Red Secrets Darks memories *Priv Kanade*

Kanade iria a su casa....

Morgan estaba en un estado de nervios de proporciones olimpicas... en su afan de ordenar lo mas que pudiera la casa, habia quedado enterrado ya por sus libros unas 7 veces... tenia moretones en un brazo de tantas veces que los libros le habian golpeado cuando se protegia la cabeza... kuroro le seguia de un lado al otro, probablemente la causa de dos o tres de las veces que habia quedado enterrado, porque se le cruzaba en el camino y por no pisarle la cola golpeaba una de las columnas de libros...

Casi en el limite de horas logro volver a acomodar sus torres de libros del pasillo, su casa no era precisamente pequeña, era un penhouse, no tan lujoso como el de kanade claro, pero era grande para estar en un edificio... tenia un estudio una habitacion de huesped, dos baños un pasillo que ocnectaba casi todo unahabitacion principal, una sala de estar y la cosina comedor... pero aun asi, salvo por la cosina, los baños la habitacion de huesped y la sala de estar, todo lo demas estaba atiborrado de libros que no entraban en su negocio... todos acomodados en torres cuidadosamente contruidas, todos cuidados, no tenian ni un astibo de polbo, pero eso no quitaba que estorbaran a la hora de moverce... o al menos para alguien tan particular como morgan... quien solia tropesarce y quedar enterrado en ellos. no estaba preocupado, en la entrada le atenderia Oscar, sabia que el le abriria la puerta y le idnicaria que tomara el asensor al tercer piso, despues de eso solo tenia que entrar al hall y esperar que le habriera la puerta... morgan rogaba ferbientemente no tropesarce en el pasillo al ir a abrirle lapuerta y quedar bajo los libros como cuando habia ido yoko de visita.

al fin sono el timbre y cuando kuroro quiso meterce entre sus piernas para correr hacia la puerta morgan lo sostubo en brazos y lo llevo consigo a abrir, llendo con calma para no asustar a kanade con el estruendo de los libros al caer. abrio la puerta y sonrio timidamente con el gato en manos

- b.. buenas tardes - saludo timidamente

Spoiler:

Hacía ya un par de días que se había mejorado de su pulmonía, cai sorprendentemente. Después de haberse expuesto a la fría lluvia y a la permanente humedad de New Orleáns, parecía casi milagrosa la forma en la cual se había sanado, aunque él y su círculo de compañeros estaban acostumbrados a ello. Usualmente Kanade se enfermaba y llegaba a las etapas más críticas en cuestión de horas, un par de día a lo zumo, para luego, empezar a mejorar progresivamente.

Era por esto, que aquella mañana, había estado bastante ocupado arreglando la forma de poder quedarse aquellas dos semanas en la ciudad y no tener que marcharse tan pronto, alegando que tenía que terminar de recuperarse y preparar nuevos ensayos para asegurarse de cantar bien en su concierto. Finalmente, consiguió salirse con la suya y arregló sumar un nuevo evento para no tener que marcharse tan pronto, por lo cual, cuando llegó la hora de ir a visitar a Morgan, su rostro lucía una radiante y alegre sonrisa.

Aquel día vestía con un informal traje azul y un sombrero a juego, camisa blanca y zapatillas deportivas. Se había alisado los dorados risos y había tomado gran parte de su cabello en una coleta, se había colocado sus inseparables gafas negras y, tomando su morral nuevo, salió en dirección a los aparcamientos, en donde su reluciente y bella moto lo esperaba. Esta vez, a diferencia de la vez anterior, sí le dijo a Yuuki, su guardaespaldas, en dónde estaría, así que no debía preocuparse por nada. Sin decir más, salió a toda velocidad por la calle aledaña al hotel, disfrutando de poder volver a usar su motocicleta...

A la hora acordada, llegó al edificio en el cual Morgan vivía. Recordaba su dirección y la llevaba anotada en su teléfono, además que Yuuki, en el hotel, le había trazado un mapa para que no se perdiera ni distrajera con nada en el camino. Dejó la moto estacionada frente al edificio y entró, siendo recibido por un amable y simpático anciano, quien le indicó el piso y el elevador. Tras dar las gracias, el cantante subió y salió en el piso indicado, el tercero, tocando el timbre y aguardando a Morgan en aquel espacio, hasta que el chico abrió la puerta sosteniendo a un negro felino entre sus brazos.

