tratando de alcanzar la calma...sin exito... - LIBRE-

sali por un poco de aire, simplemente no podia soportar estar rodeado de personas que me recordaban, o semi recordaban, y yo no saber nada de ellas, no tener siquiera el mas minimo sentimiento de conocerlos.

llegue, y aun no sabria explicar como, a las playas de la ciudad.

camine por la orilla del mar, mojando lijeramente mis borcegos, mas sin preocuparme, no me importaba eso en ese momento, tambien se estaban mojando los ruedos de mi pantalon, cuando la humedad me toco la piel, repare que aun, esa era la unica ropa que tenia, claro, que solo llebaba dos dias vivo.

- que mierda...- murmure sintiendo como mi humor comenzaba a ser cada ves peor y prendiun cigarro, viendo si asi, se me calmaban las ancias.

Aquella era una noche particularmente encantadora. Hacía bastante calor a pesar de la hora, pero cerca del mar soplaba una brisa por demás seductora. Había pasado los últimos días simplemente encerrado en la 'casa'. Nunca hacía eso. Jamás frecuentaba ese sitio. No me sentía en lo absoluto identificado con él, sólo significaba un respaldo ante cualquier eventualidad. Y en especial para momentos como los que había estado viviendo, en los que, por alguna razón que desconocía, sentía que a la primera persona que tan sólo me dirigiera la mirada, le rompería la cara. Pero de a poco ese sentimiento se había ido disipando con el paso del tiempo. Acomodé mi cabello, me afeité y salí a recorrer, una vez más, las alocadas y sucias calles de LA. Qué hermosa ciudad era aquella.... Probablemente mi favorita. Sólo luego de varias horas vagando por los diferentes callejones, decidí acercarme a la playa. Aunque esta vez no actuaría como siempre hacía... Sin saber demasiado por qué, me quité los zapatos semi-formales y los calcetines para llevarlos en una de mis manos. El contacto con la arena era agradable y algo extraño; yo nunca caminaba descalzo. Jamás. Me acerqué a la orilla y dejé que la fría agua de mar tocara mis pies. Comencé a caminar despacio, con la mirada gacha, muy sumido en mis pensamientos. Y fue justamente a causa de ello, que choqué a un joven, haciéndolo caer al suelo.-Lo siento.-Fue lo único que atiné a decile y le extendí una mano para ayudarlo a ponerse de pie.

cuando senti el choque y cai al piso no pude evitar soltar un gruñido gutural... probablemente fue porque note el ruido de mi cigarro callendo al agua y mi caja de cigarros humedeciendoce...

- demonios...- murmure de mal humor tomando su mano para levantarme.


una ves de pie, mas alla de mirarle, busque mi cajetilla antes que otra cosa, y no... no habia remedio, todos los cigarros estaban, humedos, no pude retener otro grunido y revolie los cigarros, sabiendo que eso estaba mal, hacia los medanos.

- no esta bien, yo tampoco estaba prestando demaciada atencion.- repuse de mala gana reparando en quien me habia chocado.

Jalé de su mano para ayudarlo a ponerse de pie, mientras le escuchaba farfullar y llegaba a ver que sus cigarrillos habían caído al agua y se habían mojado. Definitivamente, si me hubiese sucedido a mí, estaría tan molesto como él, hasta era posible que más... Arrojó los cigarros a los médanos, yo sólo me limité a observarle sin decir palabra. Hacía ya mucho tiempo que estaba en LA, y sin embargo nunca había visto a aquel joven, estaba seguro. Posiblemente no perteneciera a los alrededores. Quise decirle alguna cosa acerca de lo de su cajetilla, pero no supe qué, así es que me limité a poner una expresión de circunstancia y ofrecerle uno de los míos.-No tengo demasiados, pero puedo comprarte unos.-Me encogí de hombros. Dinero en realidad no me faltaba. Tampoco me sobraba, pero era sencillo de conseguir, y de todas formas sólo lo utilizaba para eso.-Eso sí, no creo que a estas horas pueda conseguir...-Dejé una breve pausa.-Soy Kenneth, por cierto.

le escuche de que no tenia muchos cigarros, pero de todos modos tome el que me ofrecia y saque mi zippo, al este no encender porque estaba mojado volvi a gruñir ya ahora si de mal humor...

