Coliseum maiestatis *Priv. Giorgio*

por Invitado Miér Abr 04, 2012 3:01 am

Era reconfortante apreciar con tanta tranquilidad y silencio un sitio que en su tiempo fue un teatro donde la muerte, el sufrimiento, los gritos, el horror y la sangre fueron sus protagonistas. Recuerda la primera vez que estuvo allí, en los tiempos donde los césares reinaban y la guerra era alabada como un medio de expansión territorial. Su inauguración fue una festividad que se escuchó en cada rincón de Roma, y el infierno bulló en alegría por ver otra manera de atraer almas perdidas y condenadas a sus dominios.

Limpiando una de las butacas de roca entre las primeras filas de la edificación, se sentó como si el lugar le perteneciera, colocando ambas manos sobre la cabeza de serpiente de su bastón y permitiéndose rememorar los gritos alentadores de un público enardecido, en pos de ver sufrir al alma, culpable o inocente, que se presentaba en la arena. Era como observar a sus propios hijos jugueteando entre las llamas infernales, dándole las almas más agonizantes a Cerbero para que las masticara vivas, o permitirle a criaturas más crueles, dementes y deformes, acabar con seres que apenas cargaban con culpa, pero que los alados prefirieron despreciar.

Abrió los ojos y tamborileó la base de platino con los dedos, esperando pacientemente la llegada de 'alguien'. Pero no tenía prisa. Claro que no. No mientras las memorias placenteras bulleran a su cerebro y lo llenaran de eventos satisfactorios de una sociedad que, tras morir, se ganó un pase directo a sus dominios.

por Invitado Miér Abr 04, 2012 6:03 am

Una magnifica lechuza apareció volando, ningún sonido advertía de su cercanía o el peligro a sus presas, era un cazador silencioso deslizándose grácilmente por el aire. Sin embargo traía colgando de sus patas un gran trozo de tela, el cual soltó cayendo hacia el suelo, pero poco antes de que lo alcanzara la criatura alada se arrojo contra esta estrellándose en un despatarrado bulto que crecía y se removía hasta que asomo la despeinada cabeza de Giorgio.

El chico se apresuro a recomponerse y acomodar lo más dignamente su improvisada vestimenta antes de subir a las gradas donde su señor le aguardaba, no tardo en llegar a su lado haciendo una reverencia muy formal para luego quedar de pie ante el, con la espalda recta a la espera de instrucciones. El joven prefería que los encuentros con el demonio fuesen breves, Samael era extremadamente estricto y exigente, eso sumado a su crueldad y carencia de sentimientos lo hacia un jefe temible.

- Di cosa hai bisogno?, Mio signore (¿que necesita?, mi señor)- interrogo, sea lo que fuese no creia que se tratara de una tarea agradable, mayormente se suponia que era un mensajero, pero nunca se sabía que le solicitaria el gelido ser.

por Invitado Miér Abr 04, 2012 11:24 am

Los ojos plateados siguieron con meticulosidad cada movimiento de su fiel vasallo desde que hizo acto de presencia. Lo vio volar, descender y acomodarse la ropa presurosamente antes de acercarse, deleitándose con cada acción. Era tan exquisito a la vista...seducía a su mente para ceder ante el deseo de cortarle las alas y verlo caer en desesperación.

Sin embargo se permitió elevar una ceja y portar una sonrisa socarrona. ¡Ah...! Pobre de su pichón. Ahora tendría que castigarlo...

