In the mouth of the Devil [Aniel]

La noche me seducía siempre. Era como una hermosa dama vestida de negro, aguardando a verme para jugar conmigo. O, por qué no, como un muchacho de rosados pómulos y cabello rizado, esperando para burlarse de mí cuando quede solo y embriagado de deseo. Ella y yo manteníamos esa relación amor/odio desde que nos conocíamos. Pues bien, en aquella ocasión decidimos encontrarnos en uno de esos sitios oscuros y prohibidos. El lugar exacto era un callejón desolado. Hacía mucho frío, la única luz provenía de una farola y parpadeaba. Estaba sentado en el escalón de la vereda, solo. Faltaban unos pocos minutos para que llegara ella y se apoderara de todo con su oscuro manto perlado de brillos. Faltaba poco para que el misticismo de la noche dominara la ciudad absolutamente. No pretendía nada, sólo estar allí con ella. Conversar con los diferentes yo, discutir juntos de aquellas cosas en las que sabemos jamás estaremos de acuerdo. Introduje mi mano derecha en el bolsillo de mi chaqueta color verde apagado y extraje un cigarro. Lo encendí y tomé una gran bocanada de humo. Cerré los ojos por degustarlo mejor. Al momento, liberé el humo por mi boca despacio mientras dejaba que las diferentes sensaciones colisionaran dentro de mi cuerpo humano...
De repente, me vi obligado a salir de aquel trance por un brusco sonido, parecía un disparo. Podría jurar que era un disparo. Observé alrededor y no vi nada. Permanecí espectante y a los segundos logré divisar a un joven, (más bien era uno de esos mozalbetes precoces) que intentaba acercarse a rastras. Noté su gran esfuerzo por hablar.
-Ayu... Ayúdame, por... favor.
Fue entonces que pude ver cómo emanaban delgados hilos de sangre de su vientre: lo que había oído sí era un tiro, e intencionalmente o no, había ido a darle a aquel idiota humano.
Pasé una mano por su vientre, como intentando confirmar mi sospecha. Luego observé mis dedos teñidos con aquel líquido rojizo. El chico me miró de modo suplicante. Lo tomé por la quijada y le retiré algunos mechones de cabello color azabache del rostro. Sus facciones eran suaves y bastante curvilíneas. Pasé mis pulgares por sus rosados pómulos, examinándolo, cuando mi atención se vio desviada hacia un colgante que llevaba. Era un crucifijo de metal plateado. Lo sujeté entre mis manos y se lo arranqué del cuello.
-Esta mierda no te servirá de nada. Ustedes no la necesitan. Él los perdonará y amará siempre. No tienen porqué fingir que lo aman también.
Tosió un par de veces liberando varias gotas de sangre.
-Por favor...-Suplicó de nuevo.
Lo observé por varios segundos y eché a reír.
-Al final son ridículamente frágiles e indefensos, ¿cierto? Pero aún así nos alejaron de nuestro padre, hicieron que él nos rechazara.
-No sé de qué hablas, pero si he hecho algo, te pido perdón. Ruego tengas piedad, ayúdame.-agregó, casi en sollozos.
-El perdón y la piedad son cualidades de Dios, y te traigo malas noticias...-Volví a tomarlo por la cabeza y con un suave tirón, se la giré varios grados, sacándolo por fin de su miseria.-...yo no soy Él.

*al fin cae la noche, me preparo como es de costumbre para dar mis "paseos" la noche seria genial si me encontrara con algún mal nacido o un tipo con mala suerte que se tope en mi camino para acabar con sus miserables vidas, así desahogaba lo que tenia dentro y me daba un respiro,acababa con sus vidas y estaba mas contenta con la mía, la razón del por que, no lo se , solo sabia que resultaba, y llego al lugar exacto para encontrar mi alivio, estando de pie en la azotea de un edificio,tenia una vista privilegiada, miraba a mi derecha, un tipo golpeando salvaje mente a otro, luego miro a mi izquierda mas violencia y corrupción, solo era eso lo que sabían hacer estos estúpidos, al parecer si, el viento alborotaba mi largo cabello negro, y hacia flamear mi abrigo de cuero,desenfundo mi katana y la observo pensando en cuantas vidas había cobrado con ella eso me hace sonreír no eran vidas que valieran mucho la pena en verdad, cuando de repente veo pasar corriendo a un grupo de muchachos los perseguían otros tipos ya mayores los seguí con la mirada y pude oír lo que decían*
-por que has echo eso yo no quería verme involucrado en esto -

*mientras el otro joven le decía que tan solo corriera, uno de los tipos mayores da tres tiros le da a uno de los chicos su "amigo" no se detuvo a ayudarlo como era de esperarse mientras el chico herido logra escabullirse pero de seguro no duraría mucho,los tipos adultos dejan de correr y se detienen ,un error muy grande ya los tenia en la mira,bajo a sus espaldas sin que ellos me sintieran, no lo verían venir, así como ese chico no vio venir su condena le doy un giro a mi katana y corto sus cabezas ya eran historia vuelvo a la azotea nadie debía verme camino hacia el otro extremo y logro divisar al chico pero no estaba solo esta ves quizá lo ayudarían, alzo una ceja el chico parece suplicar al otro joven que estaba con el, lo veo todo y lo oigo todo raras palabras, supe que no era humano, al final aquel joven termina quebrando el cuello del herido,curioso o quizás no, bajo como una briza a ese callejón y me quedo observando el cuerpo inerte del pequeño , el otro chico no dejaba de mirar su cuerpo tampoco pero al parecer se percato de mi presencia se gira y me mira*

-al parecer el destino de ese chico era morir si o si -

*niego un poco sacando un pañuelo de mi abrigo con el cual limpio la sangre de mi katana *

