Let's go party tonight - Lutho

-Tienes pésimo gusto, Romeo -reí por lo bajo, dejando que se bebiera mi vaso y acomodándome junto a mi nueva conquista, ante quien me había presentado como Juliette. Él, como era de esperar, no entendió la referencia de nuestros nuevos nombres: en éstos tiempos eran escasos los cultos que sabían siquiera de la existencia de una era antes de la guerra. El chico me rodeó la cintura y apartó una silla a su otro costado para Andy.

-"Un gusto, soy Cam" -se presentó el chico, sonriéndole de forma coqueta y lasciva. Un detalle sin mucha importancia para mí, dado que ya me había invitado a un trago y a su hotel, incluso a dar un paseo en su limusina. Uno de los hombres de Northman, por supuesto-. "Pidan lo que deseen a mi nombre, por una compañía tan agradable como ustedes..."

Reí de forma algo tonta y vacía, a veces me fallaba la actuación pero servía lo suficiente. Cuando se acercó el camarero pedí un JD y una botella de absenta, ya tenía alguna que otra idea para quitarle el mal sabor de la boca a Andy y al mismo tiempo ganar la apuesta.

Me sente junto a ellos - Que puedo decir me gustan los chicos malos, es algo que no puedo evitar me atrae el peligro - le dedique una sonrisa seductora al chico - tu entiendes.

- Un gusto Cam, soy Romeo - salude y casi tuve que morderme la lengua para no soltar a reir con ese nombresito, pero bueno parte de mi "trabajo" tambien incluia ser un buen mentiroso - creo que ya he sido presentado por esta bella señorita que me acompaña, aunque creo que nosotros emos sido los que corrieron con suerte hoy - me acerque mas a el - Julie - abrevie su nombre falso - dijo que nos invita a otro sitio

-¿Nos llevarás a conocer el paraíso, Cam? -Le pregunté en tono coqueto, dejando que me abrazara por la cintura y notando cómo hacía lo mismo con Andy, atrayéndonos a ambos hacia su cuerpo fornido aunque delgado. El camarero llegó con nuestro pedido y tras tomar mi vaso, bebí un largo trago del delicioso líquido, mientras Cam se preocupaba más de corrernos mano a ambos y coquetear con Andy.

-"Beban tranquilos y luego los llevaré al lugar más exclusivo que conocerán jamás" -ronroneó el chico, para luego robarme un beso fugaz. Sonreí de lado y correspondí a sus labios, para luego ver cómo le coqueteaba a Andy antes de robarle un beso también. Reí ligeramente, no me importaba compartir a mis presas mientras tuviera alcohol, y además, prácticamente la apuesta la había ganado-. "Hoy todo va por mi cuenta, bonitos."

-Mira, Romeo, puede que hayamos encontrado a quien nos adopte -comenté, dejando mi vaso sobre la mesa y observando a Andy, quiñándole un ojo.

Me senti coo si estuvieramos actuando como unos verdaderos golfos y warros pero l jueguito me gustaba, la mano del chico que primero descansaba en mi hombro de deslizo con cautela rodeando mi cintura, moviendo los dedos para sentir mi desnuda y tibia piel, luego sus labios buscaro los mios.

Sonrei cuando aseguro que pagaria todo lo que quisieramos - ¿Enserio? Wow gracias - tome su rostro y yo pase ahora mis labios sobre los suyos- Creo que hemos tenido suerte Julie o quiza el de la suerte fuiste tu - le guiñe el ojo.

Nota mental, decirle a Lutho que ahora entendia eso de ganar dinero con el fisico.

- Y dime ... seguro que pagaras todo lo que nosotros queramos - tome el rostro de la chica y lo acerque al mio pero sin besarle - Somos muy exigentes y caros verdad cariño.

-Así es... somos dos mininos bastante finos, miaaw -maullé coquetamente, mirando a Andy a los ojos de forma coqueta y finalmente atrayéndolo hacia mí, besándolo con deseo. Al separarnos, noté que Cam nos miraba excitado y sonreía de forma boba, en un gesto algo tierno. Me acurruqué en su pecho y llamé al camarero, pidiendo una ronda de JD y una botella del mejor ron del local. Nuestra presa sólo sonreía y asentía, nos apretaba, nos tocaba, y decía al camarero que anotara todo a su cuenta.