-Pensavo che sarebbero venuti a dirmi qualcosa, Giorgio (Pensaba que venías a informarme algo, Giorgio)-desvió la mirada del metamorfo para elevar el bastón a la altura de su rostro, examinando los ojos esmeralda de la serpiente plateada-Cosa non ti ha dato l'ordine di informarmi quali nuovi sviluppi in questo mondo? Anche una sola settimana mi avete dato, la mia penna cara ... non mi può dare una visione d'insieme?(¿Qué no te había dado la orden de informarme cuáles son los nuevos acontecimientos en este mundo? Incluso te di una semana, mi querido emplumado...¿no eres capaz de darme un resumen general?)-suspiró, falsamente acongojado, deslizando sus delgados dedos por la fría superficie del platino-Ho paura che devo punirti ma voi siete in grado di dirmi qualcosa di coerente e interessante. (Me temo que tendré que castigarte sino eres capaz de decirme algo consistente e interesante).-Los ojos de la serpiente brillaron emocionados, repasando mentalmente todo aquello que podría hacer para juguetear con su mascota-Hai 30 secondi. (Tienes 30 segundos.)

por Invitado Miér Abr 04, 2012 1:37 pm

Los ojos del muchacho se abrieron ampliamente permitiendo apreciar el pálido verde de sus pupilas, boqueo algunas veces sin que nada saliese de sus labios. No recordaba que Samael le hubiese solicitado tal información, sin embargo resultaría inútil discutir con el, incluso eso podría solo empeorar su situación, así que empezó a pensar, tratando de desentrañar cualquier información que pudiese interesar a un demonio.

- Mio signore ... io ... (Mi señor… yo…) - empezó torpemente – La notizia che ho è che tutti parlano allo stesso sito (Las noticias que le tengo es que todos hablan de un mismo sitio) – dijo encontrando un hilo al que cernirse – Los Angeles City – revelo el joven – Dicono che è lì il male si concentra (Dicen que es allí donde el mal se concentra) – Todos los mayores del pueblo solían hablar constantemente de esa ciudad como el sitio más ruin que existiera, incluso el debía darles la razón, pues el demonio que había destruido a su familia y su vida había venido de ese lugar –E 'la nuova Babele, vi abbondano tutti i tipi di creature, tecnologia e maggiore economicità di oggi ci sono (Es la nueva Babel, allí pululan toda clase de criaturas, la tecnología y la economía más elevada de la actualidad están allí) – esperaba haber captado el interés del mayor, pero siendo un muchacho de campo, el mismo estaba perdido sobre lo que acontecía fuera de su hogar. – Ricercherà per te, mio signore, tutte le informazioni su questo sito (Buscare para usted, mi señor, toda la información sobre ese lugar) - aseguro el chico - – dammi solo un po 'di tempo (sólo déme un poco más de tiempo)

por Invitado Miér Abr 04, 2012 2:22 pm

El demonio se carcajeó internamente por la reacción desesperada que su pichón. Pensó que el haberlo sorprendido con una acción que no existía iba a paralizarlo y dejarlo en silencio, pero por más que sus pupilas se dilataron y contrajeron en segundos, o que su cuerpo se tensara junto a su mandíbula, fue capaz de responder.

Los Angeles City...había escuchado rumores esporádicos acerca de aquella ciudad del pecado. Pero debía confirmarlo, tal vez encontrara cosas allí que le fueran útiles. Gio había sido un buen vasallo...pero no estaba en humor de dejarlo ir impune.

-Ah...Gio, Gio, Gio...- negó suavemente con la cabeza, mirando al muchacho con sus malévolos ojos sonrientes, disfrutando el momento-E 'stata una buona introduzione, la mia Chick cara... (Esa ha sido una buena introducción, mi querido polluelo...)-lo felicitó, pero a forma en la que sus palabras emanaron reflejaban cierta inconformidad-...ma non abbastanza (más no es suficiente)-sus facciones se endurecieron mientras los ojos plata se clavaban en las claras pupilas del metamorfo-Hai bisogno di informazioni sostanziali, Giorgio. Luoghi, persone con le quali entrare in contatto, sapere chi sono coloro che hanno il potere nelle loro mani, i loro livelli di intelligenza, anche se non camminavano in una coda, qualcosa ... non solo sa dove si incontrano. Inoltre ... (Necesito información sustancial, Giorgio. Lugares, personas con las cuales contactar, saber quienes son aquellos que tienen el poder en sus manos, sus niveles de inteligencia, el si tienen o no una cola que les pisen, algo...no sólo el saber donde se reúnen. Además...)-el demonio se permitió hacer una pequeña pausa antes de proseguir-è solo la città, Gio. Non ho menzionato luoghi di incontro di interesse. Luoghi in cui condividere informazioni basofia, o dove marciscono nelle sue ricchezze lo spendere. Questo è quello che voglio. Non ci sono linee che adornano questi infelici di essere così vago. (es solo la ciudad, Gio. No me mencionas puntos de reunión, de interés. Lugares donde la basofia comparte información, o donde los que se pudren en sus riquezas van a gastarlas. Eso es lo que quiero. No estas míseras líneas que adornas para que no sean tan vagas.)-Se permitió mirarlo de forma condescendiente, pero sus orbes brillaban, delatando lo mucho que disfrutaba ese diálogo-Ho paura che devo punirti, Gio. Ma non preoccupatevi...(Me temo que tendré que castigarte, Gio. Pero no te preocupes...)-sonrió, antes de lamerse los labios y dejar que la comisura izquierda de sus labios se levantase-Mi sarà molto più agevole ... avevo detto nulla (...seré mucho más suave que me hubieras dicho nada).