-Bonjour -saludó con una suave y encantadora sonrisa, quitándose las gafas oscuras y colgándoselas en en pecho, prendiéndolas de la camisa. Morgan realmente lucía guapo aquel día, radiante, tanto como él mismo -aunque esto sonara increíblemente arrogante y egocéntrico por su parte-. Dejó una juguetona caricia sobre la cabeza del felino dejando que mordisqueara sus dedos juguetonamente y luego, sin poder contenerse más, sacó del interior de su elegante chaqueta una rosa roja, la cual, protegida como estaba por su ropa, no estaba ni aplastada ni maltratada por la velocidad de su motocicleta-. Por vous, mon ange.

Aspecto:

sonrio al verle jugar con su gato aunque le tironeo de la oreja al felino cuando se puso amordisquear los dedos ajenos, estaba tratando de que dejara esa costumbre, puesto que al rato se canzaba y mordia fuerte... kanade se veia mucho mejor, le alegraba verlo bien, habia estado perocupado por el mientras estaba en L.A... mas alla de que habia tenido sus altercados en aquella vicita, suspiro lijeramente con calma al verle, para luego sonrojarce con esa rosa... nervioso la tomo entre sus dedos.

- g...gracias.... p.. pe.... pense que.. que las...f...flores...eran para las m... mujeres- murmuro - pasa... hum...- miro los libros apilados en el costado del pasillo con cierto recelo - t.. ten cuidado... t.. tienden a e..enterrar personas- declaro invitandole a entrar indicando el camino para asi guiarlo hasta la sala de estar, alli solo habia libros en un librero, no como en el resto de la casa que estaban desperdigados. una vez cerrada la puerta dejo a kuroro en el suelo.

- c...como has estado? y... ya t.. te re.. recuperaste?- habia un un dejo de preocupacion en su voz, aunque no escuchaba en sus pulmones residuos de la pasada enfermedad, siempre era bueno saber como se sentia el.

-Yo creo que las flores, y en especial las rosas, son para todo aquel que las merezca -comentó con voz seductora, mirándole fijamente, sin borrar su radiante y coqueta sonrisa-. Con permiso -dejó de acariciar al pequeño felino y entró al apartamento, observando las pilas de libros acumulados en los costados y procurando tener cuidado de no tirar ninguno ni pasarlos a llevar. Aquella cantidad de libros llamaba su atención, le recordaba un poco a su biblioteca en Roma y aquello le hizo sonreír con cierta nostalgia de su lejano hogar en la vieja Italia.

Una vez en la sala de estar, observó cómo las pilas de libros eran sustituídas por muebles, una elegante biblioteca y alfombras, realmente, un lugar bastante agradable el hogar de Morgan. Escuchó su pregunta y se giró a verle con una dulce sonrisa, acercándose a él ahora que ya no sostenía al felino y tomando una de sus manos, besándola cálidamente-. Así es, ya me siento bastante mejor. Hoy conseguí arreglar un segundo evento la próxima semana, para no tener que irme tan pronto -comentó, soltando la mano ajena mientras miraba al muchacho fijamente.

-¿Te gustaría acompañarme ese día? Se trata de un evento de fans, firmaré algunos autógrafos, tomarán fotos y me harán preguntas, será divertido compartir con ellos -invitó con una coqueta sonrisa. Por supuesto, el resto de la banda también iría, al fin, compartiría con humanos por un día completo, como corresponde hacer a alguien de su raza.

se sonrojo con lo que dijo de las flores... y aun mas cuando le beso la mano diciendo que se quedaria al menos una semana mas... lo que le hiso recordar que eventualmente se iria.. quien sabe por cuanto tiempo, una mirada triste aparecio en sus ojos por un momento hasta que le invito a participar en ese evento con las fans....

- y.. yo?..p.. pero... n.. no me .. me miraran .f... feo?- pregunto sonriendo nervioso, estar con kanade en publico... en un publico que de seguro querria arrancarle cada rasta de su cabeza por verle sentado cerca siquiera.... probablemente era mas de lo que podia manejar

- q... quieres beber algo?- pregunto rapidamente levantandoce tratando de cambiar de tema.

-Dudo que siquiera se den cuenta, yo... preferiría mantener en secreto esto, de momento. Ya sabes, los paparazzis podrían venir a molestarte y no quiero que te veas incomodado por ellos, no respetan la privacidad ajena -comentó negando con la cabeza a su ofrecimiento de beber algo, sonriéndole cálidamente con un brillo suave en los ojos, aquel que por lo general posee la gente enamorada y que le hace lucir más radiante y feliz.