Al final, aquella noche se había puesto en verdad divertida y prometedora. Y si el chico tenía suerte y no se ponía demasiado pesado, tal vez no tendría que matarlo y sería una carga menos en mi consciencia.Noté que Andy también se divertía, eso era bueno y me dejaba algo tranquila.

El inesperado tiron de Lutho no fue tan sorpresivo como su beso, extraño, muy extraño, hacia demasiado tiempo desde que habia besado a una chica, aun me gustaban las chicas o eso creia, apesar de eso correspondi su beso de la misma forma y aunado a eso una mano de aquel hombre se deslizo por mi espalda.

- Te sacaste la loteria con nosotros - le guiñe un ojo y aparte un mechon de pelo del rostro de la chica mientras ambos reiamos, luego tome la botella y le di un grande y enorme trago para luego limpiar mis labios con el dorso de la mano. Caim murmuro algo que no entendi y luego se acerco a nosotros ligeramente proponiéndonos ir a un lugar mas "divertido" lleno de todo lo que quisieramos y pidieramos - No lo se - sonrei - ¿Que opinas tu Julie? - mire a la chica - ella manda le dije al chico

-Yo opino que vayamos a un lugar más privado y divertido -ronroneé, tomando la botella de ron y dándole un largo trago, sintiendo cómo el líquido me quemaba la garganta. Luego deposité un juguetón beso en la mejilla del chico y nos pusimos los tres de pie, listos para salir del local. Cam continuó al medio entre Andy y yo, sin quitar sus manos de nuestras cinturas, y nos guió a la salida, directo a un gran coche negro bastante bonito.

-Qué daría por uno de estos.. ¿es tuyo, Cam? -pregunté con aquel tono meloso y dulzón propio de una chica "tonta y rubia". Cam asintió con una gran sonrisa y me atrajo más hacia sí.

-"Si se portan bien, y son unos buenos mininos de compañía, puede que les deje tener su juguete propio" -comentó para luego reír ligeramente, mientras nos abría la puerta del copiloto.

Los segui, sientiendome como edecan barato pero bueno ya estabamos en esto asi que a ver hasta donde llegábamos, sonrei al ver su auto, nada sorprendente a mi vista, en casa Dennis tenia algo mejor a eso y los autos de la mansión Merchant también no eran menos que aquello pro bueno a actuar se a dicho.

- wow ¿ enserio nos darías hago así? - me abrace a su cuello - pero somos muy celosos a veces, necesitamos uno para cada uno - murmure cerca de sus labios antes de subir al auto después de la Lutho - ¿Que hacemos con este sujeto? - murmure mientras Caim daba la vuelta al auto - Vamos nos tiene ganas, y no lo culpo pero realmente no se la vamos a poner fácil ¿verdad?

Como están mis chicos dijo entrando al auto.

- Impacientes - sonrei como tonto rodeando el cuello de Lutho para justifica mi cercanía con ella

-Cómo se nota que eres principiante, déjamelo a mí -dije en voz baja ante de que el chico subiera al coche. Luego, le guiñé el ojo a Andy y me recargué en el asiento, dejándome rodear por mi compañero y sonriendo tontamente, cruzándome de piernas.

-Me muero de ganas de llegar a un sitio caliente, aquí hace tanto frío... -comenté haciendo un puchero, dejándome besar en los labios por Cam para luego verle encender el coche y partir en dirección a las calles y avenidas principales. En la mayor parte del camino, noté cómo colocaba su mano derecha sobre mi muslo desnudo y me acariciaba de vez en cuando. La música a todo volumen ayudaba a evitar una mayor conversación, y eso me ayudó a pensar en cómo deshacernos de él y al mismo tiempo aprovechar un poco más de lo que podía ofrecernos.

-"Ya llegamos, mininos" -anunció entonces el chico, sacándome de mis pensamientos. Sonreí abiertamente al reconocer el hotel y la calle, eso ayudaba bastante a mis planes de escape furtivo.

¿Pues cuanto tiempo esta chica llevaba haciendo cosas así? Me quede mirándola un rato en todo el camino no podía imaginarme ni una pequeña parte de lo que esa chica podía hacer o era capaz de hacer o de las razones que le habían llevado a ese punto. Sonreí, estaba loca pero venia del mismo lugar que yo, eso de me daba una esperanza ¿en que? No sabia pero a fin de cuentas así lo sentía.

"Mininos" ¿Que me vio cara de gata o que?

