Despertar (libre)

Había tenido un sueño extraño, como la mayoría de mis sueños, solo que este la dejo con la misma sensación que tuvo al conocer a Adrian. Y con un asqueroso dolor de cabeza de los mil demonios razón por la cual se había ido a la mierda de la casa, antes de que Darius se diera cuenta y la obligara a tragarse alguna aspirina o algo por el estilo.
De todas formas, no tenía ni puta idea de porque estaba en el bosque ahora, solo le parecía que estaba relacionado con aquel sueño y que de todas formas le venía bien para ver si conseguía alguna mascota bonita y tierna... como un lobo o algo así.

Lo bueno es que al ser casi de noche estaba muy convencida de que iba a encontrar lo que quería pronto, lo malo es que aún no pensaba una excusa lo suficientemente buena como para que Dar no jodiera mucho luego...

Caminó un poco más, distraída intentando darle sentido al sueño... pero solo tenía imágenes aisladas que no tenían mucho que ver entre si. Lo único que entendía es que en la mayoría aparecía la misma chica, pero nunca alcanzaba a verla del todo.

Los pensamientos de alguien que estaba cerca se me metieron a la cabeza. Eran sólo imágenes, de motos, de carros, de dulces, muchos dulces, de cuevas, de un chico rubio, unos ojos grises, de un tigre...
Al principio no supe interpretarlos, sobre todo porque los míos también eran un mar de cosas sin sentido pero, luego, algo hizo clic en mi cabeza y lo entendí.

- ¡Yoko!- grité antes de siquiera darme cuenta - ¡Yoko! - repetí asustada.

No podía creer que la primera persona en encontrarme al despertar fuera ese pequeño monstruo.
Ya me estaba poniendo de pie cuando más recuerdos llegaron, algunos de payasos, de fantasmas y demás cosas. ¿Era realmente Yoko? Igual, era alguien y me moría por saber en que año estábamos, así que corrí entre los árboles hasta quedar frente a ella.

Físicamente era similar, aunque Yoko tenía cinco años cuando la conocí por algún hechizo extraño. Claro, luego Colin rompería el hechizo y crecería hasta tener una apariencia como la de esa chica.

- ¿Yoko?- pregunté tontamente.
[i]

La pelirroja seguía caminando, distraída con sus pensamientos e intentos de deducciones sobre el significado del sueño.Era un maldito circulo vicioso, cuanto más pensaba, más le dolía la cabeza y como el dolor era signo de que las imágenes eran importantes, más quería saber que mierda significaban. Tranquilamente podría haberla atacado un jodido lobo... o un jodido lo-que-sea, de lo distraída que estaba. Ni siquiera se percató que había alguien cerca hasta que oyó su nombre.
Estuvo a punto de responder con un "yo no fui" por puro reflejo, sobre todo porque la voz se le hizo familiar, aunque al mismo tiempo no recordaba haberla oído. Hasta que vio el rostro de la persona que tenía enfrente...
Retrocedió un par de pasos muy convencida de que le acababa de reventar el cerebro, dándose cuenta de que esa que tenía enfrente era la misma chica de sus sueños... pero sin estar muy segura del todo de quien era en realidad.
-...Soy... yo... quién coño eres?- preguntó apoyándose contra un árbol antes de terminar en el suelo, mientras mentalmente se cagaba en la puta madre que parió a todo el mundo. Teniendo la sospecha de que la chica era algún tipo de familiar o algo por el estilo.

La pobre chica casi le da un infarto apenas me vio pero no me reconocio. Y claro, cómo no se va a asustar, si de la nada aparece una vampira desnuda llena de tierra gritando su nombre como una loca. Debía agradecer que no saliera corriendo...

Tuve que esforzarme por no sufrir una jaqueca, la pobre ni siquiera se daba cuenta que sus pensamientos le salian como letreros por las orejas. Entre esas imágenes estaba yo, así que de alguna manera debía conocerme.