En eso, el pequeño gato negro de Morgan dio un salto sobre el sofá, moviendo las orejas juguetonamente. El cantante, sin poder contenerse, acarició su cabeza y dejó que el animal mordisqueara sus dedos, sin importarle que le clavara los pequeños colmillos de vez en cuando en sus pálidas y frías manos-. Tienes un gato precioso, ¿cuál es su nombre? Me recuerda a uno que tuve cuando niño -comentó jugueteando con el gato, sin inmutarse por los arañazos que de vez en cuando le pegaba. Su mano, blanca y delicada, parecía inmune a estos y ni siquiera sangraba, aunque sí, quedaban las leves marquitas de las garras del minino.

morgan asintio a lo que decia de los paparazzi, recordando como se le habian tirado ensima a kanade la primera noche cuando salian del auto... la verdad preferiria no pasar por esas experiencias tan incomodas, miro a su gato maltratar la mano de kanade.

- Kuroro... su nombre es kuroro Akabane... es.. es.d.. de.. una serie..d.. de a... anime...- declaro sonrojado al admitir que en cierta forma tenia manias de niño...- y sabe m...muy bien que no d...deveria estar ras...rasguñandote...- dijo malmirando al gato que se percato de la mirada afilada de morgan y dejo de hacer daño comenzando a lamer la mano ajena... morgan sonrio ante ese cambio de actitud, era un gato indisiplinado pero conocia los limites

- s.. seguro?... n.. no quieres. nn nada?-

Rió dulcemente ante el cambio de actitud del felino, quien ahora, lamía su mano y las zonas en donde le había arañado y mordisqueado. El cantante dejó una leve caricia en su cabeza y observó a Morgan con una casi, infantil sonrisa-. Tiene un bello nombre, y creo que le queda bastante bien -declaró amablemente, un tanto sorprendido al oír la procedencia de aquel nombre-. ¿Te gusta el anime? En mi casa tengo varios, aunque hace un par de años que no me siento tranquilamente a ver uno... Y bueno, la mayoría son de mi hermana -comentó, bajando la mirada otra vez hacia el felino con cierta melancolía. Aquella era primera vez que mencionaba a su hermana en semanas completas.

-Estoy bien, no tienes que preocuparte. No suelo beber mucha agua cuando estoy bien de salud -se excusó, mirándole y poniéndose de pie, dejando al gato. Se acercó a Morgan y pasó suavemente su mano por la cintura ajena, atrayéndole de vuelta al sofá-. Ven, siéntate conmigo y relájate. Te extrañé estos días -confesó con una coqueta sonrisa, acomodando los cabellos de Morgan con una mano, con gesto suave.

morgan se quedo mirando la exprecion que puso kanade al mencionar a su hermana... tendria derecho a preguntar?.... le dio verguenza hacerlo.

- p...probablemente..e..ese sea el m.. motivo d.. de que.. t..te en.. enfermes t.. tanto....- dijo para luego verce atrapado en los brazos de kanade, se estremecio un poco con la cercania mientras se sonrojaba una vez en el sillon tratop de tomar un poco de distancia sintiendoce algo tonto al hacerlo, lo que aumento su sonrojo.

- t... tambien t.. te ex... extrañe...- confeso, esos dias habia ido a LA en busca de un libro y no habia sido la mas relajante de las experiencias... su semblante demostro lo cansado que en realidad estaba de esos dias, mas bien cansado mentalmente porque ficicamente ya se encontraba bien.

-En realidad, tengo las defensas algo bajas, es todo -indicó, observando la mirada cansada del muchacho, realmente, parecía agotado. Dejó una leve caricia sobre su sonrojada mejilla y sonrió, esos días, realmente había extrañado ver aquel rostro ruborizado y aquella sonrisa nerviosa que conseguían quitarle el aliento. Se contuvo el volver a acercarse al chico luego de que se alejara un poco en el sofá, ya sabía cómo lo ponía su cercanía y definitivamente, no quería que el muchacho volviera a desmayarse por culpa de sus avances.

