As the world falls down - Priv

Suspiré.

Me quede enmedio de esa habitación sintiendome un tonto, trague saliva saliva costeniendo el vaso que me habia ofrecido, mire el lugar, justo cuando mis ojos se toparon con la figura de la cama tome de golpe el whisky.

"Podemos irnos?"

Sabia que tan lejos estaba la puerta pero mis pies no se movieron de alli y contrario a eso mis ojos se dirigieron a el, a su silueta entre las luces de aquel sitio.

- Entonces la pedofilia no te importa? - pese a tener 19 en algunos lados npasaba por un menor y eso habia sido una pequeña broma para ocultar mis nervios, me acerque hasta donde estaba para pedir que lo volviera a llenar.

- Ya lo sabes no? - susurre - ya pudiste leerlo en mi mente, sabes que no voy a irme - no espere asi que tome la botella y bebi de golpe para despues volver a dejarla sobre la cantina - aunque no he hecho esto antes.

Me hice hacia atrás lo mas que pude sobre la cantina, sentí mi corazón golpeando mi pecho y estoy seguro que el también podía oírlo. Trague saliva cuando la piel de mi cuello se erizo ante su aliento, sentí una corriente recorriéndome por completo y esa sensación se agrabo cuando sus labios volvieron a pegarse a los mios en un gesto que termino por matar todo deseo de salir de allí, me deje llevar por aquel momento del roce de su cuerpo debido a su abrazo y disfrutando de la extraña forma en que mi cuerpo reconocía el suyo.

- No me iré - Murmure mientras mis manos rodearon su cuello y mis labios por un momento se volvieron gorabines hambrientas de sus besos

Me moví ligeramente hacia el para crear una ligera fricción que provoco que me separara de golpe, no quería irme, de eso estaba seguro algo en mi se negaba a mover mis pies y una sensación nueva me inundo…. ¿Miedo?

- Necesito ir al baño – tartamudee un poco – no tardare – y me movi hasta el baño, sientiendo su mirada tras de mi.

¡Bien hecho Andy!, ahora ha de estar creyendo que eres un idiota, murmure mirando frente al espejo, si no quieres hacerlo solo toma tus cosas y sal por esa puerta, pero deja de actuar como quinceañera virgen.

“Pero si lo soy, tal vez no tan quinceañera pero si virgen”

Respire y me moje el cabello,

“¿Bien Andy que harás?”

Toque mis labios recordando el calor de los suyos, suspire por ultima vez y abrí la puerta.

- Estoy listo - Llevaba la mirada abajo pero cuando lo tuve cerca mis manos lentamente se acercaron a su rostro para atraerlo a mi – Darius.

Repetirme que eso no era correcto ya no tenia sentido, sobre todo cuando mi cabeza ya se habia perdido en sus labios.

Mis manos rodearon su cuello justo despues de que que las suyas hicieran lo mismo, devore sus labios con una intencidad que no me conocia, senti mi los latidos de mi corazon acelerarse y el comienzo de una serie de cosquilleos en mi cuerpo.

- Creo que ya lo es - murmure pegandome mas a su cuerpo, emitiendo un gemido ahogado entre besos cuando aquella accion provoco cierto roce mas intimo entre su entrepierna y la mia. Respire con una nueva agitacion, aquel contacto habia encendido algo en mi, comence a buscar la forma de deshacerme de su ropa y de la mia a la vez y en medio de esa efusibidad oi el crucir de algo rompiendose, me separa un poco para notar que pracaticamente estabamos a nada de montarnos sobre la cantina.

Cuando las ligeras corrientes de aire terminaron de erizarme la piel fue cuando me di cuenta que mi camisa había desaparecido.

Apenas lo conocía de poco más de dos horas y ahora lo único que pensaba era cuanto más deseaba de él, cuanto me estaba volviendo loco ese “hombre”.

Moví la cabeza para darle espacio a la placentera sensación de su aliento golpeando mi cuello, estire la mano para sujetar la botella de la que habíamos bebido en un principio, le di un gran sorbo y luego busque sus labios para compartir en un beso parte del liquido y mientras creaba mas cercanía de su ahora casi totalmente desnudo torso y digo casi por que aun no terminaba de deshacerme de su camisa por mas tirones que le daba , aproveche mi estado sobre la cantina para enrollar las piernas en su cintura y a cada segundo que pasaba comenzaba a mas y mas la presión de mi propio pantalón.

La forma en que mi piel se estremecia a su contacto provocaba grandes olas de un escalofrio que recorrian todo mi cuerpo, igual al toque de un viento frio pero mas placentero.

Los leves gemidos apenas perceptives se convertian en ahora mas audibles por mucho, ese roce de su cuerpo era una provocacion que hacia arder mi pecho, mi corazon se acelero cuando sus manos se movieron sobre mi cinturon, tan provocativamente.

Queria decir algo pero no encontraba la forma de recperar el control de mi lengua, solo podia verlo pero limitarme a solo contemplar su rostro y su piel tersamente desnuda - Darius, eres perfecto - logre articular y al escucharme un sonrojo vino de pronto, eso debia ser solo un pensamiento no una frase vergonzosa articulada que el pudiese oir.

Habia tenido razon, aun si paraba en ese justo instante esa noche ya sería inolvidable.