- que mal por el -

Luego de asesinar a aquel jovenzuelo, bah, mejor dicho de acabar el trabajo de alguien más, permanecí algunos varios instantes observando la escena; aquello parecía un elaborado número de película: él yacía en el suelo, como un muñeco de porcelana, con una belleza casi indescriptible, rodeado de un charco de sangre, con las mejillas teñidas del mismo color y los azules ojos abiertos de par en par. Yo, sentado a su lado con expresión de indiferencia y el cigarro aún entre los labios. Nosotros y el cielo estrellado, y una suave brisa de verano, y el silencio que deja siempre la muerte, y el callejón totalmente desierto... ¿Desierto? No. No estaba desierto. A los pocos minutos, se acercó una chica de cabellos oscuros, ondulados y largos y mirada intensa con una katana ensangrentada, la cual luego limpió con un pañuelo. Percibí su presencia aunque fue muy silenciosa por la energía que emanaba; no era humana, de eso estaba seguro. Giré despacio y la observé.
-Bueno, yo no creo en el destino precisamente. Más bien me parece que este mozalbete sí sabía meterse en problemas. Y a eso se sumó la mala suerte de cruzarse en mi camino.-sacudí la cabeza y devolví la vista al cuerpo del chaval.-Triste.-Comenté por fin, en tono sarcástico.-Soy Chase.-Le dije a la joven y aguardé por su respuesta.

*le doy una sonrisa un poco malévola,al oír lo que dice me encojo de hombros y me acerco un poco a el y me inclino también al ver al muchacho niego un poco *

- quizá fue lo adecuado-

*el me mira y se presenta *

- un placer chase, mi nombre es aniel -

*le sonrió mirándolo a los ojos, tenia una mirada bastante interesante pero aun así su expresión carecía de algún sentimiento*

-y que haces aquí tan solo o esperabas a alguien...digo si se puede saber-

*me levanto y guardo mi katana la briza choca con mi rostro y el lugar completo apestaba a muerte unos de mis aromas favoritos *

La chica se presentó viéndome a los ojos. Su nombre era Aniel, un nombre poco común, pero me gustaba lo diferente.
-Bueno, creo que podría hacerte la misma pregunta... Aniel.-sonreí brevemente y ladeé la cabeza. Acto seguido, liberé una bocanada de humo suavemente.
-No espero a nadie. Sólo estaba... recorriendo los alrededores. Suelo estar en la boca del Diablo, no puedo evitarlo, es tan placentero tentar al peligro una y otra vez... No sé por qué, pero creo que lo entiendes.-
Permanecí en silencio y la observé minuciosamente, sin disimulo; era una chica muy hermosa.
-Bonita katana.-Le dije al cabo.-¿Es tuya?

* sonrió al oírlo hablar, si que lo entendía muy bien por algo salia todas las noches a "divertirme" en algunas ocasiones me encontraba con algo interesante y que no me hacia el trabajo mas fácil eso era divertido pero la mayoría de las veces era cosa de aburrimiento humanos son tan frágiles*

-si lo comprendo muy bien ...suelo hacerlo siempre -

* sonrió y veo que me observa , le sonrió de lado y respondo a su pregunta *

-si , esta es mi fiel compañera lleva mucho tiempo conmigo y puedo decir que es el tipo de compañera que nunca te falla -

*pongo mi mano en la katana cuantos momentos habíamos compartido mejor dicho cuantas cabezas hemos cortado, rió para mi misma y digo *

-no hay tanta acción esta noche como esperaba-

*miro aquel callejón casi vacío *

-si buscas algo de peligro aquí no lo encontraras...creo-

Escuché atentamente cada una de sus palabras, no podía estar más de acuerdo.
-Pues no, este callejón está muy solitario. Quizás deberíamos ir a algún otro sitio, en donde haya algo de movimiento, ¿no crees?- Le digo, invitándola explícitamente a salir a fastidiar al mundo entero conmigo. No solía hacerlo con otros, pero ella me daba buena espina, y como siempre he sido muy cordial y caballero, me pareció una buena idea.
-Por cierto, no pude evitar notar que a tu katana le gusta la acción. ¿De quién era esa sangre que llevaba? Imagino que de algún niño miserable, como ese Adonis de ahí.-Acabé indicando con la cabeza al cadáver del joven.

* sonrió ante su respuesta no estaría mal tener un compañero esta noche eso seria algo distinto basada en mi procedimiento*

- pues si seria genial y algo diferente para mi -

*le sonrió amplia mente, oigo lo que me dice después saco mi katana y la hago girar un poco *

- si a esa hermosura le encanta la acción...y bueno la sangre que traía era de los que mataron a este -

* señalo es cuerpo *

- nada difícil he de decir...solo no lo vieron venir -

* miro hacia el vació *

-bueno¿ nos vamos a buscar acción o que? -

* le sonrió y guiño *

-También sería algo diferente para mí, soy bastante solitario, para ser sinceros.-le dije en un tono neutral.
-Bueno, vamos a lo que es, asesinar a tan bella creación de Dios es un pecado que debe pagarse con la muerte.-Digo en tono sarcástico. Obviamente yo lo había matado, y había disfrutado mucho haciéndolo. Pero que era sexy, eso no podía negarlo.
-Me hubiese gustado presenciar esos asesinatos, se me hace que tienes habilidad en eso de rebanar, aunque finjas modestia.-sorío brevemente y me pongo de pie.
-Mejor ya marchémonos de este agujero.-le digo mientras dejo caer la colilla de cigarrillo y me dispongo a encender otro. Pero antes, como todo caballero, le acerco la cajetilla.
-¿Fumas?