-¿Y tú, mon amour? ¿Puedo saber qué has hecho estos días? Luces agotado -comentó con tono preocupado, observándole fijamente y directo a los ojos, esos de dos colores que tanto le llamaban la atención. Luego recordó el pequeño obsequio que le traía y buscó en su morral, sacando una pequeña caja con chocolates que hacía poco, le había llegado desde Roma-. Ten, es un pequeño presente para ti, son chocolates italianos, espero que te gusten -dijo mientras se los entregaba con una coqueta sonrisa. Ya había notado que al chico parecía gustarle los dulces, luego del día completo que habían pasado juntos por las calles de New Orleans.

morgan abrio los ojos grandes, esta vez, con la pregunta no se ruborizo mas, mas bien el rubor ocmenzo a bajarle paulatinamente. pero antes de poder contestarle kanade le entrego una cajad e bombones italianos.

- g... gracias....s...seguro.. seguro me... me gu.. gustaran- dijo sin agregar color a su rostro como seria de c ostumbre, pero esta vez tenia mucho en la cabeza que le distraia.

- p... pues estos dias...- dijo dejando la caja de chocolates sobre la mesita ratona frente a ellos. - f... fui a ... l.... los A... angeles... p.. por un libro- conto sin estar muy seguro de contarle el resto.

El cantante notó cómo aquel rubor, en lugar de intensificarse, disminuía, e inmediatamente intuyó que algo le había pasado a Morgan, lo cual lo preocupó sobremanera. Con gesto cálido, tomó suavemente las dos manos del chico y las presionó suavemente, a la vez que le veía con una dulce y cálida sonrisa.

-¿Sucedió algo malo? ¿Me contarías? -Pidió suavemente, acercándose y besando la mejilla ajena tiernamente. Nuevamente, sentía hacia el muchacho aquel instinto protector y no pudo evitar el frustrarse internamente, sentir esa necesidad de protegerle del mundo y de evitar que nada ni nadie pudiera hacer entristecer aquellos ojos o borrar aquella tímida sonrisa.

morgan recibio ese calido beso en su mejilla con una sonrisa timida, cerro los ojos mientras respiraba profundamente, liberando una de sus manos, queria contarle... pero le dolia el recuerdo...

- hum..e..encontre...a... a un vampiro que olia a la sangre de mi padre... y.. y perdi los estribos- dijo avergonzado de si mismo bajando la mirada. -y... yo .. yo no soy asi... pero..l..le proboque... lo incite p.. practicamente a atacarme...sin.. sin siquiera preguntar amablemente -

El cantante frunció el ceño ligeramente con sus palabras, notablemente preocupado por el muchacho aunque tuvo que recordarse mentalmente que no era humano, ni tampoco un vampiro, sino que un híbrido... Eventualmente, tendría que enfrentarse a otros vampiros, aunque la idea no le agradaba para nada y no hacía más que preocuparle. De cierta forma, veía a Morgan demasiado indefenso aunque sabía que el chico era poderoso, podía deducirlo por las razas a las cuales pertenecía.

-Son cosas que pasan, además, deduzco que te asustaste o preocupaste... Lo bueno es que ahora te encuentras bien, ¿te hizo daño? -Repentinamente sintió la enorme necesidad de abrazarle, de revisarle todo el cuerpo para asegurarse de que no hubiera ninguna herida ni nueva cicatriz, pero contuvo sus impulsos al recordarse nuevamente que el muchacho era un híbrido, poderoso, capaz de cuidar perfectamente de sí mismo. En cierta forma, eso le hizo sentir algo débil e inútil.

- mental...- declaro como respuesta a la pregunta de si le habia hecho daño, suspiro tratando de encontrar las palabras adecuadas para explicarce - cuando no c.. contesto a mi pregunta de como era..q...que olia a la sangre de mi padre, entre en estado bersek... y lo ataque, en defenza.. el creo .. u.. una ilucion... todo el daño que me hiso.. lo hiso dentro de la ilucion... pero no fue el daño.. f.. ficico lo que me dolio... sino los recuerdos... los recuerdos que tomo de mi mente y me hiso revivirlos, oirlos y sentir lo que senti hace ya casi 60 años...- sabia que no estaba tartamudeando, y sabia que su exprecion y su vos eran tristes... queria terminar de contarle... y ahabia empezado, por qeu no?.. pero necesitaba descansar un poco, unos segundos para poder explicarle que eran esos recuerdos

