Midnight moon and inocent kisses -Priv +18

Kanade jadeó excitado ante esa mordida que por poco, no había conseguido hacerle sangrar, y sonrió abiertamente cuando Morgan le amenazó con ello... ¿realmente era una amenaza? Para el cantante, nada le excitaba más que las mordidas, sobretodo esas en las cuales le robaban parte de su sangre, aunque también, recordaba las veces que Morgan había sido tentado por su sangre y lo peligroso que podía llegar a ser... incluso podría drenarle hasta la muerte, aunque Kanade parecía no procesar eso como algo malo o peligroso. Sin duda, tentaba al peligro con cada movimiento que hacía.

-Bien, iremos al hotel entonces -señaló, acomodándose las ropas y acercándose a su pareja nuevamente, aunque esta vez, sólo pasó por su lado abriendo la puerta, invitándole a salir con un elegante movimiento de su mano pero con una sonrisa burlona, divertido-. Ya luego si quieres irte a tu apartamento, haré que mi chófer te lleve -comentó, saliendo de esa sala asegurándose de que Morgan le seguía, pasando por varios pasillos solitarios hasta llegar a la salida trasera, en donde aguardaba el conocido sedán negro.

los tonos de vos que estaba usando Kanade le estaban molestando cada vez mas, en especial porque ya estaba molesto de antes. le molestaba ese jadeo que había soltado Kanade ante su mordida... no un jadeo de dolor precisamente, le molestaba que tuviera que ice dos meses... y le molestaba que tuviera que besar a klaha durante dos meses.... y sobre todo le molestaba que no se sentía con derecho a reprocharle nada.

camino por los pasillos guiado solo por el hecho de que sino se perdería, y cuando salieron a la parte de atrás, miro el auto y a Kanade. el chofer abrió la puerta cuando se acercaron.

- gracias.... pero desde aquí puedo caminar a casa... seguro hay una licorería por el camino..... dijo con cinismo dando unos leves pasos hacia atras

-Si de eso se trata, mon amour, también te aguarda licor en el coche -comentó con sarcasmo, atrapando a Morgan por la cintura y robándole un profundo beso sin miedo a ser mordido, más bien, aprovechando para guiar al chico hasta el coche y obligándole a entrar. En realidad, aquella táctica parecía mucho más sencilla en su mente, pues procuraba no soltar la cintura de Morgan para que no huyera y a la vez, no caer sobre él mientras entraban al vehículo.

Una vez dentro, el chófer, un tanto acostumbrado a Kanade y su excéntrica forma de ser y vivir, cerró la puerta e hizo andar  el coche sin comentar nada, mientras el cantante se separaba de los labios de Morgan con una sonrisa de suficiencia-. Ese orgullo tuyo algún día te traerá problemas, ¿sabes? Aunque en lo personal, me encanta esta faceta tuya. 

le siseo ante la respuesta del licor en el auto, mostrándole los colmillos de forma amenazadora, aunque al verse atrapado entre los brazos de Kanade y ese beso tan abrupto mientras le empujaba, no supo como reaccionar... creía que se amedrantaría por el hecho de que estaba mas directo y cínico, pero no fue así... sino todo lo contrario, la sorpresa ante ese hecho fue lo que evito que le desgarrara los labios a Kanade en esa acción, aunque si lo empujo para apartarse de el ante el comentario acerca de su personalidad en el momento.

- por que entonces no alimentar esta faceta que tanto te gusta no?-dijo con mas cinismo aun y se dirigió al mini bar del auto y agarro destapando la primera botella que encontró y comenzó a beber... ni siquiera sabia por que estaba haciendo ya eso... ho si... quería molestarle así como el estaba molesto por haber tenido que presenciar aquel show, tan lejano a su agrado, cuando en realidad solo esperaba ver a Kanade tocar con su banda y disfrutar... tanto le había costado al cantante pedirle que mejor fuera en la próxima presentación? y ahorrarle ese mal rato... si.. por eso estaba haciendo ese berrinche. por eso estaba sintiendo el ardor del alcohol en su garganta, sin detenerse.

