a una tierra inestable a punto de volver a quedar a la deriva. Pensé en Jukka, en Darius, yo no podía obligarlos a quedarse conmigo, ahora podía cuidar de mi mismo después de todo, y yo no podía ser egoísta, no más, me dolió el pecho como sí me hubieras disparado directo a quema ropa.

Volví a sentirme vacío, sólo.

Me levanté de la tina despojado mi cuerpo de la pesada ropa mojada, salí de la tina y camine entre charcos hasta el espejo del baño, mire mi cuerpo desnudo, tan desconocido para mi. Levanté la mano derecha y el hombre frente a mi también lo hizo, solté un puñetazo directo al espejo provocando una estrepitosa lluvia de fragmentos y sangre,

Segui recostado sobre el sillon, con los ojos cerrados, solo hasta que escuche a Jukka moverse y meterse en una de las habitaciones, suponia que requeria de su espacio, siendo quien era y los años que habia vivido, no era alguien que disfrutara de la compañia de otros, o eso pensaba. Aspire profundamente, fijando la vista en el techo, hasta que el sonido de cristales me hizo reaccionar, levantandome como movido por resortes, moviendome  prisa hasta la habitacion de Andrew, entrando al baño observando las gotitas de sangre que caian de su mano, el espejo roto frente a el.

-Que sucedio? - pregunte, aun alterado y con el cabello ligeramente alborotado.