por Invitado Miér Abr 04, 2012 11:42 pm

Trago saliva mientras temblaba perceptiblemente, en su mirada había una súplica que sus labios no se atrevían a pronunciar. El terror se instalo en sus pensamientos, sabía que clase de terribles cosas un demonio podía hacerle y sólo podía imaginar las más crueles viniendo de su frio amo, en especial cuando sus ojos tenían ese brillo de emoción.

Era locura pura lo que lo poseyó para que cambiara dejando abandonada a los pies de Samael la tela con que antes se cubría, salía volando velozmente bajo la forma de un ágil halcón, esa era su forma más veloz. Pero si se hubiera detenido a pensar no hubiese hecho tal tontería, más allá de lo perceptible a los ojos, su cuerpo y su alma estaban encadenados por el maligno poder de Samael.

Agito sus alas elevándose rápidamente en el obscuro firmamento, su visión nocturna no era de las mejores, sin embargo si se elevaba lo suficiente para alejarse del peligro de los arboles, edificios y tendido eléctrico, no necesitaría preocuparse de aquello que no viese en la obscuridad.

por Invitado Jue Abr 05, 2012 3:56 am

Samael soltó una carcajada cuando, en su desesperación, su joven mensajero tomó su forma animal y trató de escapar lo más pronto posible.

Relajó su postura, dándole oportunidad de deshacerse de las ropas que cargaba bajo sus alas y salir como un halcón. Bella, pequeña, elegante e inútil criatura. Pero al haberse posado sobre las arenas del coliseo, desenfundó su querida espada, blandiéndola hacia donde estaba el ave, e invocando un rayo lo suficientemente potente para estrellarse contra él y hacerlo sacudir su minúsculo cuerpo.

-Dove stai andando, Gio? (¿A dónde crees que vas, Gio?)-se puso de pie mientras el animal caía en picada, pero tratando desesperadamente por poner nuevamente sus alas en funcionamiento-Ma ho iniziato a giocare con te! (¡Sino he empezado a jugar contigo!)-dejó que de su espada saliera un pequeño rayo más potente que colisionó contra el aludido-inoltre non mi vuoi più arrabbiato, giusto? o 'grave' cadrà a breve rispetto a quello che farò (además, no quieres hacerme enojar más, verdad? o 'severo' se quedará corto comparado con lo que te voy a hacer).

por Invitado Jue Abr 05, 2012 5:31 am

El rayo lo aturdió dejando sus músculos entumecidos lo que le llevo a caer velozmente a tierra en tanto luchaba desesperadamente por reasumir el control de si mismo, apenas poco antes de estrellarse logro abrir las alas, sin embargo solo sirvió para cambiar de ángulo y no desbaratarse la cabeza contra las gradas. Soltó un chillido al golpear la dura superficie, rebotando en el borde de una grada, para luego caer por dos más hasta que se detuvo.