- hiso... que ollera cuando.. cuando unos cazadores asesinaron a Ameli...- dijo casi en un susurro - ella... ella era mi pareja.. hace 60 años... era una hybrida tambien, era tan pura.. tan inocente... jamas daño a nadie, jamas.. y aun asi... le dispararon tres veces al pecho... esos disparos.... se oian como truenos...- ya que estaba, y le explicaba el motivo de sus saltos y bufidos cada que tronaba la noche que se conocieron. - ese recuerdo.. proboco que me combirtiera en Crynos...-

Le escuchó en silencio, notando su expresión triste y desolada, su tono de voz, la forma en que había dejado de tartamudear, todo eso, le provocó un gran dolor en su pecho y una enorme frustración. Deseó haber podido estar en aquel momento y haber hecho algo, pero eso tampoco hubiera sido una opción, ¿qué podía hacer un simple humano contra un vampiro? Crispó sus puños cuando oyó su historia y más aún, cuando supo que había entrado en aquel peligroso estado; sin embargo, la expresión de su rostro era serena, preocupada, calma en comparación con su interior, sentía que le hervía la sangre. ¿Cómo podían hacerle daño a un ser tan inocente, tan puro y amable como él? Se podría decir que ahora, comprendía el por qué de su extrema timidez, de su inseguridad.

Se contuvo de comentar nada, después de todo, frente a aquella situación, ¿qué podría decir? ¿Que todo iba a estar bien? Suspiró con frustración y rabia, se sentía demasiado inútil por no poder borrarle del rostro esa expresión. Él, también había pasado por una situación compleja, casi insuperable, por lo cual, sabía que nada de lo que dijera conseguiría subir el ánimo del muchacho. En cambio, se acercó a Morgan y delicadamente, con gesto protector, lo estrechó entre sus brazos, haciendo que se acurrucara contra su pecho.

Un abrazo sincero, que decía más de lo que sus labios podían dejar salir. Volvió a suspirar con frustración mientras acariciaba los cabellos ajenos, comprendía su dolor, ahora lo hacía. Dejó un tierno beso sobre los cabellos ajenos y finalmente, luego de unos cortos instantes, se permitió hablar-. Mi querido ángel... Desearía tanto poder borrar esa expresión de dolor en tu rostro, borrar esa horrible experiencia de tu mente y prometerte que ya todo irá bien... -un nuevo suspiro frustrado, realmente, no se consideraba demasiado bueno para esa clase de cosas y aquello no hacía más que frustrarle todavía más-. Te prometo que conseguiré la forma de que esos recuerdos ya no duelan... o al menos, de que no te sientas culpable por ellos.

morgan queria contarle lo peor para el, lo patetico que se sentia al haber descubierto al final que ese vampiro era amigo de su padre que de no haberlo probocado de no haber estado a la defensiba desde un comienzo tal vez todo eso no hubiera pasado, pero lo habia hecho, pero kanade le abrazo dejandolo sobre su pecho, esta accion y sus palabras hicieron que comenzara a lllorar, morgan se cubrio el rostro para que sus lagrimas no mancharan la ropa del humano.. sabia que no podia hacer nada hacerca del pasado, ella estaba muerta y no habia podido protejerla, que tenia que pensar en el presente.... se separo un poco de kanade para poder limpiarce laas lagrimas, sollosando lijeramente logro hacerlo, dejando limpio su rostro.

- g... gracias... s... se q.. que e.. es fr.. frustrante.... n.. no poder ayudarme... o...c..cr.. creer que. n.. no me .. ayudas... e.. e. que estes.. a. aqui.. me.. me ayuda mucho...- declaro tratando de tener mas valentia de demostrar mas seguridad, kuroro los miraba a ambos desde el piso, moviendo su rabo negro de un lado al otro, nervioso... un gato demaciado intuitivo a decir verdad.. morgan se inclino subiendolo entre ambos y rascandole las orejas.

- estare... estare bien...es... es que t.. todo es muy r... reciente, solo eso...l...lo siento... e... estaba t.. tan emocionado de... de que vinieras..n...no queria p...ponerme asi... - dijo con una sonrisa triste, avergonsado, sintiendo que estaba arruinadno su visita

Dejó que llorara y sollozara en silencio, pensaba que después de todo, era bueno que se desahogara y liberara su pena. Acariciaba suavemente su espalda y cabellos, permitiéndole alejarse luego de unos momentos, viendo cómo el chico se limpiaba el rostro y sonriéndole dulcemente, aunque con cierto atisbo de tristeza y preocupación.