- quiero que sepas, que si este encendedor se a arruinado vas a lamentarlo, ruega que sea solo por el agua...- dije entre gruñidos que no podia evitar soltar, sabia que no era la manera mas diplomatica de conocer gente, pero al parecer ese era yo.

- mi nombre es Cerberus- dije presentandome con el cigarro apagado bailando en mis labios

Hice una breve risa con su declaración, negando con la cabeza.-Vaya forma de dirigirte a una persona que acabas de conocer... Qué... cortés...-Dije, más bien como una observación objetiva. Pero había llamado mi atención. Yo era por demás caballero, y en aquella ciudad, las personas con las que había hablado me trataban con amabilidad en la mayoría de los casos. Claro que siempre hay una excepción a la regla...-Ya deja de llorar, mierda. Es irritante. Sólo ha sido agua. Y, en todo caso, si se arruinara, también tendrías parte de responsabilidad. No esperarás que la asuma toda yo solo. Porque oye, soy cortés, pero no imbécil.-Le dije, aún con tono absolutamente neutral.-Un placer conocerte, Cerberus.- Acabé diciendo, contradiciéndome de modo sarcástico mientras encendía su cigarro con mi encendedor. Me gustaba jugar con el doble discurso. Era divertido.

-ser cortes no es precisamente mi mayor virtud.- declare mirandolo.

- que culpa tengo en estar parado en la playa y que me atropeye alguien?- le gruñi, esperando una respuesta a eso, pero en su lugar como me encendio el cigarro ahi lo deje, aunque en realidad volvi a sacar el zipo y lo ignore mientras segui intentando que encendiera, y no volvi a mirarlo hasta que asi lo hiso.

ese encendedor era lo unico que habia aferrado tanto como para traerlo conmigo de vuelta desde el infierno, si se arruinaba, mataria al culpable... respire aliviado al ver su llama .

- gracias a todos los dioses...- murmure. y luego mire al joven con quien habia chocado- un gusto tambien mira, al parecer no deveras sufrir castigo por el encendedor.- declare sonriendo mientras guardaba el zippo

Podía llevar la discusión toda la noche, pero no era como si realmente me importara, así es que ignoré sus palabras al respecto. Sonreí al verle aún intentando provocar la chispa del encendedor. La situación se me hacía hasta graciosa por lo mundana y estúpida que era.-No hay nada que agradecer a los dioses...-Dije, más bien como un pensamiento en voz alta.-Ellos no hacen ni mierda.-Concluí. El joven de verdad le tenía afecto a esa cosa. Posiblemente tuviese un valor sentimental especial... Eso, o estaba enfrente de un obsesivo compulsivo. Una de dos... Le observé con atención, intentando determinar a qué raza pertenecía, pero no lograba siquiera hacerme una idea. Sólo esperaba que no se tratara de un humano. Ya me tenían hasta los cojones.

senti que me obserbaba y le devolvi una mirada filosa.

- ves algo de tu interes?- pregunte mirandole atentamente. me di cuenta que ese no era un comentario muy amable asi que respire soltando gumo y quise resarcirme.- llo siento estos dias no he estado de humor para tratar con el mundo y tu no tienes la culpa de ello.-

Me sonreí con sus palabras sin entender demasiado el por qué. Lo cierto es que,aunque no de mi estereotipo, era agradable a la vista, pero no le observaba por eso. Me devolvió una mirada filosa, pero sostuve la mía.
-Ya lo veo.-Respondí a sus últimas palabras.-Pero bueno, como sea, todos tenemos días de mierda, supongo.-Me encogí de hombros.-Tampoco yo lo he estado pasando bien. Recién hoy, después de cinco días, salgo de mi casa. Aunque, definitivamente, estoy mejor. Si nos hubiésemos topado un par de días antes, posiblemente ya estaríamos a los puñetazos.-Asentí con la cabeza.-Dime por favor que no eres humano. Es lo único que le hace falta a esta puta semana. Caminar dos pasos y encontrarme con uno, porque entonces, definitivamente, estoy jodido.

escuche sus palabras.