Su aspecto humano había regresado inconscientemente, quizás una decisión de su cerebro para soportar los daños. Sus costillas dolían como el infierno, sentía los pulmones presionados, como si tuviese un gran peso encima, por los síntomas dedujo que podría tener costillas fracturadas o rotas.

Se giro tratando de levantarse pero antes de que se lograse recuperar de la caída un nuevo rayo le golpeo, se sentía como cientos de agujas atravesando sus músculos, haciendo que se tensaran y contrajeran contra voluntad.

- Perdonami (Perdóneme) – suplico cuando el trance paso, aun sentía el hormigueo que era como un eco del dolor experimentado instantes atrás. – Non fuggire nuovamente, lo prometto (No intentare huir de nuevo, lo prometo)

por Invitado Jue Abr 05, 2012 6:06 am

Samael enfundó su espada con la tranquilidad de quien se sabe dueño del tiempo, descendiendo por las gradas lenta y elegantemente, observando a su vasallo suplicar y retorcerse dolorosamente en el suelo.

Sus pies se detuvieron pocos centímetros de la cabeza del metamorfo, haciéndole un ademán con la punta de su pie para que alzara el rostro al tiempo que hundía el extremo de madera del bastón en las lastimadas costillas del ave.

-Bravo ragazzo, Giorgio (Buen chico, Giorgio)-felicitó el demonio-Il mio piccolo Giorgio... (Mi pequeño Giorgio...)-suspiró, dándole un puntapié en la mejilla--Non vogliamo dimenticare ciò che la vostra posizione, ragazzo. A meno che, naturalmente, si potrebbe desiderare di tagliare il vostro e quelle belle ali non servono più che per mia soddisfazione personale. Capito? (No te conviene olvidar cual es tu posición, chico. A menos claro que prefieras que te corte esas preciosas alas tuyas y no sirvas más que para mi satisfacción propia. ¿Entendido?)

Por instantes, la voz y facciones de la serpiente se endurecieron, dejándole en claro al muchacho que no estaba bromeando. Gio podía ser un buen mensajero y un talentoso espía, pero seguía siendo un humano y revocarlo de su puesto sería tan sencillo como comprar un nuevo juguete.

por Invitado Jue Abr 05, 2012 6:37 am

Asintió en señal de entendimiento, prescindiendo de las palabras al mantener sus dientes apretados para no gimotear. Sus pupilas estaban bordeadas de lagrimas brillantes nacidas del dolor, mas no escaparon de sus ojos, manteniéndolas tercamente contenidas.

Se incorporo lo mejor que pudo, permaneciendo de rodillas y mirando el piso mientras se abrazaba a si mismo tratando de amenizar el dolor, como metamorfo sanaba ligeramente más rápido que un humano, pero muy ligeramente. No podría cambiar con esas lesiones, asique empezaba a preocuparle que medios utilizaría para marcharse de allí cuando Samael se lo permitiera.

por Invitado Jue Abr 05, 2012 7:41 am

Aplaudió mentalmente la fortaleza de su mensajero, tragándose el dolor y las lágrimas mientras le miraba con esos hermosos ojos claros tintados de odio y repugnancia que su garganta no se atrevía a escupir.

Con la cabeza de serpiente de su bastó le alzó el mentón, deleitándose más de esa expresión tan orgásmicamente agradable. Esa expresión que le seducía mucho más que gemidos exagerados y miradas lujuriosas: el reto, la aberración a su persona, el orgullo herido y la humillación.

-Vediamo ... che posso ottenere una punizione, il mio uccellino ...(Veamos...que puedo ponerte de castigo, mi pequeño pajarillo...)-canturreó, masageando su mentón, relamiéndose los labios al recorrer con morbo el cuerpo delgado, fino y con rojas marcas que pronto se colorearían de morado- electrocutándote poteva andare a vedere i tuoi sconvolge il corpo fino a quando non ce la fa più. O. ..
(podría seguir electrocutándote y ver como tu cuerpo se convulsiona hasta que no puedas soportarlo más. O...)-desenfundó su espada, pasándola suavemente sobre la espalda del muchacho, aplicando presión cerca de sus omóplatos, abriendo una herida que poco a poco comenzó a gotear-Credo di avere un'idea che possiamo fare per voi ... chi lo sa, magari si finisce simpatia (Creo que tengo una idea de que podemos hacer contigo...quien sabe, tal vez te termine gustando)