Realmente no esperaba que Morgan reaccionara de aquella forma, ni mucho menos, que se pusiera a beber así como así una botella de whiskey, lo cual le sorprendió bastante. Casi por instinto, le arrebató de golpe la botella al muchacho dejándola a un lado, mirándole con el ceño fruncido y una fría y dura mirada, vale que le gustara la actitud desafiante del muchacho, pero sentía que estaba jugando con fuego y su instinto sobreprotector afloraba. 

-Basta, nada más de alcohol para ti por hoy -indicó con voz fría, pues aquel juego ya dejaba de agradarle-. ¿Me puedes explicar bien qué pasa contigo? ¿De verdad tanto te molestó aquella actuación, que terminas embriagándote y haciendo un berrinche? Mon dieu, Morgan! -Exclamó con algo de cansancio, pues no había nada que le molestara más que los berrinches de ese tipo.

cuando Kanade le arrebato la botella de ese modo, termino ahogándose y comenzó a toser, llevándose las manos a la boca, mirándolo desafiante ante sus palabras.

- cof....disculpa, tienes razón.. tendría que khof... aceptar tranquilo y como si nada pasara que mi novio tenga que besar a alguien en medio de un escenario, flirtear y tocarle, lamerle... y todo eso debo hacerlo sin reaccionar en lo absoluto, perdóname, es mi reacción la equivocada sin duda...- dijo con la misma mirada que no expresaba nada pero una voz afilada, con bastante veneno en esos momentos, y algo ahogada por la tos de haberse atragantado con el alcohol.

- eres tan cruel como Dante con Klaha...- dijo con tono hiriente.- podrías.... podrías haberme pedido que no viniera hoy y haberme ahorrado el espectáculo de tener que verte besando a otra persona... no tienes idea de lo que eso duele? la voz comenzaba a temblarle y comenzaba a tener que morderse los labios para ahogar furtivos sollozos.

El japonés se quedó congelado en su lugar ante la comparación con Dante y luego bajó la mirada, herido. Aún así, sabía que debía controlarse y prefería morderse la lengua a decir todo lo que hubiera querido, pues el costo de desahogarse le parecía demasiado alto y prefería tener que tragar su orgullo y frustración, al menos, sólo si se trataba de Morgan. 

-Lo siento -se disculpó en voz baja, pues no quería reaccionar de forma fría con su pareja, además, había notado el tono de voz tembloroso y no quería que llorara. Suspiró pesadamente y se acercó al muchacho, buscando tomar sus manos con gesto suave y sutil-. No quiero que estés herido, o celoso... Quiero que estés seguro de que te amo sólo a ti, de que te pertenezco totalmente. Perdóname por hacerte sentir mal pese a que te prometí que no lo haría nunca.

Mientras hablaba, fijó sus ojos en los de Morgan dedicándole una mirada sincera a través de las lentillas que aún no se había quitado. No quería ser como Dante era con el pobre de Klaha, no quería ser cruel con Morgan ni hacerle daño, y definitivamente, no quería que el chico llorara y que fuera esa la última imagen que de él tuviera antes de irse del país.

le había herido... y morgan se daba cuenta de ello.. pues lo había visto en la expresión de Kanade.... se sintió mal por ello... pero estaba tan molesto... que sinceramente esperaba que Kanade le rebatiera con un sin fin de cosas... pero no lo hizo... mas bien todo lo contrario, inmediatamente se disculpo, dejando a morgan con los ojos abiertos completamente de sorpresa.

se pego al asiento cuando Kanade se le acerco tomando sus manos, pensando que tal vez podía explotar... pero no sucedio... comenzo a disculparce y morgan no podia siquiera pestanear, no era lo que esperaba, definitivamente ni por poco.

-l....lo... lo siento.. hable de mas...- dijo al fin morgan desviando incomodo la mirada al ver como le travesaba con esos ojos producto de las lentillas... seguían sin gustarle.... aun estaba ahogando unos sollozos pero no los dejo salir, por lo que llevo una mano temblorosa a los costados de los ojos de Kanade.