-no se... por que presentí que eras ese tipo de persona solitaria-

*digo con una sonrisa en el rostro *

-si es una lastima que lo mataras estaba bastante bien el chico pude a ver me divertido un poco con el... debería odiarte por eso -

* digo en tono de broma , lo miro mientras me habla *

- te hubieras aburrido no fue nada...una sola pasada de esta hermosura y sus cabezas ya estaban rodando en el suelo ....mmm se puede decir que me manejo bien con ella pero aun no excelente como me gustaría me exijo demasiado a mi misma -

*comenzamos a caminar y el me ofrece un cigarrillo lo acepto *

-gracias lo necesitaba-

* tomo el cigarrillo y hago aparecer una pequeña llama azul en mi dedo y lo enciendo le doy una calada *

-¿bien a que lugar crees que podemos ir a causar terror?-

*pregunto mientras caminamos *

Sonrío brevemente ante su declaración de que debería odiarme.
-Lo lamento.-Dije en un tono que denotaba claramente que no lo hacía.-Odio a los humanos, al tenerlos cerca, no puedo pensar sino en quebrar uno por uno sus frágiles huesos. Si perteneciese a otra raza, muy probablemente aún respiraría. Hasta quizás lo habría ayudado. De cualquier forma, ya nunca lo sabremos, ¿cierto? Qué mas da. Por cierto, qué crees de ellos, digo, los humanos. ¿Te agradan?-La pregunta quedó suspendida en el aire unos segundos.
-Yo digo que deberíamos ir a algún lugar donde las personas no se dejen asesinar tan fácilmente. A donde usted diga estará bien.

*alzo una ceja al escucharlo y sonrió ante su pregunta *

-los humanos no me agradan, no los odio, no son algo muy importante en mi vida .el odio es un sentimiento muy fuerte que ni siquiera eso merecen por mi parte , ellos son para mi simplemente cosas que puedo utilizar y cuando ya no sirven...pues a la basura y de todas maneras me divierten un montón-

* digo sonriendo un poco , queda en mis manos llevarlo a la acción unas calles mas abajo había percibido cierto movimiento que llamo mi atención una pandilla de narcos tipos drogados a mas no poder y yo sabia que algunos sacaban bastantes fuerzas con eso ademas eran suficientes *

-¿que dices ellos o seguimos buscando?.....podemos jugar un rato con ellos se ven divertidos -

*lo miro de reojo y sonrió de lado esperando su respuesta *

Me sonrío ante su respuesta. Ingeniosa, debía reconocer.
-Pues sí, se nota que te divierten mucho. A mí también, pero a diferencia de ti, no puedo dejarlos salir con vida. Nunca pude. Es personal, ¿sabes? Soy un tanto rencoroso. Y... digamos que de algún modo ellos tienen algo que debería ser mío. Eso apesta, sabes. Apesta.-Dije, molesto mientras pateaba una piedra.- Pero bueno, al demonio. Yo ya no ambiciono ese algo. Sólo quiero ver su sangre correr... antes se trataba de celos, ahora se trata de venganza.-Permanecí en silencio por varios segundos, con la mirada distante y visiblemente llena de odio.
-Estoy de acuerdo contigo. Quedémonos con ellos, será divertido.-Le dije con una sonrisa maligna dibujada en los labios.-¿Quién los provoca primero, tú o yo? A mí me da lo mismo.

-me pregunto que tienen ellos que te interesa o que te da celos...bueno eso es cosa tuya ...soy muy curiosa a veces -

*doy mi ultima calada a mi cigarrillo y lo lanzo al suelo, veo en sus ojos el odio por aquella raza tan baja y eso de algún modo me anima aun mas no se por que...hasta ganas de reír me dieron pero la contuve mirando a la pandilla *

- creo que seria muy divertido si vez como una mujer provoca a unos bastardos...no te vas a arrepentir -

* me adelanto unos pasos y camino directo a la pandilla, me paro enfrente de ellos y sonrió de la forma mas inocente que podía*

-me han dicho que aquí puedo encontrar lo que necesito...¿alguien seria tan amable de ayudar a esta pobre chica?-

*los tipos me miran y comienzan a reír uno de ellos se me acerca demasiado, yo me quedo muy quieta y lo miro a los ojos se notaba a lo lejos que estaba drogado a mas no poder y me habla *

-depende de lo que busques lindura... aunque creo saber que es lo que quiere una zorra como tu -

*rompo a reír en su cara descaradamente *

-no creo que puedas darme lo suficiente y lo único que tengo de zorra es la inteligencia cosa que tu no tienes ....no fue nada inteligente hablarme así...aunque veo que si tienes lo que quiere -

*el tipo me mira con una ceja alzada , yo le doy una mirada a chase y le guiño invitándolo a unirse por que lo que aria pronto desataría el caos , vuelvo mi mirada totalmente amenazante al tipo y me lanzo a su garganta mordiéndolo y desgarrando su garganta con mis colmillos escupo hacia un lado botando un troza de su piel hago una mueca de desagrado *

-estas lleno de esa mierda hombre -

*el asqueroso sabor me quedo en la boca el tipo gritaba como una perra y yo me rió con mis labios empapados en sangre intoxicada los demás se ponen inmediatamente en guardia y se me lanzan dos a atacarme los esquivo y los golpeos doy un salto y un giro llegando al techo de un carro miro a chase y le hago una señal con la mano *