por Invitado Vie Abr 06, 2012 3:32 pm

Tenía serias dudas de que lo que sea que el demonio estuviese maquinando en su retorcida mente pudiera llegar a gustarle siquiera una pizca. Lo único que restaba era soportar el castigo, fuese cual fuera, rogar porque pasara rápido y tratar luego de olvidarlo, lastimosamente nada era así de sencillo, Samael no le mostraría compasión.

Apretó los puños rogando internamente por fuerzas, las necesitaría para atravesar ese trance, más aun debido a que su cuerpo era de la misma fragilidad que la de un humano, aun si no podía morir eso no significaba que su cuerpo no experimentaría el dolor y no quedaría marcado.

Cuando Samael le salvo uso sus poderes demoniacos para restaurarle sin dejar indicios físicos de la tortura a la que fue sometido, pero en esa ocasión lo había hecho para salvarle la vida y hacerse con su alma, ahora el ya no poseía nada con lo que pudiese comprar su compasión.

por Invitado Sáb Abr 07, 2012 6:04 pm

Pensativo, Samael observó a su presa, alejando su espada de la carne sangrante. Poco a poco, su sonrisa ya olvidada fue retomando terreno, elevando la comisura derecha más que la izquierda antes de darle a Giorgio un puntapié en el costado lo suficientemente fuerte para ponerlo boca arriba. Poco le importó que su mensajero contrajera los músculos en señal de dolor por dejar todo su peso caer sobre la gran herida que le acababa de abrir entre los omóplatos y de la cual emanaba sangre a borbotones.

-Questa condizione umana è tua estremamente scomodo, passero. Con una rete solida in modo lento e povero...Si scomoda- (Esa condición humana tuya es sumamente inconveniente, gorrioncillo. Con una capacidad de recuperación tan lenta y pobre...)-El demonio negó burlón, empuñando su espada y realizando otro corte largo y profundo en el pecho, a la altura del corazón y entre las costillas del metamorfo-Pero no te preocupes, Gio. Eso se puede arreglar.

Se relamió los labios, gozando de las quejas de Giorgio, dejando que su palma izquierda abrazara la hoja del arma y su propia sangre emanara profusamente. Dejó su mano pendiendo sobre el pecho del chico-ave, cerrando los ojos y recitando palabras en un lenguaje que seguramente ya estaría muerto. Poco a poco, la herida en el pecho de su ciervo se fue cerrando al mismo tiempo que lo hacía la que había abierto en su espalda. Sus costillas dejaron de doler demasiado y un tipo de gema con forma ovoide tomó forma entre sus carnes, del mismo tono que la sangre, en el lugar donde Samael enterró su espada.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 1:28 pm

El dolor fue abandonándolo para sorpresa del muchacho que desde su ingrata posición observaba al mayor recitar esos versos de vibrante pronunciación. No estaba seguro de lo que ocurría, pero parecía estar sanando, incluso la herida de su pecho se cerraba aunque también anidaba sobre su pecho una extraña gema carmesí.

Toco la gema percatándose de que esta estaba incrustada en el, quizás incluso engarzada a sus huesos por lo firme que permanecía en su sitio, desconocía la función de la gema, pero las palabras de Samael tenían la clave.

- mio signore, che cosa è questo? (mi señor, ¿que es esto?) – pregunto palpando la joya, algo en su interior se contrajo y tubo miedo, su alma y su cuerpo ambos guardaban signos de pertenencia que hacían innegable su condena.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 1:57 pm

Sacando un pañuelo de su gabardina limpió la hoja de su espada, dando un paso hacia atrás mientras el muchacho examinaba su nueva adquisición, entre impresionado e incomprensiblemente horrorizado.