Pensé en pedirle que pusiera la mente en blanco por un momento pero imaginé una respuesta al estilo Yoko: "¿blanco? ¿cómo blanco? ¿blanco como la nieve o como el marfil? mira que a los elefantes los matan por el marfil, ¿o blanco como la sal? la sal es mala para la tensión arterial, es mejor un blanco como el azucar, como el azucar de los dulces, ¿te gustan los dulces? porque a mi me vuelven loca."

No pude evitar sonreir al recordarla. Aunque, con la cara que tenía, bien podría ser alguien con su apariencia y sus recuerdos pero mil años más tarde, eso no sería nada raro...

- Soy Kyra, ¿no me recuerdas?- pregunté.

Por más que lo intentara, probablemente seguiría asustada por mi apariencia de madre selva.
[i]

Acababa de caer en la cuenta de que la chica estaba desnuda y bañada en tierra, más que nada porque oyó la voz de Kitty interrumpiendo el sin fin de imágenes sin sentido que la atormentaba solo para decir "pobrecita hada del bosque encantado, debe tener frío, no sería mejor si se hiciera un abrigo de flores... aunque, con eso de que es invierno quizás convendría un abrigo de piel, pero para eso habría que asesinar cruelmente a un pobre e indefenso animal y seguro que no le gusta la idea. Y si le conseguimos un osito que le dé abrazos y la mantenga calentita?". Consiguiendo con eso que le doliera aún más la maldita cabeza.

Al mismo tiempo la chica que tenía enfrente acababa de soltarle su nombre haciendo que finalmente tuviera que sentarse contra el árbol. Acababa de sumarse una pieza más al rompecabezas, una que parecía lo suficientemente importante como para despertarle un millón de sentimientos.
-Kitty, cierra la maldita boca!- masculló antes de clavar la mirada en esos ojos verdes, probablemente ahora iba a pensar que estaba loca, aunque... si estaba algo loca.
-Si... no, no sé... te recuerdo pero no estoy muy segura de que eras para mi...- intentó explicarse, al menos ahora sabía quién era la chica con la que había soñado-recuerdo la moto- agregó con una sonrisita y la sensación de que esa moto las había metido en un par de problemas.

Cruzó las piernas sentándose como los indios e intentando poner en orden los recuerdos- También eras hija de Adrian?- preguntó casi con inocencia-recuerdo que eras algo así como una hermana... o tía, creo... no estoy segura... y había un tipo... muy molesto- murmuro frunciendo un poco el ceño al intentar acordarse bien-le faltaba una buena follada- medio mascullé con la extraña sensación de que a pesar de eso le tenía cariño.

Intentó entender algo más, pero se rindió al ver que no conseguía demasiado-el resto son escenas sueltas que no termino de entender- soltó un suspiro algo frustrado, cuál era el chiste de poder recordar tu vida pasada si los recuerdos no tenían ni pies ni cabeza?

Frunció un poco el ceño con la forma en que le dijo que no había sido hija de Adris y no pudo evitar saltar en su defensa-era buen padre... me compraba dulces y mangas yaoi! ...espera- volvió a fruncir el ceño al darse cuenta de que técnicamente le conseguía mangas yaoi cuando parecía apenas una niña- ...mierda... era un padre genial- repitió, esta vez bastante sorprendida.

Estalló en carcajadas al escuchar quien era ese tipo tratando al mismo tiempo de buscar la dulceria entre todas las imágenes -JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA....ese tipo era mi niñera?! pobecito...- tuvo que apiadarse de él, no recordaría muchas cosas pero estaba segura como el infierno de que en esa época era la misma hija de puta que ahora- dijiste Mike? la nana Mike? la nana Mickey...?- por dios... tenía que contarle a Adrian eso de los apodos en cuanto lo viera.
- Pobre tipo... No estoy segura de qué dulcerías hablas... creo que habían muchas... qué raro...- ajam, raro.

-Traviesa yo??? pero si soy un angelito! de que diablos hablas?- el reclamo le había salido del alma, si bien su personalidad no había cambiado demasiado desde aquella época, no con todos hablaba así. Tal vez no recordara todo y lo que recordaba no lo entendiera bien, pero... sentía como si la conociera de toda la vida.

