Curioso Encuentro-priv- [Wolf&Stancy]

La híbrida no salía del estupor que le había provocado que su hermano sin más, sin si quiera consultarla hubiese aceptado la indecente proposición de la vampiresa, bufé indignada y me removí entre los brazos de Wolf incómoda por la situación. El chico parecía haber sido hechizado por la niña de cabellos dorados, no me extrañaba dicho comportamiento provocado por un ser sin escrúpulos como lo eran los vampiros, sin embargo me sentía decepcionada y avergonzada de que mi hermano sucumbiera tan fácilmente ante ella.

Al llegar al restaurante, uno de los empleados llegó a recibirlos. Instintivamente y sin mirarlo, Anya tendió un billete en su mano- Mesa para tres- dijo con firmeza y sin más entró al establecimiento. El lugar estaba relativamente vacío, solo unas cuantas parejas se juntaba ahí para sus cenas románticas o por alguna festividad especial. El salón principal del comedor estaba decorado con un precioso tapiz color azul cielo con conchas blancas pintadas, era una decoración muy digna de un restaurante a la orilla de la playa. A decir verdad, todo en aquel lugar tenía motivos marinos que le daba un toque bastante hogareño. 

Anya, se acercó a una mesa junto a la fogata y se sentó en ella sin mirar a sus acompañantes, aunque en realidad escuchaba el discurso de Wolf sobre su falta de amigos- ja eso no me sorprende- respondió ante eso la vampiresa en un tono altivo y despreocupado. Tras finalizar su historia, el joven lobo preguntó por su clan, lo que instintivamente hizo reír a Anya armoniosamente. -Yo no creo en los clanes, son una pérdida de tiempo y representan un gran desgaste emocional- respondió mientras jugaba con la carta del menú; sabía que no podría comer nada, pero los alimentos humanos le causaban un gran interés. 

-Pueden pedir lo que les plazca- dijo la rubia por fin mirándolos. Sus orbes azulinos se clavaban en la bella minina- parece que no le agrado a tu amiga....-finalizo con una sonrisa insolente en sus labios.

La chica gato se removía inquieta entre los brazos de su hermano dándole señales de que le incomodaba su impertinencia al hablar tan abiertamente con la vampiro, apenas al entrar al recinto se liberó con agilidad de los brazos de Wolf y merodeé admirando el lugar ante los ojos atónitos del hostess que parecía disimular una mueca de inquietud de la posibilidad de que pudiera incomodar al resto de los clientes la presencia de un animal. 

Habría podido divertirse un poco más pero el viaje la tenía agotada y hambrienta, así que apenas la pareja tomó asiento, Stancy saltó sobre el regazo de Wolf emitiendo un suave maullido.