- deberias quitártelos... te dañaran las corneas.. a.. aparte... prefiero... prefiero tus ojos naturales. quiso sonreirle, pero aun no le salia, por lo que termino mordiendose el labio

Kanade cerró los ojos ante el tacto de Morgan, dejando salir un breve suspiro entrecortado mientras le oía. Al menos, pensó, ya no hablaba con aquel veneno en la voz y parecía haberse calmado un poco, lo cual internamente agradecía con creces a los dioses de todas las religiones. 

-Me los quitaré al llegar al hotel... aquí no tengo dónde dejar las lentillas -comentó, abriendo los ojos nuevamente con lentitud, viendo cómo Morgan se mordía el labio y sintiendo renovadas ganas de besarle, pero no quería presionarle ni abusar de su suerte tan rápido. Además, Morgan había bebido un buen trajo de whiskey, el cual no debería tardar en hacerle efecto... y Kanade no sabía si eso sería bueno o malo.

Por la ventana, podía verse la luna llena brillar majestuosa en el cielo, para luego ser cubierta por el elegante y lujoso edificio en donde el cantante y el resto de su banda se hospedaban. El camino de hecho había sido bastante corto, ya que el antro no se encontraba demasiado lejos de aquel hotel. Una vez el coche se detuvo en la entrada, Kanade estiró una de sus manos a Morgan, sonriéndole levemente-. ¿Aceptarías mi mano y vendrías conmigo?

morgan tambien se puso a ver por la ventana, viendo la luna llena.. aquella que no le controlaba como controlaba a los lycans... pero si tenia sus efectos... Para morgan, durante la luna llena, sus sentidos ( ya de por si muy desarrollados) se intensificaban, todo el se sensibilizaba de otro modo, lo que podría o no explicar la escena de celos.... ojala pudiera justificarlo al clima.

la voz de kanade que ya estaba saliendo del auto, le distrajo de esos pensamientos cuando le invito a ir con el al holtel.

- si... si me quedo en este estado solo... probablemente muera aplastado por mis libros...- dijo soltando un suspiro y tomando la mano de kanade, sintiendo como al levantarse y con el choque de frió de fuera, el alcohol pareció subirle de pronto a la cabeza, provocando que se sostuviera con fuerza de kanade.

-r... rayos.... lo siento, al parecer si... si fue mala idea comportarme así. declaro mirando el piso terminando de salir del auto, sintiendo como le iba girando todo de a poco frente a los ojos... se sonrojo un poco por vergüenza a su estado mas que otra cosa y que Kanade le viera así... por que... no quería que le viera en ese estado, si lo pensaba... no podía rebobinar el día?

Apenas bajó del vehículo sujetó a Morgan con firmeza y cuidado de que no se tambaleara y cayera al piso, suspirando largamente con paciencia. Miró a su alrededor agradeciendo que los paparazzis no les habían seguido y pasó sus brazos alrededor de la cintura de su pareja, ayudándole a caminar hasta el hotel-. Con cuidado... es porque bebiste demasiado rápido -suspiró tras decir eso, caminando lentamente hacia el elevador que daba al penthouse del hotel.

Una vez dentro del elevador, juntó su frente con la de su pareja cerrando los ojos, relajándose con aquella acción mientras sujetaba a Morgan por la cintura, temiendo de que el chico pudiera marearse demasiado y caer. Una vez las puertas del elevador se abrieron, Kanade ayudó al muchacho a caminar hasta el sofá más cercano, sentándolo y mirándole con preocupación-. ¿Cómo te sientes, mon cour? 

morgan se dejo ayudar completamente apenado por la situación, sabiendo que era enteramente su culpa por haber bebido de esa forma... se ruborizo de nuevo ante el acto de pegar sus frentes en el elevador.

Kanade le llevo hasta dentro del penhouse, ayudandole a llegar al sofá sin caerse o nada por el estilo.

- para ser sincero... mareado... no es solo...e..el hecho de que tome rápido... es el entero hecho de que tome... no suelo... no suelo beber casi nada, con suerte si tomo un total de una botella de algo en una década. aclaro echándose hacia atrás en el respaldo del sillón, preguntándose quien le había mandado a hacer esa escena en el auto... y por que las cosas no dejaban de girar.

giro el rostro a mirar a Kanade. y sonrio triste.