-y... ya te dije que recuerdo muchas dulcerías, probablemente me pasaba en ellas la mitad del tiempo... Dame más detalles...- definitivamente iba a morir de un desparrame cerebral en cuanto me explotaran los sesos y se le escaparan por los ojos, orejas y nariz como siguiera forzando su cabeza para recordar. Pero para lo que le servía...

La pelirroja escuchaba atentamente, soltando risitas en algunos momentos y haciéndose la tonta olímpicamente en otros. Ahora sentía más curiosidad sobre ese Mike... recordaba muy pocas cosas sobre él, más que nada la sensación de que le encantaba volver loco al pobre, pero al mismo tiempo le tenía mucho cariño. Suponía que hasta que no se lo cruzara de nuevo, si es que tenía la suerte, no podría saber nada más aparte de lo que le contaran.

-Se preocupaban demasiado...- negó con la cabeza-creían que podía morirme solo por no mirar cuando cruzaba la calle y nunca se enteraron que hacía cosas mucho peores y terminaba sin un rasguño... Creían que era de cristal y por eso se volvían locos intentando que no me pase nada- sabía que eso no era del todo cierto, pero entre que ellos la sobre protegían y ella era un maldito desastre... daba igual.
Ahora no sabía si decirle o no que no había cambiado una mierda... al menos no cuando estaba ella al mando, le daba un poco de pena por Kyra-eras como una especie de cómplice...- murmuró de la nada con una sonrisita de lado-creo que terminaba sumándote a la diversión en lugar de que tu lograras que me comportara... si es que hacías el intento. No tienes cara de haber hecho el intento...- ni bien termino de hablar, cayó en la cuenta de otra cosa y se la quedó mirando durante varios segundos antes de preguntar-cómo es que estas al sol y no te achicharraste todavía?
" Es un hada~♪" canturreó Kitty dentro de su cabeza, dando a entender que no había escuchado una mierda de todo lo que habían dicho.

Yoko ladeó la cabeza mirándola con curiosidad-puedes oír a Kitty?- preguntó, probablemente debería explicarle quien era... antes de que ella decidiera presentarse sola y la invitara a alguna de sus estupideces hippies. Iba a hacerlo, pero... Kyra continuó hablando y se le olvidó-lo dices en serio? puedes ir a la playa? antes no podías, verdad? te habría arrastrado a una y no recuerdo haberlo hecho... - comentó, preguntándose qué sería más divertido si llevarla a hacerse mierda en tablas de surf, o llevarla a hacerse mierda en motos de agua.

Tuvo que aguantar una sonrisa, tenía la sensación de que no solo se hacía pasar por su amiga para cuidarla, sino que también se divertía con las locuras que hacía la pelirroja.
-cómo diablos terminé en un cuerpo de 5 años? jodí a quien no debía, verdad? ...apuesto a que fue divertido- sonrió triunfante, como si hubiese hecho algo de lo que tuviera que estar orgullosa, antes de seguir prestando atención a lo que Kyra decía, ladeando la cabeza de forma inconsciente.Frunció levemente el ceño antes de replicar-no confío en ti porque sabes mi nombre, lo hago porque recuerdo el tuyo... entre otras cosas.
No podía negar que la inquietaba un poco el hecho de que empezara a verla como posible presa, pero al mismo tiempo le entraban ganas de jugar. No podía evitarlo, bastaba con sentirse amenazada por alguien mucho más fuerte que ella para poner una sonrisa en los labios y que el propio cuerpo le pidiera pelea. Incluso estuvo a punto de soltar la carcajada al sentir el impulso de Kitty por abrazarla, para "ayudarla a luchar contra ese sentimiento negativo". No era que le gustara la situación, por sus recuerdos se daba cuenta de que se llevaba bien con esa chica al punto de que no recordaba haberla visto enojada nunca, pero... definitivamente no podía consigo misma.

Se sobresaltó cuando Kyra derribo de un golpe el árbol en el que se apoyaba y tensó los labios levemente antes de tomar un poco de aire...- tengo una segunda personalidad extremadamente hippie que va por la vida dando amor a cuanto... ser vivo se cruce, y... acaba de decidir que tu te ves demasiado "falta de cariño". Yo que tu tendría cuidado cuando te acercas así, es capas de robarte un beso... y otras cosas- sonrió de oreja a oreja, luego de haber hecho la aclaración en tono muy divertido-y... creo que me cruce con gente muy jodida a la que... de alguna forma le caí bien, tenía un ángel aparte o algo de eso, no había por qué preocuparse tanto- insistió de cabeza dura que era.