-que dices cariño.....te unes -

*rompo a reír malvada *

Su pregunta no me molestó en absoluto, si bien jamás había sido conversador, ella tenía algo especial. Me agradaba. Y era interesante contarle de mí.
-Bueno, soy un ángel caído. Obviamente fui un celestial en algún momento. Durante ese tiempo, mi deber era claro: luchar contra los demonios y los ángeles traidores. Pero cuando la guerra estalló, fui enviado a la Tierra para protegerlos, a los humanos. Fue entonces que pude ver el estilo de vida que llevaban, totalmente contrario a las enseñanzas de Dios. Y sin embargo, ellos poseían amor y perdón eterno, por el contrario a nosotros, que se nos exigía y censuraba con estrictas leyes que si no cumplíamos éramos castigados severamente. Eso no era justo. En especial mi odio por ellos se vio reforzado cuando fui expulsado del ejército del Cielo. Y todo por sexo.-Dejo una pausa.-Como sea, hace tiempo que el amor de Dios no me importa, pero soy resentido y vengativo, así es que aún los odio.
Observé cómo Aniel se acercaba a aquellos drogadictos con la total convicción de que los siguientes minutos serían muy entretenidos. Visualicé todo, detenidamente, mientras también analizaba cómo hacer mis próximos movimientos. Escuché el diálogo que mantuvo con uno de los tipos y vi cómo se le lanzó a la yugular.
-Vampiro. Debí suponerlo.
Aniel me hace una señal con la mano y me invita a acompañarla. Debía admitir que la escena era muy sexy. Ella cubierta de sangre, enseñando una sonrisa que parecía de lo más dulce.
-¿Qué pasa, caballeros? ¿Algún problema con la dama?-Acabé diciendo cuando alcé a uno con una sola mano y lo lancé violentamente al suelo. Otro me atacó por la espalda. Negué con la cabeza lentamente y dije:-¿Atacar por la espalda? Eso es de cobardes.-Le di un codazo en el vientre y cuando cayó al suelo, comencé a golpearle el rostro. Lo hice varias veces. Me acerqué y lamí un poco de la sangre de su mejilla. Si bien no era un vampiro, mantenía una extraña y perversa obsesión por la sangre que aún no lograba comprender del todo. Me relamí y sonreí. Cuando su rostro ya estaba deformado por los golpes, llegó la parte que más me gusta de los ataques a los humanos: la súplica.
-Por favor, déjame en paz.-Reí sarcásticamente.
-Lo siento amiguito, pero aún no me divierto del todo.-Me acerqué a su oído y le susurré unas palabras. Haciendo uso del control mental que poseemos todos los caídos, le obligué a comerse a sí mismo. Observé la escena con satisfacción, mientras me salpicaba con su sangre y gritaba como un imbécil.
-Deténlo. Por favor. ¿Qué quieres que haga?-Volví a acercármele y le susurré, con la voz más dulce del mundo:
-Quiero que mueras.
Clavé mis dedos en su pecho y le arranqué el corazón. Mi sonrisa se fue ampliando mientras observaba el aún latente órgano en mi mano. Extendí mi brazo y se lo ofrecí a Aniel.
-Un pequeño presente, cariño.- Le guiñé un ojo.
Fue entonces cuando comencé a sentir ese dolor tan conocido e intenso, era la cicatriz en mi pecho, la marca de la traición. Cada vez que dañaba una creación de Dios, ardía como el mismo Infierno. Me había tomado desprevenido esa vez, tanto así que me dejé caer al suelo y grité.
-¡Mierda! Ya casi olvidaba cómo se siente.-Dije al cabo, mientras presionaba la sangrante herida en mi pecho.

* había escuchado atentamente su relato del por que los celos con los humanos y lo entendí *

- te entiendo antes mi madre me hablaba de esas cosas....por cierto ella era un caído también rara mezcla vampiro y un caído -

* esa fue mi respuesta al escuchar su historia ya en la lucha contra los bastardos lo veo luchar me quede un momento observándolo para ver que tal tenia una gran sonrisa en mi rostros unos de los tipos se acerca para atacarme lo bloqueo con una patada en el rostro y le digo *

-déjame disfrutar el espectáculo..-.

*miro al tipo sarcástica tomo su rostro y hago que mire lo que chase hace *

- mira dime que no es un ángel espectacular ...eso es arte aprende -

*giro el cuellos del tipo y cae sin vida segundo después chase me da ese precioso regalo el corazón de aquel tipo lo recibo y le lanzo un beso luego me giro y le lanzo una patada a uno de los tipos en el rostro, no pasa ni un segundo cuando me giro y lo veo en el suelo gritando de dolor me acerco a el un poco preocupada *

-¿ hey que pasa? ¿estas bien?-

*veo que sangra en esos momentos cuando me agacho a ver como esta uno de los tipos aprovecha el momento y me apuñala por la espalda*

-hauuu....joder eso duele y mucho -

*gruño me quito el puñal de la espalda y con el mismo rajo su garganta dejando fluir el precioso liquido mi garganta se aprieta un poco pero no era momento de beber aun como chase estaba recuperándose de sus dolores tenia que encargarme un poco de estos idiotas desenfundo la katana oigo a uno de los estúpidos hacer una llamada pidiendo refuerzos genial, hago girar mi katana y en un solo movimiento muy elegante lo parto en dos *

- vamos recuperarte pronto cariño esto se pondrá bueno -

*rajo a otro por la mitad y la verdad esto ya me había dado mucha sed me abalanzo a uno director a su garganta y bebo un poco *

Noté que Aniel observaba mis movimientos con admiración, lo cual me agradaba. Amaba verla matar, de verdad tenía un estilo único. Porque se hacía hasta chistosa la facilidad que tenía para blandir aquella katana y echar a rodar cabezas. Talento en su forma más pura. Se me acercó y preguntó cómo me encontraba, cuando un tipo aprovechó la oportunidad y le apuñaló por la espalda. Escuché su quejido de dolor, a continuación rajó el cuello del hombre y se alimentó de él.
-Claro, no te preocupes.-Y para las siguientes palabras debí hacer un gran esfuerzo que se notó en mi tono de voz.-Duele bastante, pero...-me puse de pie despacio.-Viviré.