-Si tratta di un fascino demoniaco (Es un amuleto demoniaco.)-le contestó, alzándose de hombros Lasciate che la scarsa capacità di recupero come la tua è più veloce. Tutto dipende dal tipo di ferite inferte sei: se sono pochi e non molto grave, si riprenderanno presto. Se più di uno e abbastanza profondo, prendere due o tre giorni per scomparire. Quindi, quando si invia missioni più pericolose, o punirti, non devi preoccuparti che posso uccidere con una mossa falsa. (Permite que esa capacidad tan pobre de recuperación tuya sea más acelerada. Todo depende del tipo de heridas que te sean inflingidas: Si son pocas y no muy graves, sanarán pronto. Si son varias y bastante profundas, tomarán de dos a tres días en desaparecer. Así, cuando te mande a misiones más peligrosas, o cuando te castigue, no tendré que preocuparme de que puedo matarte con cualquier movimiento en falso)-su mirada se oscureció, siendo tan potente y penetrante como una estaca de fierro, hundiéndose en las orbes claras de su presa-Inoltre, è meglio di un collare, non credi? È collegato al tuo corpo, la tua carne, le ossa. Non è possibile rimuovere, o trasformati, a meno che naturalmente si desidera a sanguinare a morte con un buco nel tronco (Además, es mejor que un collar, ¿no lo crees? Está unido a tu cuerpo, tus carnes, tus huesos. No te lo puedes quitar, ni transformado, a menos claro que quieras morir desangrado y con un hoyo en el torso).

El demonio se carcajeó, relamiéndose los labios al recorrer con morbo el exquisitamente blanco cuerpo de su sirviente, decorado con manchones rojos por aquí y por allá, ambos cortesía del charco de sangre a sus pies.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 1:59 pm

Samael escribió:Sacando un pañuelo de su gabardina limpió la hoja de su espada, dando un paso hacia atrás mientras el muchacho examinaba su nueva adquisición, entre impresionado e incomprensiblemente horrorizado.

-Si tratta di un fascino demoniaco (Es un amuleto demoniaco.)-le contestó, alzándose de hombros Lasciate che la scarsa capacità di recupero come la tua è più veloce. Tutto dipende dal tipo di ferite inferte sei: se sono pochi e non molto grave, si riprenderanno presto. Se più di uno e abbastanza profondo, prendere due o tre giorni per scomparire. Quindi, quando si invia missioni più pericolose, o punirti, non devi preoccuparti che posso uccidere con una mossa falsa. (Permite que esa capacidad tan pobre de recuperación tuya sea más acelerada. Todo depende del tipo de heridas que te sean inflingidas: Si son pocas y no muy graves, sanarán pronto. Si son varias y bastante profundas, tomarán de dos a tres días en desaparecer. Así, cuando te mande a misiones más peligrosas, o cuando te castigue, no tendré que preocuparme de que puedo matarte con cualquier movimiento en falso)-su mirada se oscureció, siendo tan potente y penetrante como una estaca de fierro, hundiéndose en las orbes claras de su presa-Inoltre, è meglio di un collare, non credi? È collegato al tuo corpo, la tua carne, le ossa. Non è possibile rimuovere, o trasformati, a meno che naturalmente si desidera a sanguinare a morte con un buco nel tronco (Además, es mejor que un collar, ¿no lo crees? Está unido a tu cuerpo, tus carnes, tus huesos. No te lo puedes quitar, ni transformado, a menos claro que quieras morir desangrado y con un hoyo en el torso.).

El demonio se carcajeó, relamiéndose los labios al recorrer con morbo el exquisitamente blanco cuerpo de su sirviente, decorado con manchones rojos por aquí y por allá, ambos cortesía del charco de sangre a sus pies.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 2:38 pm

El joven se levanto ya recuperado de los daños a su persona, se sentía completamente bien, era sorprendente no ver siquiera una cicatriz marcándolo luego de que Samael usase su espada para cortarlo.