-bautisaremos esta playa como la playa de los malumorados.- dije s ññevando el cigarro a mi boca y disfrutando de como el humo se esparcia por mis pulmones contaminandome.

- humano?- repeti extrañado por sus palabras, me percate en ese momento de que el aroma de ese joven no era el de un humano, sino que era un aroma similar al del ser que me habia revivido, se me erizaron los cabellos preguntandome si tendrian algo que ver y si terminarian mandandome de regreso al infierno... no que tubiera recuerdo de mi estadia alli, pero... la estaba pasando bien en la tierra nuevamente.- ya veo, eres un demonio.- comente sin poder evitar que por reflejo defensivo se me tenzaran algunos musculos, dado que en mi ultimo encuentro no solo me habian revivido sino que me habian roto la madre tambien...- no, no soy humano de por si... al parecer y por lo que me dicen, soy un Lycan, en dos dias habra luna llena asi que lo confirmaremos pronto.-

OFF: mil disculpas por la demora, todo es culpa del puto colegio que no me deja tiempo ni para respirar, lo lamento mucho! D:

Asentí con la cabeza a sus palabras y esbocé una media sonrisa, lo cual ya era mucho en mí, puesto que jamás sonreía a no ser que fuera de modo malicioso o sarcástico, lo cual no se daba en la situación. Reí cuando dijo que era un demonio y fruncí el entrecejo.-No. No lo soy en absoluto. ¿Qué te hizo pensar eso?-Pregunté con curiosidad. ¿Sería que tenía un aura como la de ellos? Porque eso sí que sería muy curioso, en especial cuando, caído o no, era un ángel. Escuché con atención todo lo que dijo.-Vaya, así que no sabes qué eres... Eso es extraño.-Observé. Si reflexionaba al respecto, lo cierto era que yo tampoco lo sabía. No en verdad. Por momentos sentía que me desconocía por completo. Que no sabía quién era, qué quería y qué estaba dispuesto a hacer por ello.-Lycan...-Repetí, como degustando la palabra.-Me agradan. Son salvajes e intuitivos como las fieras, pero también sentimentales y estúpidos como los humanos. Una combinación escandalosa, ciertamente. Es divertido pensar lo que sucede con algo como eso.-Guardé silencio pensativo y mi vista se perdió en las olas del mar.

- no eres un demonio? entonces, por que rayos hueles al infierno? tienes el mismo aroma a cenizas y desesperacion, que se le impregna a los demonios alli.- declare para luego escuchar su descripcion de los lycan... heche humo y sonrei altanero.

- si... esa es una descripcion perfecta para mi al menos...- el cigarrillo llegaba a su fin por lo que me estaba molestando de nuevo.. - contesta entonces, si no eres demonio por que hueles al infierno?- dije de nuevo mirandolo fijamente y sin descaro.

Me sorprendió que dijera que la descripción que había dado era adecuada en su caso. Cualquiera en su lugar la hubiese considerado ofensiva, insultiva, exagerada y muchas cosas más... Pero no adecuada. De todas formas, no dije nada al respecto.-Cenizas, desesperación, Infierno... Suenas como alguien que sabe de qué habla. Apostaría a que has estado por aquel "acogedor"-e hice especial énfasis en la ironía.-sitio.-Amaba eso. Responder con una pregunta. No me gustaba demasiado dar información de mí si no era a cambio de algo, aunque de todas formas, no me afectaba en lo más mínimo hacerlo, al menos no en el caso. No era nada demasiado importante.-Estuve allí.-Dije en tono amargo y aclaré mi voz antes de continuar, aún sin verle al rostro.-En el Infierno. Estuve allí una vez. Bonita estadía, debo resaltar.-Me sonreí lleno de sarcasmo.-Y además lucho con el Ejécito Infernal.-Al acabar de decir esto, le miré directo a los ojos, intentando detectar cualquier tipo de emoción que eso despertara en el Lycan.

lo observe y escuche notando que buscaba reacciones con sus palabras, no me afectaba realmente que hubiera estado en el infierno o que perteneciera a las huestes infernales, no al menos mientras no me tocara a mi o a algun conocido mio.