-No tienes que disculparte, está bien que hables de ello y que te desahogues -comentó mirándole jugar con el gato, sonriendo con algo más de alegría cuando el chico dijo que con su presencia le ayudaba, aunque el cantante sentía que en realidad, su aporte era casi nulo. Se acercó nuevamente a Morgan y sujetó sus manos con delicadeza, como si sus manos fueran de la porcelana más fina y pudiera romperle sólo con tocarle.

-Morgan.. -mencionó su nombre acercando su rostro al ajeno, mirándole fijamente y teniendo cuidado de no aplastar al gato que jugueteaba entre ellos. Se detuvo escasos centímetros de sus labios y le atrajo suavemente hacia él, rozando sus labios, levemente-. Ai shiteru -susurró, suavemente con voz ronca, en un tono íntimo, sólo para él. Tras decir aquellas palabras, besó sus labios con suavidad, de forma cálida y entregada a la vez, mientras con sus pulgares, acariciaba las manos ajenas haciendo pequeño círculos sobre su piel.

se sentia realmente contenido por kanade... seguro a su lado....le calmaba y le ponia nervioso a la vez.

vio como le sostenia las manos con tanta delicadeza, eso le hacia pensar si de veras daba una imagen tan delicada al mundo... no estaba seguro si sentirce alagado con eso o tratar de revertirlo. Kanade le llamo, y morgan levanto la vista, notandolo a escasa distancia... distancia que se hiba reduciendo practicamente a nada... probocando que milimetro a milimetro menos, su rostro fuera ruborizandoce un poco mas.. ni hablar de cuando kanade dijo eso... no era que supiera japones en si.. pero sabia lo que significaba al menos esas palabras... su padre se las decia constantemente a Quinn... conocia incluso una respuesta ecxesibamente simple que podia ser tomaba como valida. claro que su hilo de pensamientos se vio cortado completamente cuando al fin la distancia se redujo a cero, y kanade le beso.

era un beso saube, uno que le erizaba la piel, y le hacia temblar levemente, al separarce, con los ojos cerrados, solto un lijero y timido suspiro.. tratando de recordar esas palabras que le eran ajenas a su lenguaje...

- w... watashi...m.. mo- dijo completamente colorado mirando sus manos en las ajenas.. lo habria dicho bien? se entenderia lo que queria decirle?

Al separarse, sonrió feliz por aquella tímida respuesta, observando aquel sonrojo en sus mejillas... así era como más le gustaba, prefería verlo sonrojado a más no poder, a verlo con el rostro pálido y aquella triste expresión. Soltó una de sus manos y dejó una suave y juguetona caricia en la mejilla del muchacho, para luego suspirar, con más tranquilidad ahora que le veía bien otra vez.

-En verdad, me gustas mucho. A pesar del poco tiempo... siento que estoy enamorado de ti -susurró bajando la vista a sus manos, entrelazando sus dedos con él sintiendo su calidez. Con la mano libre, dejó una tierna caricia sobre el gato, Kuroro, quien maullaba bajo y se refregaba contra su costado clamando por atención, lo cual, le hizo sonreír, ligeramente sonrojado por exponer en voz alta sus sentimientos.

"enamorado" ???

morgan sintio realmente que se quedaba congelado, completamente colorado, pero congelado anteesa confecion, dejando que entrelazara sus dedos, observandole con los ojos muy abiertos y el labio inferior temblando lijeramente.. observo como acariciaba a kuroro...

- nes... nescecito tomar algo..... n.. no quieres nada?... seguro???- pregunto mas que nervioso soltando su mano de la de kanade y levantandoce, llendo casi de una corrida ( a velocidad humana) hacia la cocina, ocultandoce practicamente tras la puerta de la nevera mientras buscaba una botella de agua fria.

-Ehm... un vaso de agua, estaría bien... -comentó, observando cómo el chico desaparecía hacia la cocina, demasiado rápido como para alcanzar a detenerle en su huida... ¿tal vez se había apresurado un poco al confesarle sus emociones? Bajó la mirada nuevamente, hacia el gato, jugueteando con él y dejándose morder y arañar nuevamente, parecía que al pequeño felino le agradaba bastante desquitar su estrés contra su desdichada mano, la cual volvía a quedar surcada de marcas sonrosadas y algunos pequeños rastros de sangre.