-l..lo... lo siento arruine l... la noche..y...y mis celos... quería disculparse propiamente dicho, pero se le hacia muy difícil porque ante la idea de disculparse se le venia a la mente todo, y era mucho para procesarlo junto... se le llenaron los ojos de lagrimas. los cuales cubrió con sus manos. l...lo arruine todo...

Escuchó en silencio sus palabras, sin comentar nada ante el hecho de que de por sí Morgan jamás tomaba, pensando internamente que tendría que tener cuidado con aquel tema y procurar que Morgan no bebiera más en ninguna situación futura. Cuando el chico se disculpó con su habitual tartamudeo y sus ojos se humedecieron, el cantante le sonrió con tristeza, no quería que llorara o se sintiera mal... después de todo, él también tenía parte de la culpa.

-Tranquilo, Morgan, está bien, no has arruinado nada... no llores mon amour -pidió abrazándole cálida y protectoramente, pegándole a su pecho y disfrutando de tenerle así entre sus brazos-. Todo está bien, lo importante es que podemos estar juntos y tranquilos... te amo, Morgan... sólo a ti, para siempre, ¿si? -intentaba calmarle con suaves caricias en la espalda y sus cabellos, acercándose a besar sus labios dulcemente otra vez.

las lagrimas de sus ojos, cayeron ante ese tierno beso.

-no....t.. te dije algo....algo horrible...- declaro aferrándose a sus ropas. sollozando y abrazándole por del cuello - lo... lo siento....lo siento.... se estaba angustiando cada vez mas... y lejos parecía de calmarse. estúpido alcohol... estúpida luna..-n.. no.. no eres como el..s...sob... no eres nada como dante... no... no quise decirte eso, lo siento.. sob... p.. perdóname, perdóname.... repetía entrando en pánico de que luego lo pensara y desdiera que no valía la pena los malos ratos el estar con morgan, ante esa idea comenzó a hiperventilar mientras lloraba y pedía que le perdonara.

-Calma, Morgan, respira... Está todo bien, shh.... está todo bien -repetía con voz suave para calmarle, acariciando los cabellos ajeno notando cómo empezaba a hiperventilar y entrar en un ataque de pánico. Eso sí que no estaba bien, pensaba, besando nuevamente los labios ajenos de forma suave, con la mirada aún un tanto ensombrecida por el hecho de que le había comparado de eso forma con Dante.

-Calma, calma... eso ya no importa, ¿vale? Todo está bien, no tienes que disculparte -repetía suavemente, observando las lágrimas de sangre de su pareja con cierto deseo, controlándose al máximo para no empezar a lamerlas. Luego de unos momentos de divagación, cerró los ojos y respiró profundamente, apretando un poco su abrazo.

- no... no... no esta bien... es...e...e...es algo horrible....l..l..lo...lo si...siento de veras....lo ... lo siento, perdóname....- no podía controlarse, se aferraba a kanade desesperado, con miedo, temblando... esa era una de las razones por las que no solía ver a nadie las noches de luna llena... y tambien por las que probablemente no bebía...

lloro por unos cuantos minutos sin poder contenerse, agazapado contra Kanade, manchándole de sangre, cuando cayó en la cuenta de eso, se sintió mucho peor... sabiendo del problema que kanade tenia para con la sangre... y el estaba llorando así frente a el, exponiendo sus lagrimas carmesí ante el cantante... se separo abruptamente mirando las manchas de sangre en el hermoso vestuario de Kanade...

- l..lo... lo siento...s..soy.. soy un de...desconsiderado....sob.....!!- dijo nervioso cubriendose el rostro con las manos.- i..iré... iré a limpiarme.....- dijo girando para ir al baño, demasiado rápido... se había parado demasiado rápido y había girado demasiado rápido.... sumado a su llanto, sus nervios, su entrada en pánico... y al alcohol... termino tropezándose y termino barriendo el piso de bruces. se sintió tan humillado que se quedo ahí tirado sin moverse mucho, al menos no había caído contra ningún mueble... o lo hubiera roto...