- ya veo... bueno.... yo hasta hace cuatro dias estaba muerto, probablemente tambien enterrado.... pero se ve que hice enojar a alguien mucho... a un demonio, porque este me revivio, me saco todos mis recuerdos salvo por mi nombre, me trajo a la tierra, me rompio algunos huesos y dijo que volveria por mi cuando lo vea mas divertido, asi matarme seria un verdadero placer.... me pregunto que habre hecho para fastidiarle.... y antes de que preguntes el nombre de este demonio... me lo dijo, pero no me parecio lo suficientemente importante como para recordarlo- comente soltando la ultima bocanada de humo y apagando el cigarro en mis botas, me puse a jugar con la colilla apagada entre mis dedos.

- dado que no hay cigarros.... tienes idea si hay algun lugar cercano a donde comprar una cajetilla?-

-Vaya...-Me limité a decir frente a su historia.-De veras que quienquiera que sea tiene que tenerte demasiado odio como para hacer algo así, la mayoría no se tomaría la molestia. Por cierto, no pensaba preguntar su nombre. En realidad para mí no significa nada. No conozco demasiados demonios. Ni me interesa hacerlo, para ser sinceros. Yo simplemente me limito a cumplir mi función, no es como que esté en el Ejército Infernal para hacer sociales, tampoco.- Me encogí de hombros antes de responder a su última pregunta. -No sé si a esta hora habrá algún local abierto, en realidad...

- pues siempre hay maneras de averiguarlo. comento comenzando a caminar, sin sber si el otro le seguiria o no.

- si hay algun lugar, tambien podria conseguir algo para tomar, se me antoja un poco de alcohol a ti no?-pregunto tirando la mirada hacia atras mientras se corria los cabellos que luchaban por taparle el rostro y contra los que el luchaba para acomodarlos tras la oreja, porque no era que tubiera el pelo corto como para no poder acomodarlos, pero parecian tener vida y empeñarce en quererle cubrir siempre la cara.

-Pues, de hecho no estaría mal algún trago. No después de tantos días de mierda. No cuando acabo de cruzarme con un ser al que la vida le está fastidiando tanto o más que a mí. Hay que brindar por la desgracia.-Me encogí de hombros. No tenía tanto sentido lo que acababa de decir, pero gustaba de usar frases sarcásticas. No había nada por lo que festejar, y esa era para mí la máxima razón de fiesta. Siempre había tenido esa personalidad algo rebuscada y retorcida. Las personas que no me conocían casi siempre se espantaban o molestaban por eso, lo cual no hacía más que motivarme a seguir actuando del mismo modo, sólo por ir a la contraria. Así era yo, más que obvio. Un ángel que servía al ejército infernal.-Pero que corra todo por mi cuenta. Es casi una cábala, por decirlo de algún modo. Cada vez que conozco a alguien nuevo, soy quien invita lo que consumamos. Puede parecer que no, pero a veces hasta puedo ser un caballero.-Acabé diciendo mientras asentía con la cabeza en una mueca sarcástica.

sonrei ante sus palabras... parecia ser intencionalmente sarcastico o algo asi, pero eso solo me divertia mas, le mire dos segundos cuando dijo lo de que el invitaba, solte una carcajada llebandome los brazos a la cabeza mientras segia caminando

- por supuesto que tu invitas, priemro porque por ti se mojaron mis cigarros, y segundo porque no tengo dinero como para andar comprando alcohol para dos personas- mientras caminaba llegamos a la parte de rocas que luego llebaba al cemento, asi que fui saltando de roca en roca, en lugar de ir escalando tranquilo como haria cualquier persona normal.