* después de beber de la garganta de aquel tipo algo ocurre en mi arrojo el cuerpo sin vida del tipo y me quedo por un momento inmóvil respirando agitada mi lado salvaje estaba apunto de desatarse no era algo agradable, un rugido brota de mi garganta no me sorprendo ya me había ocurrido antes pero nunca pensé que volvería a pasar tan pronto, uno de los tipos me lanza una patada no lo vi solo lo sentí, sin mirarlo detengo su ataque atrapando su pie con una mano lo hago girar y quiebro su pierna el tipo chilla y me dice *-tu...tu no eres humana- * me inclino hacia el y le rujo diciéndole *
-que comes que adivinas -
*doy una carcajada que le daría escalofríos a cualquiera, lo tomo por la cabeza y la giro arrancándosela con mis propias manos , me giro y veo algunos de los tipos
que podía ver en su rostro el miedo les doy una mirada completamente desquiciada olvide que hacia aquí y con quien algo me decía que a aquel chico que me miraba con una sonrisa un poco adolorida en su rostro, a el no debía atacarlo aun tenia en mis manos la cabeza de aquel tipo se la lanzo a uno que estaba en el suelo cae justo en su entrepierna me rió*
-tu amigo perdió la cabeza por mi ....ahora quiere jugar contigo que hermoso-
*me acerco a chase y me pongo frente sus ojos relamo un poco mis labios suelto un gruñido leve *
-quieres verlos arder ?....sera divertido-
*aun me sentía fuera de control sin apartar mis ojos de los suyos alzo mis manos y los tipos que aun vivían se comienzan a encender y quemarse vivos sus gritos de agonía eran música para mis oídos, comienzo a reír cuando siento los ruidos de unas llantas chirriando venían mas genial , cuando están frente a nosotros gruño con toda mi rabia hacia ellos.

Noté en Aniel algo diferente... De pronto sus ojos brillaron de una forma extraña y a los segundos comenzó a rugir como un animal. Sabía lo que estaba ocurriendo, podía sentir toda esa energía emanando de su cuerpo. No le temía, por el contrario, me agradaba. Yo sólo permanecí inmóvil, contemplando cómo le quebraba la pierna a uno de los tipos, le arrancaba la cabeza y se la lanzaba a otro. Luego me preguntó si quería verlos arder, a lo cual mi expresión respondió por mí. Quería verlos quemarse. Cuando prosiguió a hacerlo, descubrí un placer demasiado conocido, el de la malicia, la violencia sin sentido alguno.A menudo se volvía aún mayor al placer sexual, en especial ahora, que se mezclaba con el dolor de mi cicatriz. Cada gran placer conlleva un profundo dolor, así tiene que ser para que sea perfecto. Aquello era un verdadero éxtasis, pero quería participar también así es que cuando comenzaron a llegar los refuerzos, me preparé para lo que sería una noche larga y muy agitada. Ignoré el dolor de mi pecho y recobré una postura de fortaleza. Permanecí de pie con una amplia sonrisa, aguardando a que los tipos bajaran de sus coches uno a uno. Había un par de chicas también, lo cual me sorprendió, pero me produjo más entusiasmo por el enfrentamiento que estaba por comenzar. Pero lo que sucedió luego me dejó paralizado algunos segundos. Una bruja. Y no era cualquier bruja, se trataba de una que conocía muy bien. Nos habíamos encontrado un par de veces en el pasado y debo admitir que aún tengo mis dudas de cómo rayos logré salir con vida. A pesar de todo, no sentía temor. Le dije a Aniel de forma telepática que ella era una bruja peligrosa, para que se preparara.
-Vaya vaya... Pero si es mi alado favorito.-sonrió sarcásticamente.
Respondí a su gesto con una media sonrisa. Me acerqué despacio a ella, y noté que los tipos (bastante musculosos) que se encontraban a alrededor de un metro de distancia me observaban esperando cualquier movimiento para a atacar. Hice caso omiso de ello y me detuve a unos pocos centímetros de su cuerpo.
-Anna... Sigues siendo la misma puta que hace cinco años.-volví a sonreir y pasé suavemente mi mano por su rostro, retirándole un cabello a lo que respondió con una fuerte ráfaga; la estaba haciendo enfadar.
-¿De veras quieres hacer esto de nuevo, Kenny?
-A mí no me importa... Es decir, fuiste tú quien trajo a todo un ejército. Parece que estás asustada...-Guardé silencio unos segundos y proseguí:-Di que miento y hagámoslo uno a uno, como lo hubiéramos hecho antaño.-La desafié. Sabía que no podía resistir a eso.
-¿Y qué hay con tu putita?-dijo, señalando a Aniel.
-Bueno, yo no me aventuraría a llamarla de ese modo. Verás, no le gusta que le fastidien.
-Oh, por favor Chase. ¿De veras crees que le temo a una simple chupasangre?
-No digo que lo hagas, pero tal vez deberías.
Ella lanzó una carcajada sarcástica e indicó con la cabeza a sus compañeros que fueran a por Aniel. Me dediqué a observar, aquello iba a ponerse muy bueno...