El cantante le dejó llorar sin comentar nada, sólo acariciando sus cabellos cariñosamente intentando no pensar en las lágrimas carmesí de su amado, aunque ya la garganta le escocía bastante debido a la renovada sed que sentía. Cuando el muchacho se apartó diciendo aquello, Kanade negó con la cabeza con calma-. Amor, no eres un desconsiderado, calma... Ya pasó, y no estoy molesto contigo... -tras decir eso le sonrió levemente, para luego ver cómo el chico se ponía de pie demasiado rápido... terminando por estamparse nuevamente en el piso. 

De hecho, al cantante ya se le hacía raro que no se hubiera caído antes o que no hubiera tirado nada, considerando su torpeza natural. Aún así, eso no evitó que se pusiera rápidamente de pie y le ayudara a levantarse, mirándole preocupado, pues verdaderamente Morgan era todo un desastre-. Mon dieu, Morgan... ¿te encuentras bien? ¿Te golpeaste muy fuerte? -Preguntó aferrándole por la cintura y ayudándole a ponerse de pie, guiándolo hasta su cuarto y el baño.

-Ven, te ayudaré a limpiarte el rostro... -indicó, llevándole hasta el elegante y lujoso lavamanos e inclinándole un poco, dejando correr el agua fría y con una toalla, ayudarle a limpiarse la sangre. Parecía mucho más sensible de lo normal, lo cual, el cantante atribuyó de inmediato al alcohol y sus nervios, pensando que definitivamente no volvería a permitir que su pareja tomara otra vez.

y para completar su cuadro de humillación, kanade se levanto de inmediato y le ayudo a levantarse, guiándolo hasta el baño para que nos e cayera de nuevo, y limpiándole el rostro. solo tenia un ligero golpe en la frente por la caída pero nada mas, no estaba herido.

suspiro dejando que terminara de limpiarle el rostro y aun así se quedo quieto, pensando en que hacer.

- e.. es.. estoy bien...n..no.. no fue un g.. golpe fuerte....- murmuro rojo de oreja a oreja de pura pena.- vas a cansarte de mi... declaro de pronto con una sonrisa triste. - de mi torpeza y mi nerviosismo... vas a cansarte.... estoy seguro de ello... se abrazo a si mismo - incluso el amor tiene limites...y yo no valgo tanto amor como para que te preocupes a cada paso que doy...- declaro dejando ver su mayor miedo, no el que no le amara, como decía, sino el que se hartara de el a pesar de amarle... soltó un suspiro, parecía que lal una haría que le soltara todas sus dudas esa noche... sentía lastima por kanade que tenia que soportarle.

No pudo negar que se sorprendió bastante al oírle decir aquello, expresar sus miedos en voz alta de forma tan repentina. Aún así, su rostro no expresó la sorpresa que sentía y sólo se limitó a mirarle con una mirada cálida y comprensiva, suspirando brevemente de forma entrecortada-. Ay, Morgan... Será mejor que vayamos a la cama, te hará bien recostarte -sugirió sin referirse a los miedos del muchacho, pensando una adecuada respuesta para calmarle.

Tomó a Morgan por la cintura y lo condujo hacia su cama, en donde le hizo recostarse y se colocó a su lado, abrazándole y mirándole a los ojos, ya habiendo olvidado por completo que tenía que quitarse las lentillas y cambiarse el traje-. Me gustaría saber... cómo convencerte de que vales mucho más de lo que crees. Me gustaría que te valoraras más, eso no puedo negarlo, y prefiero serte sincero -hizo una breve pausa, acariciando la mejilla del muchacho con delicadeza, como si temiera romperle. Luego, se inclinó a besar su frente con gesto protector antes de continuar.

