Silver Bullets don't kill Vampires [Gabrielle Lioncourt]

Ahora tenía una misión, tenía que vigilar esa zona donde se encontraba la casa de seguridad, aunque a veces solo pasara por allí solo unos momentos ya que se alojaba con su amado, dejando el cementerio donde el último tiempo solo se había escondido de los rayos del sol.
La noche se veía calmada, y solo caminaba despacio por la calle, al parecer los demonios no estaban con ánimos de hacer escándalo esa noche y despreocupada se pudo relajar un momento.
No era normal en esa época encontrar algún momento que no exigiera luchar por la vida propia o de algún inocente, además se había alimentado hacia días y no tenía esa necesidad, algo que agradecía al paso del tiempo.
Iba con su traje típico un pantalón cómodo de franela color beige, sus botas militares y una camisa que iba a juego con el pantalón, por supuesto llevaba el arma y la espada colgadas del cinturón, el cabello lo llevaba trenzado como siempre y aunque no parecía amistosa no tenía intenciones de pelear con nadie.
Fijo la mirada en el fin de la calle cuando noto la presencia de alguien, de lejos se asemejaba a una chica, vestía de una manera moderna, después noto que ella la miraba o seria él, no sabía en estos días no se podía estar segura de nada y tampoco le gustaba dar cosas por sentado, pero algo le aseguraba que no era un enemigo, le parecía que solo estaba de paso y le sonrió gentilmente. Hizo una leve reverencia con su cabeza y camino hacia ella, con paso firme, seguro como siempre lo hacía, ella parecía un gato o seria otra cosa, su aroma la confundía, era de humano, pero también de algo mas, era nuevo jamás había percibido aroma así en su existencia. Un toque salvaje, pudo notarlo como sus días en la selva mientras probaba sus habilidades.
Hola, ¿Está buscando a alguien?