Sonrió satisfecha al ver que Kyra le daba la razón, para un segundo después fruncir el ceño ante la mención de un secuestro y un tal Colin, desatando en su mente algunas imágenes que no duraban más de medio segundo y venían acompañadas del maldito dolor de cabeza.
-Ese nombre no suena muy de ángel... aunque supongo que sería del tipo de "ángel" que entra en mis definiciones- sacude un poco la cabeza al ver que empieza a hacerse lio ella sola-se lo agradecí al menos?- preguntó porque tenía la sensación de que en el momento le parecía alguien fastidioso pero aún así le tenía mucho cariño.
-No te cagas de frío?- preguntó viendo como se acomodaba sobre la nieve-de noche también se puede ir al mar, me consta... el agua esta igual de mojada que de día- sonrió divertida, consciente de que la única razón por la que me gustaba ir de noche era porque el bañero no jodía.
Pensó por un par de segundos, no muy segura de la respuesta-2225... creo, o por ahí, pero no se te ocurra preguntarme ni mes ni año...

La miró divertida, por qué no le sorprendía que ni siquiera antes pensara en eso...
La pelirroja se encogió de hombros y dirigió la vista al cielo también, no era algo que le llamara la atención particularmente, si bien tenía sus ratos de admirar "la belleza de las pequeñas cosas", pero en general ese era el trabajo de Kitty. Yoko se ocupaba de meterlas en problemas y coleccionar "trofeos de guerra" nada más.

Sonrió levemente, en cierta forma aliviada de que aquel pobre tipo supiera que de alguna forma le agradecía que le cagara la diversión. Además, quién sabe? quizás si lo volviera a ver algún día... más al paso en que iban.

Recordó que los vampiros no sentían el frío y el calor de la misma forma que los humanos cuando ella le dijo que no tenía frío, aún así, le lanzó su abrigo que no era la gran cosa pero al menos servía para cubrir lo básico.
-que envidia, las cosas que podría hacer si oyera así de bien...- comentó con una sonrisita traviesa, antes de ponerse de pie y seguirla.

Sonrió satisfecha viendo como la chica entendía exactamente a qué se refería, no cabía duda de que la conocía muy bien... o bueno, a su yo anterior. Esperaba que eso fuera una ventaja y no volvieran al juego de "la niñera cuidando a la niña rebelde".

Yoko miró como tomaba el abrigo con los dedos, como si éste pudiera contagiarle alguna peste, aunque sabía que no era esa la razón- como quieras, pero no creas que esta demasiado limpio... recuerda que termino metida en cualquier agujero- comento con una sonrisita inocente.

Su sonrisa cambió a una más divertida-descuida, eso de que las personas se despiertan llenas de energía solo ocurre en los comerciales. Kitty es un bicho raro, ser feliz todo el tiempo no puede ser bueno...- hizo una mueca de fastidio-Y... ahora que mencionas a las motos... yo también debería conseguir una, así la próxima recordamos viejos tiempos

Puso los ojos en blanco, aunque tenía que concederle que se "preocupaba" menos por ella que la mayoría de las personas que conocía. O al menos no intentaba persuadirla para que no se hiciera mierda...
-Para qué mierda voy a aprender a conducirla si de todas formas me haré mierda con ella? es más divertida aprender en el proceso... y es más fácil que me acuerde así...- comentó, sintiéndose algo extraña con la expresión que la chica acababa de usar.

Miro a su alrededor, intentando recordar como coño le había dicho Adris que se llamaba el lugar- estamos en un bosque...- empezó, como si eso no fuese lo más obvio del mundo- el nombre era algo con D... creo... y había una K y una H por ahí, estoy casi segura- agregó- y esta en un lugar que empieza con V... algo de V-no-sé-qué- city- declaró, muy orgullosa de su memoria.