-Y sinceramente, te digo que vales la pena cada pizca de mi infinita paciencia. Jamás podría cansarme de ti, ni de tu nerviosismo, ni de tu torpeza, ni de tus ataques de celos, ni de tu mirada que me hipnotiza -al decir aquello fijó su mirada en la ajena con una sonrisa dulce, intentando infundirle confianza-. Son esas cosas las que me hacen caer enamorado de ti. ¿Cómo podría aburrirme o cansarme de eso? ¿Cómo, si te has convertido en mi vida, en mi inspiración? No me molesta vivir preocupado por ti, pues es con esa preocupación mi mayor forma de expresar todo el cariño y el amor que te tengo. 

morgan asintió levemente suspiráno cuando kanade le dijo de ir a acostarse en la cama... tal ves servia para que las cosas dejaran de dar vueltas alrededor suyo... aunque probablemente eso era por el alcohol.
dejo que kanade lo guiara hasta la cama, aunque su mano en su cintura le causaba leves escalofríos, su cuerpo estaba demasiado sensible, y recién ahora comenzaba adarce cuenta a que punto estaba sensible..., se sonrojo nuevamente cuando kanade le dijo que si valía, y que quería descubrir como hacerle ver eso. mas aun cuando le miraba de esa manera y acariciaba sus mejillas, alli tendidos ambos en la cama, la piel le quedaba estimulada cada vez que le rosaba kanade.

-e...exageras....- murmuro cohibido haciéndose un poquito para atrás, para tener mas espacio y tratando de evitar que las celulas de su piel, se pusieran a bailar a cada caricia.... - t.. te.. te dañaras los ojos ....s..si no te las quitas...- dijo mirando los ojos ajenos, estirando sus dedos y acariciando el marco de los ojos de Kanade, sin darse cuenta que lo hacia.

tus ojos humanos... lo sreales... son mucho mas bellos... que esas lentes. le susurro sonriendo amablemente

-No exagero, sólo te digo la verdad. Soy algo cursi a veces, lo sé -sonrió de lado diciendo lo último con tono divertido, sonrojándose ligeramente cuando Morgan acarició el borde de sus ojos, haciendo que los cerrara suavemente-. ¿Te gustan mis ojos? -su sonrisa se ensanchó un poco más con gesto radiante, volviendo a abrir sus ojos lentamente, sin dejar de verle y perdiéndose en los ojos ajenos, a la vez que pasaba la yema de sus fríos dedos por los labios del muchacho. 

Kanade suspiró largamente, acercándose a besar los labios de su pareja con suavidad para luego levantarse y sentarse sobre la cama, buscando en su mesita de noche un espejo y alguna cajita para las lentillas. Se las quitó con rapidez aunque también con cuidado, guardándolas en la cajita y volviendo a recostarse junto a Morgan, atrayéndole hacia su pecho haciendo que se medio recostara sobre él.

-¿Sabes? Me he dado cuenta de que mis ojos brillan sólo cuando te veo. Supongo que ahora son oficialmente tuyos -comentó en voz baja, mirándole a los ojos otra vez, parpadeando un par de veces para volver a humedecerlos y que no le dolieran más tarde. Efectivamente, como decía el cantante, sus ojos parecían poseer un peculiar brillo propio que hacía que su rostro se viera mucho más radiante que de costumbre.

- si.. me gustan... a.. aunque me intimidan bastante... es como si penetraran mi alma, y eso me cohíbe.- le explico con una ligera sonrisa, para quedarse con los ojos abiertos viéndole aguantando un suspiro cuando acaricio de ese modo sus labios, dejándole la piel electrificada, tambien aguanto la respiración ante ese beso, que le dejo de igual modo, y sonrojado ante eso, se sentía tonto... todas las sensaciones que siempre le daban los roces de Kanade, o sus besos y caricias, estaban siendo amplificadas, y eso era demasiado perturbante. le vio quitarse las lentillas y liego se dejo acomodar, aunque una vez sobre el pecho de kanade, trato de no moverse salvo que fuera absolutamente necesario.

sonrio escuchando aquello de que los ojos de kanade brillaban solo cuando estaba con el. se estiro para verle mejor y sonrió de manera inocente con los ojos cerrados... pero no era realmente una sonrisa tan inocente como parecía.. estiro sus dedos y acaricio los labios de kanade.