-Hey, pequeño, que eso duele -se quejó ligeramente contra el felino, sintiéndose un poco mal, no quería que Morgan siguiera escapando y huyendo de él, se sentía un poco vacío y más ahora, que le había dicho abiertamente que se estaba enamorando de él... Aunque si lo pensaba detenidamente, eran aquellas reacciones del muchacho, las que le hacían ser tan deseable, tan dulce e inocente. Era aquello, su forma nerviosa y tímida de reaccionar, lo que a la vez le gustaba y le dolía.

morgan paso el agua a una jarra de vidrio, la cual puso en una bandeja al igual que los basos y unas galletas saladas. haciendo tiempo para calmar sus nervios, sentia que le temblaban las piernas tras la confecion de kanade, tampoco podia detener su respiracion apresurada... hiso lo mejor que pudo para con sus nervios, tomo la bandeja y volvio a la sala.

- t. .tambien.. tambien traje unas galletas..- dijo aun algo colorado, ya casi llegando al sillon, su pie se trabo con la alfombra de la sala, lo que hiso que se tropesara, por suerte no estaba muy lejos del sillon, por lo que callo en el, pero la bandeja y su contenido se le fue de las manos... algo avergonzado levanto el rsotro para disculparce, epro solo termino con vapor saliendole de las orejas al ver que habia derramado toda el agua sobre kanade..

- L...L.... lo o... lo siento!!!!- dijo sin saber como actuar de ahi en mas... kuroro habia saltado del sillon todo mojado tambien y bufando, pero, morgan no podia sacar los ojos de kanade... cuya camisa blanca se le habia pegado al cuerpo, marcando su pecho...

Realmente, a veces su suerte no era la mejor, aunque eso pocas veces conseguía que su ánimo decayera. Y esta, no fue la oportunidad, claro está, pese a estar totalmente empapado por culpa del agua de la garra. Se sobó levemente la cabeza, en donde había aterrizado uno de los vasos, y observó sus cabellos alisados... ahora, todos mojados. Casi se le fue el alma a los pies y rápidamente los soltó de la coleta, pero eso no sirvió de mucho, la humedad hizo rápidamente estragos en sus dorados rizos.

-Ahm... Descuida, no pasa nada... -comentó sin mucho ánimo... Bueno, tal vez, aquella situación sí consiguiera afectar su ánimo, bastante, al verse a sí mismo, realmente parecía un gato mojado. La camisa blanca le escurría y e le pegaba al pecho, haciéndole estremecer un poco por el frío-. Sólo es agua, ¿estás bien? -Se obligó a prestarle atención al chico a su lado y dejar de pensar un minuto en sí mismo, notando el sonrojo de Morgan y sonriéndole ligeramente, intentando no pensar en el delineador que se le corría, el cabello mojado, húmedo y desarreglado, la ropa que se le pegaba al cuerpo...

Vale, tal vez no era tan capaz como pensaba en un principio, de ignorar su lamentable estado. Pasó sus dedos bajo sus ojos, sacándose un poco el delineador negro y la sombra, y volviendo a bajar la vista hacia su ropa-. Mmm... ¿me prestarías una toalla? -Pidió casi en un murmullo, apenas audible, casi se diría que le rogó por la toalla. Se puso de pie temblando un poco de frío, sin ánimos de estrujar su camisa para no mojar... más, la alfombra y el sofá.

ante el pedido de kanade, morgan asintio violentamente, aun ruborizado.

- s.. si... v.. ven... l... lo siento...- declaro sin darce cuenta que estaba tomando a kanade del brazo y llevandolo a a su habitacion para llevarlo al baño de alli y que pudiera usar cuantas toallas quiciera, ni se percato de que lo estaba haciendo pasar a su habitacion o de que obvio sin notar el segundo baño del departamento, el cual evitaba que pasaran a su habitacion... simplemente lo llevo alli.

- arghhh.... y.. y...ac.. acabas de re... recuperarte!!! - dijo sintiendoce culpable, desabotonando rapidamente la camisa de kanade para que se quitara la prenda humeda de ensima.. fue cuando le descubrio lso hombros, cuando cayo en la cuenta de lo que estaba asiendo, soltandole inmediatamente quedando congelado mirando el pecho ajeno, palido, lampiño... perfecto.

- h.. huu..y.. yo.. ha...- no podia realmente ordenar sus ideas en ese momento.. que demonios estaba haciendo??....