- alguna preferencia en bebidas?-

Me sonreí de modo inconsciente con sus palabras. -Aquí vamos de nuevo...-
-Eso creí. No pareces precisamente un empresario multimillonario.-Observé.-Yo tampoco lo soy. Pero el dinero no es de las cosas que me falta o me cuesta conseguir. Y no malpienses, no se la he chupado a nadie.. .No por dinero.-Me encogí de hombros y fruncí el ceño, aún sin saber muy bien por qué razón había dicho algo como eso.-Por cierto, basta con lo de tus cigarros, ¿sí?-Le dije con tono de fastidio.-Como te dejes de joder con eso, te pago toda una licorería.-El chico sí que sabía ser insistente. No estaba precisamente molesto ni nada por el estilo, se necesitaba algo más que eso para hacerme enfadar. Simplemente ya se me hacía algo aburrido.-Y no. No tengo ninguna preferencia en particular. He probado algunas bebidas, y si bien mis favoritas son el whisky, el licor o el vodka, no rechazo un buen vino, o una cerveza fría.

le observe algo extrañado de que decidiera decir que no se la andaba chupando a nadie por dinero, cuando no habiamos levado la conversacion realmente para ese tipo de tematicas... aunque no pude evitar el comenzar a reir cuando pidio que la cortara con recriminarle mis cigarros

- vale vale, pero que suceptible has salido señor de la legion infernal...- que raro que se me hacia pronunciar aquello con una sonriza en los labios, era como si sintiera que en algun momento de mi vida lo hubiera pronunciado con gran desprecio.. aunque por ocmo contaba yoko que yo era, probablemente lo hubiera pronunciado caso con anhelo por ir a golpearme con ellos... inconciente de mi... sabiendo que me hiban a romper... bueno.. que inconciente seguia siendo la verdad...

- yo me quedo de todo lo que mencionaste.. con el Vodka... definitivamente.. o le sumamos a tu lista el tekila.- dije sonriendo olvidando mis pensamientos.

-Bueno, no suelo ser susceptible, pero no me gusta que me jodan. A nadie le gusta, supongo. Y debes admitir que sabes cómo hacerlo...-Dije, quitándole importancia a mis palabras.-Como sea. Yo puedo beber cualquier cosa. Pero si prefieres vodka, así será entonces.-Me encogí de hombros y permanecí observándole durante algunos fugaces segundos: lo cierto era que me recordaba a mí. Es decir, yo nunca había estado en su situación, con tal amnesia. Pero sí gran parte de mi existencia tuve la gran duda de quién era en realidad, quién debía ser, por qué y quién así lo dictaminaba. Incluso a veces me detenía a pensarlo y caía en la cuenta de que aún había algún que otro vestigio de esa duda dentro de mí. Asqueroso vivir así. Asqueroso.

- que se como... jajajaja.. si.. devo tener un don innato para joder a la gente... probablemente lo que me metio en la cituacion actual fue ese don, no crees? jajaja...- dije riendo, probablemente ese hombre, habia dado en el pilar de toda mi personalidad con ese comentario.

note que me observo por un momento pero no dije nada al respecto, queria beber, queria sacarme esas urgencias de no saber quien era, y tal vez, solo tal vez, un poco de alcohol me ayudara en eso.

con solo caminar un poco mas llegamos a la parte avitada y pronto aparecio uno de esos negocios de 24hs que en ciudades como esta, en estos tiempos, devian de hacerce millonarios dado a la cantidad de seres nocturnos...