Noto el brillo de perversidad con que el demonio lo observaba, se estremeció intentando ignorar esos ojos sobre el, el sentía que ya había recibido suficiente castigo, pero señalarle aquello podría darle una escusa a Samael para barrer esas gradas de piedra con su cuerpo destrozado. Trago saliva esperando que no estuviese planeando hacerle algo como eso.

- Hai bisogno di qualcosa d'altro, mio signore? (¿Necesita algo más, mi señor?)- interrogo, solo por romper la incomodidad de ese silencio donde su mente podía imaginar situaciones horribles para si mismo.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 3:16 pm

El demonio le sonrió, relamiéndose morbosamente los labios antes de sentarse nuevamente en las gradas a su espalda, con sus piernas abiertas y las manos entrelazadas, apoyadas en sus propios muslos.

-De hecho, Gio, hay algo más. (De hecho, Gio, hay algo más)-su respiración se volvió ligeramente más pesada al tiempo que los ojos grises se tintaban de la más pura lujuria-Tu castigo no ha terminado, querido gorrión. Pero ¿qué tal si hacemos de esa experiencia...'desagradable', otra más placentera? (La tua punizione non è finita, caro passero. Ma cosa succede se facciamo questa esperienza ... 'sgradevole', uno più piacevole?)-

Son la punta de su zapato recorrió los desnudos muslos, ascendiendo lenta y sensualmente, mientras el bulto entre sus piernas se erguía orgullosamente, dándole una pista bastante gráfica a Gio de lo que le esperaba, y que no había manera de librarse de él.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 3:43 pm

De pronto lo de ser usado para barrer las gradas no parecía tan malo, se abrazo a si mismo de forma inconciente mientras sentía un escalofrío trepar por su espalda al tiempo que la punta del zapato ajeno subía por su muslo.

- Non posso soddisfare, mio signore (No puedo satisfacerlo, mi señor) – dijo el joven con un leve tartamudeo mientras sus mejillas se tintaban. Alguna vez había probado tocar y ser tocado íntimamente, pero era solo una exploración juvenil entre él y una amiga de infancia sin ir más allá, Samael era un demonio demasiado vivido para que un chico sin experiencia fuese capaz de complacerlo al nivel que exigía - per favore, non mi chieda di fare "it" (por favor, no me pida hacer “eso”)- suplico

por Invitado Dom Abr 08, 2012 3:55 pm

-'Questo, mio caro, io decido (Eso, mi estimado, lo decidiré yo)-Le respondió con la cabeza ladeada y una ceja arqueada-Ora, ti suggerisco di stare lontano e fare ciò che ti è stato comandato, Gio, prima mi pento di haberte 'premiato' con la pietra sul petto e rimuovere con le mani nude, lasciando desangres voi, allora guarire e ripetere l'operazione fino a quando ho Hastie. Capito, ragazzo? (Ahora, te aconsejo que te acerques y hagas lo que se te ordena, Gio; antes de que me arrepienta de haberte 'recompensado' con esa piedra en tu pecho y la extraiga con las manos desnudas, dejando que te desangres, para luego curarte y repetir la acción hasta que me hastíe ¿Entendido, chico?)

Samael lo miró a modo de advertencia, desvelando que sus palabras estaban a un paso de volverse realidad.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 4:47 pm

Samael era capaz de cumplir su amenaza, de eso Giorgio no tenía duda alguna. Se acerco al demonio pero su mente era pura confusión y dudas, levanto las manos como si fuese a tocarlo y luego estas volvieron a caer a sus costados, no se animaba a hacer nada por temor a lograr que el demonio se enfadara.

Se arrodillo ante el, en el espacio entre sus piernas sintiendo su corazón golpear enloquecido sus costillas. Con cuidado libero el miembro ajeno de los pantalones que lo presionaban, estaba erguido y lucia imponente como había sospechado al ver su entrepierna abultarse pronunciadamente.

Empezó a acariciarlo con sus manos, del modo en que lo hacia a veces consigo mismo cuando despertaba con una erección por las mañanas.

por Invitado Dom Abr 08, 2012 5:16 pm

A pesar de las acciones, el demonios se hallaba callado y atento, cual si fuera un espectador externo. Miraba las dudas de Gio, el como no se atrevía a tocarlo y como sus manos parecían dubitativas y temblorosas, no mostrando pisca de deseo o morbo al tenerlo de frente.