* veo que chase se compone ya estaban todos ardiendo cuando aquellos coches llegaron veo bajar a un montón de tipos todos se veían muy fuertes pero no era nada que no aya visto antes , solo fije mi vista en aquella mujer oigo la voz de chase que me dice que es una bruja peligrosa, lo miro y asiento con la cabeza pongo la katana en su funda esperando su reacción , no le temía se veía fuerte pero en todo caso no me importaba perder la vida me harían un favor si es que podían conmigo.
Observo como chase habla con ella, niego con mi cabeza por que esa mujer ha cometido varios errores fatales, el error numero uno es llamarme puta , y el numero dos es subestimarme y por ultimo pensar que soy simple y común pues no lo era sonrió un poco y le doy otra mirada a chase cuento con la mirada a los tipos que se acercaban ami eran cinco vaya ella no sabia defenderse sola o que los tipos se acercan y yo desenfundo la katana solo un poco con mi dedo *-den un paso mas y se mueren -
los tipos se ríen a carcajadas y eso simplemente me saco de mis casillas sonrió enseñando mis colmillos al tipo que estaba mas cerca de mi sin que el se diera cuenta muevo rápidamente la katana el queda con los ojos muy abiertos y de repente sin mas su cabeza rueda en el suelo .
-alguien mas tiene ganas de reír -
Los miro seria pero al ver sus expresiones suelto una enorme carcajada, los tipos se enfurecen y se lanzan todos contra mi, con un gruñido salvaje esquivo sus golpes cojo el brazo de uno de ellos y lo giro haciendo que caiga todo parece para mi como en cámara lenta doy un salto y me subo a los hombros de uno de los tipos pongo mis piernas alrededor de su cuello y giro mis caderas solo oí por un momento el rugir de su cuello , me rio a carcajadas *
- !!que hermoso sonido¡¡ -
grito mirando a la cara de aquella bruja cuando ya casi terminaba con todos había uno mas fuerte que los demás sabia esquivar mis golpes hasta logro lanzarme al suelo, con eso solo consiguió que mi enfado aumentara uno de ellos corre hacia mi yo hago lo mismo no me aparto de su camino cuando ya casi estamos frente a frente me lanzo de rodillas al suelo pasando por de bajo de sus piernas , alzo mi katana y lo rajo por la mitad me giro en cuclillas mi rostro estaba lleno de sangre y veo al tipo ese que se resistía a morir.
- Vas a morir lo quieras o no -
creo que era un buen momento para utilizar mi habilidad en ese momento agradecí a la desgraciada de mi madre por ser un caído mis ojos comienzan a brillar y comienzo a poseer el cuerpo del tipo logro ver que llevaba un arma en la cinturilla del pantalón hago que la tome y comience a disparar como loco a los que estaban allí algunos miraban sorprendidos no entendían que pasaba por ultimo el tipo lleva su arma a la boca y se vuela los sesos vuelvo en si y sacudo un poco mi cabeza me sorprendo de la masacre aquí había , me acerco a chase y poso mi cabeza en su hombro sonriendole a aquella bruja *
- Decías? -
* no me aparto del lado de chace y la miro fijo a los ojos podía ver que se había enfurecido o sea conseguí el objetivo, beso la mejilla de chase y me aparto solo un poco teníamos que estar en guardia *

Aniel de verdad estaba molesta, y sabía que era el doble de peligrosa cuando se enfadaba. Guardé silencio y me dediqué a observar con atención cada uno de los movimientos de aquella vampiro. Una amplia sonrisa se dibujó en mis labios en el momento en que se dirigió a Anna, y ella la observó unos segundos con expresión de incredulidad. Sentí los labios de Aniel en mi mejilla, a lo que le respondí pasando mi mano suavemente por su cabello.
-Eres buena niñita, tengo que reconocerlo.-cambió la postura y su voz adoptó un tono especialmente sobrío.-Demasiado...-
Alzó uno de sus brazos y formó un remolino de viento lo suficiente grande como para arrasar con nosotros. Velozmente lo fue acercando a la chica que me acompañaba.

Spoiler:

Fue muy curioso, en cualquier otra situación no hubiese intervenido. Pero ella me agradaba. Y sentía que nos debíamos protección mutua. Fuere por el motivo que fuere, me vi impulsado a hacer fuerza en dirección contraria, pero no se me hacía sencillo. No solía usar demasiado mis habilidades ya que casi nunca me veía en necesidad, sólo cuando estábamos en batalla con el ejército infernal, y hacía un largo tiempo que eso venía sin ocurrir. Además, la telekinesis funcionaba con objetos, y digamos que un remolino no lo era precisamenrte. Intenté concentrarme, aferrándome a una profunda esperanza de que funcionara. Sentí un dolor intenso y agudo en la cabeza que me obligó a poner una mano sobre mi frente. Estaba sudando. Entrecerré un poco los ojos mirando fijamente el tornado y justo cuando estaba a punto de darme por vencido, logré hacer que se moviera, despacio y poco, pero que lo hiciera. Le exigí a mi mente y a mi cuerpo lo máximo... Cuando por fin lo aparté y lo sostuve a una distancia prudente de Aniel, mi nariz comenzó a sangrar abundantemente, debo a la presión. Pese a la gran concentración que llevaba, perdí noción de lo que ocurría a mi alrededor. Me vi obligado a recordarlo cuando una punzada me dio por la espalda e hizo que mis piernas temblaran hasta casi hacerme caer. Había sido apuñalado. Aquello no podía matarme, claro estaba. Pero sí me producía mucho dolor y me debilitaba. Me arranqué el puñal, volteé y en una velocidad desconocida, lo enterré en lo más hondo del pecho de aquel infeliz. Pero no me conformé sólo con eso, sino que lo giré un poco cuando lo tuvo dentro e hice una breve risa cuando vi la sangre emanar de su boca y su rostro de sufrimiento.
-Nos vemos en el Infierno, hijo de puta.-Acabé viéndolo con ira, cuando su cuerpo se dejaba caer al suelo.
Unos aplausos llenos de sarcasmo desviaron nuevamente mi atención hacia Anna.
-Creo que te has olvidado de algo...-
Formó otra ráfaga de viento, esta mucho más fuerte que la primera y lanzó a Aniel al suelo.
-Aún no entiendo por qué razón te preocupas tanto por ella...-Dejó una breve pausa y comenzó a caminar hacia mí.-Tú no quieres a nadie, y es imposible que ella o alguien más te quiera. Lo sabes mejor que yo.-Sonrió, socarrona. Permanecí en silencio. Luego rozó con su dedo índice mis labios a lo que respondí con recelo.
-Vete a la mierda.-Solté de pronto, con una media sonrisa, sarcástica.
-Shhh...-Respondió, volviendo a poner su dedo en mi boca, pero esta vez para hacerme callar.-Sabes que no me gusta cuando eres un mal niño.-Me tomó por el cabello y me derribó con un sólo brazo, haciéndome quedar de rodillas. El agotamiento era mucho, mi regeneración se tardaría. Mi vista estaba nublada y era totalmente incapaz de hacer un único movimiento para ayudarme o a Aniel.
-Mátala.-Ordenó a una de las mujeres que le acompañaba, indicando con la cabeza hacia Aniel.
Me moví intentando liberarme de ella, pero fue en vano. De todas formas, si lo hubiese logrado, no habría servido de nada, porque ni siquiera podía ponerme de pie. Hice un último esfuerzo por hablarle telepáticamente a la vampiro, para que despertara y se pusiera alerta, pero no sabía si era suficiente para que el mensaje llegara completo y claro a su receptora. Sólo aguardé.