Me acerque a ella cuando Caim bajo del auto y se dispuso a abrirnos la puerta - Mas te vale que tengas una buena idea por que si este hombre intenta tocarme mas abajo de la cintura lo rasguño y le vuelvo la cabeza - dije divertido.

Abrí la puerta y bajamos al nada expresivos hotel - Wow es encantador y caro - murmure falsamente - ¿Que venimos a hacer aquí? - dije ingenuamente - ¿jugar poker?

Caminamos hasta el lobby y lo escuche pedir la mejor habitación del sitio, vaya que este hombre iba directo a su destino sin escalas

No pude evitar darle un disimulado codazo a Andy por su tan falso tono de voz, notable incluso a kilómetros. Entramos en el hotel y en el momento en que él pedía la mejor habitación, me pegué a su costado y le sonreí con un ligero puchero-. Oh, ¿pedirás algo para beber? Nunca he probado el champán... -le dije pasando una mano por su brazo coquetamente.

Por supuesto, el tipo pidió una botella del mejor champán que tuvieran y luego nos dirigimos hacia el elevador. Disimuladamente le guiñé el ojo a Andy antes de entrar, señalándole mi mochila que aún traía puesta, por supuesto. Una vez los tres solos dentro del elevador, Cam se dedicó a besarnos a ambos, bastante excitada e insistentemente, y yo sólo me limité a corresponder de forma melosa, aunque con la mente en mi nuevo plan. Sí, estaba segura, entre mis herramientas de cazador, siempre traía ciertos brebajes interesantes... y con las gotas suficientes, sin que lo notase, se quedaría profundamente dormido. No habría necesidad de matarlo, esta vez.

A esta de seguro la tiraron de chiquita o nació mal de su cabecita, por mas que trataba de adivinar que planeaba no se me ocurría nada, ya estábamos en un hotel y eso me ponía de ciertos nervios que trataba de ocultar, estaba seguro que ese hombre apenas cruzara la puerta de la habitación iba a cobrarse los "regalitos" y el que apenas el elevador cerrase su puertas y se nos lanzara encima me confirmara la teoría.

Sonreí lo mas que pude pero creo que ligeramente le empuje un par de veces en el proceso de subir.

"Respira Andy, respira .... ademas las damas van primero no?"

Mire el amplio pasillo cuando salimos del elevador, el tomo de nuestras manos y jalo de nosotros hasta una de las múltiples puertas de ese vació corredor.

Adelante, su voz ansiosa nos abrió la puerta y yo casi corrí hasta el otro extremo de la habitación, específicamente la ventana mientras decia cuan enorme era el sitio, luego mire a luto cuestionandole con la mirada

Una vez en la habitación era cosa de esperar al champán, noté las insistentes miradas de Andy y me sonreí divertida, se notaba que no estaba acostumbrado a esta clase de cosas y su timidez era evidente. Tuve tantas ganas de reírme en su cara y decirle que tenía miedo, pero resistí, ya que el juego aún no había terminado. Mientras Cam aseguraba la puerta, me acerqué a la ventana junto a Andy y le hablé en susurros.

-Cuando llegue el champán distráelo, yo me encargo del resto. Eso y mejora tu actuación -murmuré bajo, notando por el reflejo de la ventana que el tipo se acercaba a paso lento y depredador hacia nosotros. Me hice la tonta y fingí un sobresalto cuando me abrazó por la cintura-. Tienes una vista preciosa, ¿es igual por las mañanas? -pregunté con ojos inocentones y sonrisa pícara.

-"Ya lo comprobarán, es una vista realmente agradable" -medio ronroneó él, dando un paso atrás y recorriéndonos a ambos con la mirada. El deseo se le notaba en los ojos y en su sonrisa.

Gruñí internamente cuando no me dio tiempo de contestarle, suspire y segui con la cara mas alegre que podia ponerle - ¿Sueles usar mucho esta habitacion, Caim?

El seguia con su manos sobre el cuerpo de la chica, cuando alguien toco a la puerta - Llego el champán - el abrió la puerta en su empeño por ser caballeroso para nosotros, una mujer enfundada en blanco entro con un carrito que dejo a la mitad de la habitacion y luego se fue.