Mordi mis labios para no gritar, cerraba con fuerzas los puños e inclusive creo que los dedos de mi pies se habian unido a la faena contrallendose con fuerza para no emitir todos esos gritos que estaba arrancandome en su avance.

Algo de alivio me vino cuando me senti un tanto liberado, aunque aquello duro poco termine aferrado con fuerzas a la estructura dura que formaba la cantina cuando ahora lo que aprisionaba era la calidez de sus manos.

Y me molesto un poco estar en esa situacion, nunca me habia gustado quedarme quieto en absolutamente nada, no podia evitarlo y esa situacion me estaba frustrando, deseaba poder empujarle, bajar de arriba de la cantina y saltarle encima para poder hacer con el todas esas ideas que bombardeaban mi mente. Total si iba a arrepentirme de esto que al menos valiese la pena.

Separe las manos de la cantina y luego las suyas de mi miembro levante su barbilla atrayendole a mi - Quiero, Quiero - balbusee un poco - Quiero hacerlo yo primero - murmure sobre sus labios deslizando mis manos sobre el borde de su pantalon desbronchandole como el lo habia hecho - Tambien debe dolerte a ti - hundi mi mano entre su ropa apenas rozandole en un jugueteo con mis dedos.

Me hice unos cuantos grados hacia atras cuando se acerco a mi y mi corazon el cual ya consideraba acelerado se agito en un nuevo ritmo, separe un instante mi mano de su cuerpo.

No podia evitarlo, el me gustaba casi en la misma medida que le temia.

Pero el ponia mucho de su parte y ahora tan expuesto como estaba, con la sensibilidad escalofriante que los roces involuntarios de su cuerpo contra mi muy despierto miembro me ayudaban mucho a dejarme llevar - Podrias cambiar de opinion - murmure entre sus labios y en medio de aquel beso mi mano se las ingenio para volver a adentrarse dentro de sus pantalones con un poco mas de confianza y con la otra rodear su cuello para evitar que se alejara - Despues de todo ya lo hiciste - susurre cerca de su oido - me estoy jugando la vida

No se si sonrei de gusto o de alivio - De momento estoy a salvo - murmure, no en respuesta a sus palabras si no mas bien en respuesta a mis pesnamientos, sabia lo que estaba rompiendo con ese acto, sabia que de continuar le daba la espalda a mi familia y si queria que no se me juzgase debia parar, pero ¿como?.

Ante esa reflexion mi mano hizo mas presion sobre su palpitante cuerpo una instante mas antes de soltarle y enredar mis piernas alrededor suyo y terminar de rodear su cuello con mi otra mano.

- Debo de estar loco - respondi antes de comenzar a moverme un poco en vaiven contra su cuerpo - pero que mas da ahora.

Me senti extraño, senti su cuerpo absorver el peso del mio para comenzar a movernos, senti la calidez de mis mejillas incrementandose pero supuse que no lo veria por la posicion, un escalofrio me vio una vez mas, era la primera vez que alguien me abrazaba asi, no se si imaginacion o no pero senti la proteccion de su calor.

Creo que por un instante pense en quedarme asi por el resto de la noche, entonces sus inhalaciones y exhalaciones me recordaron que era lo que realemnte deseaba mas sobre aquel pensamiento.

- Es horrible - murmure - ¿o es que no te desagrada el olor a cigarro y alcohol en mi? - que para esas horas de la noche ya estaban bien impregnados en mi, aunque yo podria escribir una biblia de todo lo que podia percibir en el, aromaticamente hablando.

Sonrei un poco - Bueno creo que en esta posicion .... esos son de los detalles que no he notado aun, pero creo que hueles bien - conteste, no podia predecir a que exactamente a que pero era diferente, un olor fuerte y agradable a la vez, intente desifrarlo pero en lugar de eso me deje llevar sin notarlo mi nariz ya rosaba lentamente la piel de su cuello - bastante bien para ser sinceros.

Mis manos se hicieron de sus caderas, me encontraba ciertemente encantado con el, excitado por la situacion, celoso de su tentadora desnudez .... - ahora se que realmente no eres de este mundo - bese su cuello y la pequeña cuerva de su clavicula

Me di cuenta que estaba sonriendo y que quiza ya llevaba tiempo haciendolo, pero que se supone que debia hacer, aquello de verdad me gustaba cada vez más tanto que me costo reconocer que esa serie de soniditos extraños y un tanto vergonzosos eran mios.

Lo senti tocandome, rozandome, provocandome tan ligeramente, en un autoreflejo pase una de mis piernas por su cintura pegandole mas, haciendo ese cosquilleo en mi entrepierna mas placentero y el volumen de mi voz mas audible, tanto que busque sus labios para callerme entre ellos.

Solte un quejido y en el acto mi cuerpo se tensiono como un reflejo ante la intromision, mis manos se aferraron a sus hombros y mis ojos se cruzaron con los suyos despues de parar el beso, senti una ligera posesion de terror sobre mi desvocado corazon, algo asi como un mini infarto.

Era obvio que esto iba enserio, apenas lo entendia.

Queria que siguiera pero me aterraba la situacion y el posible dolor que esto me traeria, no despegue mis ojos de las enormes piedras negras que eran los suyos - yo nunca ... - murmure entrecortadamente pero no termine la frase - no pares - atraje sus labios a los mios para darme valor - si quiero - respondi a una pregunta que nunca formulo.