Después que la maldita hablara yo le sonreí sabia que podía con ella lo malo es que esta tenia poderes y bastante poderosos por lo visto miro de reojo a chase cuando ella crea ese fuerte remolino, yo veía que se acercaba a mi pero poco a poco se iba alejando abro mis ojos sorprendida y vuelvo mi mirada nuevamente hacia chase , descubrí enseguida que era el quien estaba evitando el ataque observe su rostro no la estaba pasando nada bien , retrocedo unos cuantos pasos, por que hacia esto no lo sabia, solo quería ayudarlo pero no sabia como, segundo después vi la sangre emanar de su nariz sangre preciosa para mi, muevo mi cabeza de un lado para otro tratando que quitar ese pensamiento cuando veo a uno de los tipos apuñalarlo *
-maldito cabrón-
*digo en tono bajo los gruñidos comienzan a emanar nuevamente de mi garganta pero veo que chase apuñala al tipo acabando con su vida, eso me hizo sonreír, oigo hablar a la zorra esa y dirijo mi mirada hacia ella pero era demasiado tarde una ráfaga fuerte de viento me golpea y me lanza lejos me golpee la cabeza y perdí el conocimiento, era como estar en un profundo sueño solo había oscuridad....por que me quede dormida ? ....que demonios estaba haciendo ...oh que confundida estaba ...entre el sueño sentía una voz ... me era conocida me decía que despertara ...que algo iba a ocurrir.... me lo abre estado imaginando ... de repente viene todo a mi mente recordé que estaba luchando y que había alguien en peligro y que si no despertaba ahora todo se acaba, me obligue como pude a abrir los ojos todo se veía borroso al principio y en mi mira estaba esa bruja que tenia a chase tomado del cabello el estaba de rodillas y no se veía nada bien .....no se por que paso pero una furia que jamas había sentido me invadió, era tan grande que juraría que lo demás lo notaban giro mi cabeza y veo a una mujer apuntándome con un arma la mir o y le doy mi sonrisa macabra *
-debiste hacerlo cuando pudiste Zorra -
* con el mas rápido de los movimientos tomo su brazo y se lo quiebro el crujir de sus huesos me hizo sonreír le doy un giro y logro ponerme de pie enfoco la mira del arma y apunto directamente a la mano de la bruja jalo el gatillo dos veces , tuve buena puntería los disparos destrozaron su mano agarro a la mujer que iba a asesinarme y le doy dos tiros mas en la cabeza , la bruja gritaba de dolor y se alejo de chase aproveche para acercarme a el lo cojo con facilidad entre mis brazos aprovechando la distracción de la bruja y lo acomodo en un lugar donde pueda sanar mientras yo haría lo que pudiera contra ese adefesio no quería que hablara no se veía muy bien así que le hable telepaticamente : tranquilo vas a estar bien , tu solo recuperare yo me encargo y gracias por ayudarme . acaricio su mejilla de verdad nunca nadie me había ayudado y eso era raro para mi , miro sus ojos le doy una sonrisa y me vi impulsada besar sus labios fue un beso corto quizá no lo volvería a ver mas y si se molestaba pues no podía decirme nada o eso creo , le doy un guiño me levanto de su lado y me quito la chaqueta , camino hacia la bruja que aun aullaba de dolor pude ver que le volé algunos dedos genial *
-ahora esto me lo tomare como algo personal ...brujita ...que aras ....quieres que te vuele la mano completa o aun mejor ....sabias que a las brujas se les quemaba -

*me rio un poco y empiezo a producir fuego de mis manos lanzandolo hacia ella *

-arde pequeña zorra......vamos¡¡¡-

*rujo ella me miraba asustada como estaba confundida con mis ataques la envisto con fuerza ella vuela por los aires y cae en el parabrisas de su carro no la iba asesinar tan fácil quería que sufriera y mucho *

-bruja recuerda lo soy tu peor pesadilla-

*la tomo de su pierna y la lanzo a la pared, choca fuertemente contra ella estaba sangrado por todos lados *

OFF: mi primer beso de roler, i can't belive it!

No sabía qué iba a suceder. Podía que ese fuese mi último día de existencia, aunque de todas formas dudaba que Anna, por más poderosa que fuera, consiguiera absorber toda mi energía. Como fuere, sí podía torturarme. Y ese era el mejor momento para hacerlo: me encontraba totalmente inofensivo a causa de toda la energía invertida en proteger a Aniel.
Mientras la mujer que le acompañaba se dirigía hacia la vampiro, la bruja hizo uso de su don, provocándome un dolor desconocido y extraordinario. No sabía exactamente de dónde provenía, pero todo mi cuerpo lo sentía. Era tan fuerte, que me recordaba a los tiempos en los que había estado en el Infierno. La sangre comenzó a caer en mayor cantidad de mi nariz, debí abrir la boca para respirar. Podía sentir el placer de Anna al torturarme, el disfrute total que ello le producía, lo mucho que lo había ansiado.
Justo cuando creí que no podría soportar más aquel tormento, Aniel se incorporó y asesinó a la mujer que había querido atacarle. Luego le da dos tiros en la mano que sujetaba mi cabello a Anna, haciéndola apartarse. La sensación de aliviio y gratitud me invadió por completo. Aniel me tomó y me colocó en un sitio donde pudiera reponerme. Me recargué en su hombro y acepté su ayuda, no estaba en condiciones de rechazarla, ni pretendía hacerlo. Me habló telepáticamente, dándome fuerzas y agradeciendo lo que había hecho por ella. En realidad no era necesario que lo hiciera, al liberarme de Anna ya era más que suficiente. Acarició mi mejilla, me sonrió viéndome a los ojos y me besó en los labios. Así, sin más. Aquello verdaderamente me había tomado por sorpresa. Sentir sus cálidos y dulces labios sobre los míos me produjo una sensación extraña. Sólo una persona había rozado mi boca, y de eso hacía muchos años. Ya casi olvidaba cómo se sentía, cómo era percibir algo más que dolor u odio. Mis labios se amoldaron a los suyos y de pronto nada de todo eso tenía el más mínimo sentido. Pero me importaba una mierda. Fueron los mejores segundos en bastante tiempo. Me gustaba que fuera así, impredecible, decidida y directa.
Luego se apartó y prosiguió con Anna. La hizo arder. Por más agotado que estuviera, no pude evitar esbozar una amplia sonrisa al verla. Luego Aniel la embestió y la lanzó contra su coche. Una lástima... Era un precioso coche. La tomó de una pierna y la golpeó contra una pared.
Tanto tiempo llevaba deseando acabar con esa puta... Pero ahora mismo no me importaba si Aniel lo hacía por mí.