Le permitió tocar, como un padre condescendiente con su hijo, achicando los ojos, esperando a ver como proseguía. El muchacho era peor que un principiante en ello, todo su lenguaje corporal gritaba 'apesto haciendo ésto', o 'nunca me he atrevido a experimentarlo, además de las típicas masturbaciones con las que me satisfago'.

por Invitado Lun Abr 09, 2012 2:32 am

El chico lo miro a la cara en busca de alguna señal de que estaba complaciéndolo, pero solo se encontró con la inalterable expresión de tedio de su amo, inmediatamente se mordió el labio y agacho la cabeza, avergonzado por su incapacidad de dar placer, como casi seguro de que sería castigado por ello.

Samael era un hombre atractivo pese a que su cuerpo mostrase signos de la edad, incluso Gio podía verlo, pero el temor que le tenía superaba con creces cualquier atracción que su aspecto pudiese despertarle.

- Mio signore ... dimmi come ti preghiamo di (Mi señor… dígame como debo complacerle) – solicito en vista de que solo estaba consiguiendo aburrirlo con su desempeño

por Invitado Lun Abr 09, 2012 11:46 am

La ceja del demonio pareció mostrar un pequeño tic ante la petición del metamorfo, comprobando su suposición: o bien su mascota jamás había tenido relaciones con un hombre, o sencillamente NUNCA había tenido sexo en su vida. Siendo un varón al menos debería de saber lo que le gustaba hacerse y tratar de comunicarlo a su compañero en turno, pero estaba perdido incluso en ello.

Suspiró tediado, apartando a Gio de su entrepierna para tomarlo del cabello y obligarlo a levantarse, quedando los ojos claro a la altura de los grises, que parecían más cansados que divertidos.

-Deludente, Gio. Ora ci sarà la punizione, se sono io che deve dare piacere (Decepcionante, Gio. Ahora ya no será castigo, si soy yo quien debe de darte placer)-Sacudió la cabeza, incrustando sus dedos en la suave y blanca carne de la nuca, empotrando al italiano sobre sus muslos-Ma hey, se voglio farmi piacere correttamente, devo insegnare a me stesso. Quindi attenzione, passero, perché non voglio ripetere la lezione due volte lo stesso (Pero bueno, si quiero que me complazcas como es debido, tendré que enseñarte yo mismo. Así que pon atención, gorrión, porque no pienso repetir dos veces la misma lección)-enroscó los dedos en el cabello ensortijado, arrimando la boca al largo y claro cuello, dejando una fuerte pero sensual marca de sus dientes impresa en la sensible superficie-Ti prego, dimmi che almeno sapere come si bacia (Por favor dime que al menos sabes como besar).-pues al menos con ello tendría una base para enseñarle como mover correctamente la lengua en otros lugares.

por Invitado Lun Abr 09, 2012 2:19 pm

La mordida le saco un estremecimiento, su mente había imaginado que le arrancaría el cuello, casi le había dado un paro del puro susto de sentir los dientes de Samael en su sensible cuello, pero no había ocurrido y ahora estaba con su trasero posado en los muslos del demonio, sintiendo las fuerzas de sus músculos soportando su peso.

Bajo la vista aun siendo aferrado por la nuca por esos dedos que parecían tenazas aferradas a su cráneo, divisando la borrosa silueta del miembro erguido entre sus cuerpos, trago saliva y devolvió su vista a las gélidas orbes grises.

- Se, supere bacia (si, se besar) – respondió, al menos eso había aprendido de coquetear con las chicas que venían en las cosechas a ayudar a recolectar las olivas, en su mayoría mayores que el, quienes desde sus quince años lo introdujeron al furtivo juego de robarle besos mientras “mamma e papà” no estuviesen mirando.

por Contenido patrocinado

Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio

Re: Coliseum maiestatis Priv. Giorgio