- quisiera que estos fueran solamente míos - murmuro entreabriendo los ojos he inclinándose a dejar un beso que era mas una caricia... - pero tengo que compartirlos....por dos meses mas....- suspiro casi sobre los labios ajenos, rosandolos a cada palabra

El cantante sonrió satisfecho al escucharle decir aquello sobre sus ojos, pues era consciente del efecto que tenía su mirada en el resto de las personas y de alguna forma, el saber que conseguía cohibir así a su pareja hacía que su ego creciera, aunque por fuera no lo demostrara. 

Cuando Morgan acarició sus labios, Kanade cerró los ojos dejando escapar un breve suspiro, sintiéndose bastante más relajado gracias a esas dulces caricias. Entreabrió sus labios levemente escuchando las palabras de su pareja y volvió a abrir los ojos con lentitud, mirándole fijamente a los ojos, de aquella forma que sabía, podía poner nervioso a cualquiera. 

-Pronto serán solamente tuyos, cher... Y entonces me tendrás completamente para ti, por el resto de nuestras vidas -murmuró sobre los labios ajenos, aunque con cierto brillo perturbador en su mirada, pues no había terminado la frase para no asustar a su pareja ni romper aquel momento... Porque si lo pensaba bien, ¿cuánto más tiempo sería "el resto de su vida"? En un mundo en el que apenas quedaban humanos, sabía que en cualquier momento podría enfrentarse a su muerte, y era esa la razón de que siempre disfrutara al máximo de su vida, pues no quería sentir que la desperdiciaba... no más.

Cerró nuevamente los ojos ante esos pensamientos y sonrió con cierto misterio, acercándose a besar los labios de Morgan, de forma suave y calma, aunque profunda. Sus manos seguían rodeando la cintura ajena y las coló bajo la ajustada chaqueta del muchacho, acariciando sutilmente su espalda baja por sobre la camiseta.

esa mirada de Kanade hizo que se pusiera nervioso otra vez, pues como le había dicho, le perturbaba y se sentía atravesado por esos ojos.

aquella respuesta de kanade que tambien rozaba sus labios le hizo sentir un escalofrío, en parte por la sensación y en parte porque no quería esperar dos meses a que dejara de compartirlos, pero no dijo nada, no quería volver a sentir esos celos venenosos.

esa sonrisa misteriosa le distrajo de sus pensamientos, lo cual agradeció, recibiendo aquel beso que hizo que su cuerpo se pusiera nervioso de nuevo, era un beso tan suave y calmo, pero profundo, que solo lograba perturbarlo. Cuando las manos de kanade se colaron bajo su chaqueta acariciándole la espalda sobre la tela de la camisa, morgan sintió que su cuerpo se le tensaba y que se sonrojaba de sobremanera, al soltar un jadeo en ese beso por causa del tacto... se dio cuenta entonces que a pesar de todo el alcohol que había ingerido, no había perdido noción de nada... tal ves si estaba un poco mas... "suelto", pues tartamudeaba un poco menos, y... se atrevía a hacer cosas como hablarle a kanade rosando sus labios, lo cual no habría logrado hacer en otro estado, eso seguro.

-Estás tenso... ¿aún te sientes mareado? -Preguntó sobre los labios ajenos al notar cómo el cuerpo del chico se tensaba por sus caricias, las que pese a todo no detuvo. En cambio, sutil y lentamente coló sus dedos bajo la tela de la camisa, mientras volvía a besar los labios de Morgan de esa misma forma lenta y profunda, procurando grabarse en la mente el sabor de su boca, el tacto húmedo y tembloroso de su lengua. Ahora que lo pensaba bien, no quería tener que irse al día siguiente. 

Al acabar el beso y separarse para dejarlo respirar, la mirada de Kanade se había entristecido, y sin evitarlo dejó escapar un largo suspiro agobiado, apretando un poco su abrazo como si Morgan pudiese irse en cualquier momento. Si por él fuera, se quedaría así junto al muchacho hasta que le anunciaran que su vuelo saldría, y si fuera posible, se quedaría así abrazado a él hasta que el mundo se acabara, de nuevo.