Caim boto el corcho y tomo una de las copas, yo mire a luto y asenti a lo que me pidio hacer - Caim - lo llame para que me mirase - Caim es un nombre muy curioso y con un significado muy fuerte, yo me pregunto - me acerque poniendo mi dedo en su pecho dandole vueltesitas sobre la ropa - ¿Que tan curioso y fuerte eres tu? - pase mi mano por su nuca atrayendole a mi - Muestrame por favor - acerque su rostro al mio pegando sus labios a los mios en un beso profundo que rayaba en lo descarado, su manos corrieron mas abajo de mi cadera, estrujando, movi una de mis manos para hacerle una señal a Lutho

Aproveché el momento en el cual llegó el champán, para dejar mi mochila sobre un sofá cercano. Mientras Caim se ocupaba de destapar la botella y Andy lo distraía, aproveché de buscar aquel pequeño frasquito... ¡bingo! Era una botellita muy pequeña que cabía en la palma de mi mano, con un líquido negro en su interior.

Admito que esta vez Andy me sorprendió, creía que era más tímido y cortado, pero ya veía que no. A su señal, me acerqué sutilmente al carrito en donde estaban las copas y terminé de servir el champán, dejando caer sutilmente tres gotitas de aquel líquido en cada una, por si las dudas. Apenas las gotas se mezclaron con el líquido, su color negro desapareció y desaparecieron, bendita magia, que lograba cosas así.

Como Andy seguía tan encariñado con nuestro nuevo amigo, me acerqué a ellos con aparentes celos y me dediqué a acariciar los cuerpos de ambos chicos, para luego ser besada de forma ardiente por nuestra querida nueva presa. Sin embargo, no dejé que se pusiera demasiado cariñoso conmigo y lo aparté sutilmente, tomando una de las copas-. Brindemos, por la hermosa y divertida noche que nos espera.

Senti la cercania de Lutho y casi de inmediato aparte a Caim agradeciendo que la chica ahora tuviera su atención, pase mi mano por mis labios con las enormes ganas de darle un trago a la botella para quitarme se sabor.

"Asco, asco, asco, iuuughhhhh, asco"

Sonreí mientras ponían una copa en mis manos, le di un ligero vistazo, no sabia que había hecho la chica pero me imaginaba tenia que ver con la bebida, así que no la bebí pero incite al hombre a hacerlo - Sin dejar nada Caim - le guiñe el ojo dejando la copa en el carrito sin que lo notase,

-"Por ustedes, mis mininos" -dijo el chico antes de llevarse con total confianza la copa a los labios y beber un pequeño sorbo. Yo también me llevé la copa a los labios e hice como si bebiera, para luego dejar la copa intacta sobre el carrito y sonreír divertida.

-Sabe exquisito, ¿no crees Andy? Hacía años que no bebía un buen champán -comenté, acercándome a Andy y viendo fijamente a nuestro nuevo amigo. El chico bajó la copa nos miró con el ceño fruncido, "cierto, el sabor", recordé, pero bueno, él ya había bebido-. No es veneno si es lo que piensas -comenté con mi tono de voz normal, algo fría y con la mirada altiva-. Buenas noches, Caim. Sueña con nosotros...

Con un rápido movimiento, le di una fuerte patada en la cabeza que lo derribó y medio noqueó, aunque la poción hizo efecto con rapidez. En cosa de segundos estaba profundamente dormido y roncando, sin saber nada del mundo.

-Gané la apuesta, me debes una ronda -dije de inmediato girándome hacia Andy, sonriendo triunfalmente-.

- Ya lo mataste - dije mirándolo en el suelo.

- ¿Que le pusiste a esto? - dije recuperando la copa que me había servido - Ok ok te debo una ronda, tu ganas, ten empieza con esta - le estire la copa y solte reir, luego me puse en cuclillas frente al hombre - ¿Que vamos a hacer con el? ¿lo destazamos, lo mutilamos o lo aventamos al rio?

Me puse en pie con mas tranquilidad - Ahora que sigue Señorita Julieta - comencé a inspeccionar los bolsillos del hombre

-No lo maté, sólo está dormido. Creo que lo usaré de juguete más tarde, así que nada de destripamientos ni mutilamientos -dije, tomando la copa y dejándola a un lado, para tomar directamente de la botella mientras él registraba los bolsillos-. Mmm delicioso... -luego me giré a verle y me agaché a su lado-. Hay que llevarlo a la cama, cuando despierte no recordará nada del golpe ni la copa.

Me levanté luego de asegurarme de que su ritmo cardíaco estaba en orden y cogí ambas copas con champán, vertiéndolas sobre una de las plantas. Luego las dejé sobre el carrito y me puse a inspeccionar la habitación, nada de cámaras de seguridad. La cama se veía bastante cómoda y no me resistí la tentación de tenderme sobre ella-. Por los dioses, qué comodidad...