OFF: que afortunada soy ¡¡¡¡¡¡¡¡¡ XD

La maldita bruja era fuerte, a pesar de todos los golpes que le he dado ella sigue consiente, pero era aun mejor para mi así podría devolverle todo el dolo causado en este lugar, ella cae al suelo y la pateo fuertemente en las costillas
-Anda putita ponte de pie ......me das lastima zorra -
Ella me mira con odio yo le sonrió le doy una pata da en el rostro, miro en dirección donde estaba chase que estaba observando y sonreía no se veía muy bien , le devuelvo la sonrisa y vuelvo a dirigir mi mirada a la bruja los ayudantes que quedaban no se atrevían a acercarse optaron por retrocedes , ella de alguna manera me patea en el estomago y me lanza lejos yo caigo con una mano apoyada en el suelo y mi rodilla también, sonrió por que me lanzo justo donde estaba mi katana me lanzo hacia ella y la tomo con fuerza por el cuello.
-estas lista para ir al infierno bruja -
La aprieto con fuerza escucho sus gemidos de dolor y creí oír una suplica , no me la podía creer pero bueno todos suplicábamos alguna vez no la acerco hasta donde estaba chase la pongo de rodillas ante el jalo su cabello hacia atrás dejando al descubierto su cuello .
- se que quieres verla muerta así que esta va por ti -
Pongo la katana en la garganta de la bruja mientras ella gritaba que no lo hiciera , cierro un poco mis ojos mientras voy deslizando el filo de mi katana por su garganta lentamente mientras sus gritos se van apagando mi movimiento final fue rápido su cuerpo callo y me quede con su cabeza en mi mano, los otros tipos habían huido despavoridos suelto la cabeza de la bruja enciendo su cadáver para que arda y se convierta en cenizas la observo arder por unos segundos luego camine unos pasos hacia chase y me deje caer al suelo a su lado estaba cansada herida pero ya pasaría, me quede un momento ahí tendida en el suelo de seguro parecía cadáver segundo después reaccione y examine a chase me preocupaba su estado así que le gustara o no me lo llevaría de aquí , vi un coche de los que habían dejado los tipos tomo su rostro con mis dos manos y lo miro a los ojos .
- bien nos vamos de aquí -

Lo ayudo aponerse de pie para que caminemos hasta el coche lo sostengo firme junto a mi y lo acomodo en el asiento , teníamos suerte estaban las llaves puestas arranco el coche y conduzco a toda velocidad le doy una mirada y una sonrisa .

- vas a estar bien no te preocupes ....no vivo muy lejos de aquí ya llegaremos -

Acelero aun mas por que en verdad me estaba preocupando su aspecto .

OFF: Chase: disculpa la tardanza, no te molestes conmigo, todo es culpa de mi user, que sufre de lo que Darius diría "webonitis aguda". Pero que conste que a rastras la traje de vuelta a Damned y a ponerse al día; uno nunca sabe quién acabará mandando a quién ¬¬
Noe: ya cállate tú niño, ¿no ves que me estás dejando mal? Un millón de disculpas por la demora Aniel Ah! y que tengas un muy feliz comienzo de año!!

A pesar de no encontrarme en mi mejor momento, hice mi mejor esfuerzo por mantenerme al tanto. Aquella situación no se daría dos veces y tenía que disfrutarla lo suficiente. Aniel le cobró a aquella bruja todo el daño causado, y más que eso, la tomó por el cabello y la trajo junto a mí para que pudiera darme el placer de verla por última vez.
-Justo cuando uno cree haberlo visto todo en esta vida, tiene que contemplar situaciones como esta.-Solté una carcajada, me acerqué más a Anna, y le escupí en el rostro, con todo el odio que le tenía.-Ya mátala, sácala de su miseria cariño, es que ha comenzado a causarme náuseas.-Le dije a Aniel, en tono cómplice, a lo que respondió con un "esta va por ti". Acto seguido, le arrancó la cabeza. Justo luego, se dejó caer al suelo.
-Ha sido una larga noche...-Le dije con un hilo de voz.-Marchémonos de este agujero.
Me sostuvo fuerte y caminamos hasta un coche. Me colocó en el asiento de acompañante y aceleró. Mis ojos se entrecerraban, de veras estaba muy cansado. Pero como fuere, el dolor no iba a dejarme dormir. Me pregutaba a dónde nos dirigíamos, pero no fue necesario decir nada, porque me sonrió diciendo que iba a estar bien, y que vivía cerca. Así, pues, parecía que íbamos a su casa.
-La casa de una vampiro... De verdad quiero verlo.-Le respondí con otra sonrisa, intentando simular mi sufrimiento.