- ya, podemos comprar todo el alcohol que querramos!- declare sonriendo

OFF: Había olvidado que debía este temaaa! Perdón u.u :$

-Bienvenido a mi mundo entonces, Cerberus. Porque aunque parezca que no, también soy de los que tienen una patología por joder la vida ajena. Una buena amiga me dijo una vez que fastidiar a los demás era una buena forma de entretenerse; más dañino que la muerte, pero a su vez mucho más sutil.-Esbocé una media sonrisa.-Es así, uno es tan hijo de puta, que en cierto momento de verdad empieza a disfrutarlo. Y es entonces cuando ya no puedes evitarlo, la maldad te emana por los poros.-Me encojí de hombros y mantuve un gesto inexpresivo.-"No te engañe la amplitud de la entrada; la salida del pecado es estrecha."-Cité con marcada ironía una famosa frase de La Biblia y hasta gracioso se me hizo de un momento a otro. A su último comentario me sonreí,. sintiendo que llevaba a un crío a un parque de diversiones.-Ah, tú no me conoces. Con respecto al alcohol, puedo pasármelas bebiendo toda la noche, no me embriago fácil, mi cuerpo está acostumbrado. Así que mejor vete preparando.-Concluí ingresando a aquel sitio entre penumbras, con música que desconocía por completo, como casi toda la de esta época, y un ambiente de ebriedad que podría resultar abrumador para quien no estuviese acostumbrado. Conocía muy bien aquel sitio. Lo había frecuentado varias veces, incluso la última había sido un tanto escandalosa. Avancé con paso firme hacia el mostrador y noté los murmullos y las miradas de las personas instantáneamente; tenía un sexto sentido para eso. Me di cuenta también de que los diferentes camareros se disiparon por las mesas o la despensa, sólo uno se acercó un tanto dubitativo, nuevo, claro, no tenía más de un mes trabajando allí, porque de lo contrario lo reconocería.
-Buenas noches caballeros, ¿qué se les ofrece?-El jovenzuelo que tenía enfrente no pasaba de los veinte años por su voz y su cuerpo, pero su rostro de gesto infantil daba a pensar que ni siquiera era mayor de edad. Tenía cabello claro y algo largo, la piel era blanquísima y los ojos de un color azul imponente. Nada mal, debía decir.-Buenas noches. Por el momento, sólo queremos dos vodkas con abundante hielo. Y que sea rápido, no me gusta esperar.
-Claro señor. Pueden tomar asiento donde deseen, sus bebidas estarán en seguida.-Al verle hacer ademán de voltear para llamar a una camarera, lo tomo por uno de sus menudos brazos obligándole a voltear.-No será necesario, nos quedaremos aquí, en la barra.-Sabía que al lycan no le importaba el sitio mientras hubiese bebida. Había olvidado por completo controlar mi fuerza. Cuando solté al chico, se quedó acariciando su muñeca y pude ver mis dedos marcados en su piel. Le miré directo a los ojos y noté pronto el temor que le sobrevino.-Lo siento. No soy bueno en eso de controlar la fuerza.-Solté despacio en tono algo sombrío. Asintió con la cabeza rápido y se marchó. Devolví mi mirada a Cerberus.-Espero que no seas de los que le molesta ser centro de atención. Aquí en LA casi todos me conocen. Es la ciudad que más frecuento.-Dije como si tal cosa, quitándole importancia a mis palabras.

- no, no soy de los q les molesta ser el centro de atencion.... por un motivo o por otro siempre termino en peleas q atraen las miradas de todo mundo...- declare sonriendo con um gesto sombrio, mientras me acomodaba en la barra y miraba el brazo marcado del chico.... y como temblequeaba con notorio miedo...
.
- uno diria que siendo un ser como el que eres deberias saber controlar  tu fuerza.... o que en su defecto.... - mire nuevamente al chico -  que los humanos ya se habrian acoatumbrado a ese tipo de incidentes..... parece q no importa q tan pocos queden de ellos ,  aun no pierden la ingenua idea de que solo son ellos en este mundo... o la ingenua esperanza..... quien sabe cual es realmentw... -   probablemente solte un ligero gruñido ante ello.... pero solo fue eso ,  ligero y apenas audible... solo uno
.
pronto puso el chico las bebidas ante nosotros. sonrei ante el alcohol.
.
-  has el fabor chico de dejar la botella con esto no hacemos ni para  quince minutos....-