- Y lo desnudamos para que crea que le fue bien? - dije vaciando su cartera y volviendo a ponerla en su pantalon - ¿Que le diste exactamente? - pregunte cuando vacio las copas - Supongo que vas bien equipada a todos lados, nunca habia pnado eso de drogar gente, me paree una buena idea, quiza pronto me de por hacer algo asi.

Me puse en pie acercandome a ella para tomar la botella de sus manos y darle un gran trago - ¿Y ahora que mas hacemos aqui? Si nos vamos ahora la recepcionista sospechará y dejar una botella casi llena es pecado mortal que se castiga con el sufrimiento eterno

-¿Aún no entiendes el plan? -dije desde la cama, inclinándome para verle-. Mira, lo arrastramos a la cama y lo desnudamos, luego mientras el descansa nosotros bebemos hasta dejar este lugar vacío y nos dormimos en esta cómoda cama... ¿no querías un buen lugar para pasar la noche? Por la mañana solo nos desnudamos y cuando despierte, le hablamos sobre nuestra gran noche de pasion locura desenfrenada.

Bostecé y me levanté de la cama, busqué la mini nevera que había visto hacía unos minutos y la abrí. Dentro, botellas de alcohol de todos los tipos y marcas, perfecto para morir en paz. Saqué un par de latas de cerveza-. Hey, cazador, ¡piensa rápido! -exclamé lanzándole una, para luego abrir la mía y acercarme-. En mi clan de cazadores, era tradición celebrar las victorias con cerveza. Así que, ¡salud! -dije con una enorme sonrisa, chocando mi lata contra la suya.

- Se ve que esto es algo que ya tienes muy bien practicado eh - tome la cerveza y la choque con ella la cerveza - ¿Cuantos años llevas haciéndolo? - pregunte curioso, su plan no sonaba tan mal, era alcohol gratis, mis dos palabras favoritas juntas.

- Hey lutho - me senté al borde de la cama pasando sobre el cuerpo inerte - Hablame de tu familia - sonrei - ¿Cual es tu historia?

-Pues ya llevo algunos años de práctica, no sé, como desde los 14 más o menos -le dije con una sonrisa divertida, abriendo la cerveza y bebiendo un largo trago, ¡vaya! Parece que tenía algo de sed y ni cuenta me había dado. Me acerqué al equipo de música y lo conecté a mi teléfono, algo de buena música no nos vendría para nada mal...

Puse un tema relajado para ponernos en ambiente, algo suave para empezar, y luego me acerqué donde Andy y me senté sobre la alfombra con las piernas cruzadas-. ¿Mi familia? Creo que aún no estoy tan ebria como para soltar aquella información... -me encogí de hombros riendo leve-. Pues, ya sabes, los Linnankivi fueron exterminados hace años por un demonio. Pasamos de ser el clan más fiero y fuerte, a ser una leyenda muerta... -suspiré pesado tras decir eso y bebí un nuevo trago de mi cerveza-. Es tu turno, cuéntame un poco de tu familia... Vamos por turnos.

La observe moverse por la habitacion poniendo musica. - Si he oido mucho de tu familia - sonrei - pero es mejor escucharlo de viva voz de alguien que lo vivio que de alguien ajeno - me encoji de hombros - Yo tampoco estoy tan ebrio pero supongo que tambien haz oido mucho. Los JonBenét ¿Que puedo decir? Mi familia es aburrida, llena de protocolos y normas a seguir, y mirame, ¿Realmente me ves como a un superior? - tome la botella dandole un gran trago - Yo creo que soy adoptado.... No encajo alli, por eso escape. Syeba cobarde, no?

-Probablemente seas adoptado, sobretodo con esa cara tuya... -comenté con expresión seria, para luego echar a reír-. Recuerdo haber visto una vez a tu padre... Y créeme, te prefiero mil veces a ti. Eres un líder al que seguiría sin dudarlo -dije esta vez de forma sincera, estirándome felinamente y bebiendo un nuevo trago.

-Yo sí que me considero cobarde... debí haber muerto con mi familia, no sé por qué sigo con vida -suspiré pesado y me llevé una mano al rostro, apartando mis cabellos hacia atrás y mirándole con cansancio y tristeza en la mirada.