Sleepwalking Past Hope

Sonrei, dandole cierta razon en respecto a mi ansiedad, no era bueno, para nada bueno y me estaba minando lentamente la razon, entre otras cosas.

-Magnifico.-dije ensanchando mi sonrisa, suspirando largamente al ver aquellas imagenes, demaciado realistas, te daban ganas de estirar la mano y tocar las telas en las ropas del angel y de la virgen, era casi magico.-Es como una puerta a otro mundo.

-Nop-conteste poniendome de pie tambien, acomodandome la sudadera- Vivo en Los Angeles, pero me aburria y me escape de la guardia.

Comente sonriendo ligeramente.

-No deberia hacer esas cosas, por los riesgos que corro, al ser el mas joven y debil de mi familia.-dije suspirando ligeramente.- Y tu vives aqui, digo, no aqui, pero vives en la ciudad?

Llegando hasta él alcé la mano y aprete su hombro afectuoso -Te has escapado muy lejos amigo- sonrei y lo atraje hacia a mi para abrazarlo, deslizando la mano libre por su espalda -¿No te gustaria ser fuerte?- susurré tenuemente en su oido alejandome tras unos segundos.
-Soy un nómada, pero por ahora me hospedo cerca de aqui, en un pequeño motel..veras, si no quieres regresar Adrian, puedes quedarte conmigo hasta que lo consideres. Y si no, agradeceria que me acompañases al motel.- rectivé la marcha caminando hacia las afueras de aquella reconstrucción, no se escuchaba el eco de las pisadas, pues el silencio era mi fiel amigo.

DE haber sido otra persona la que me hubiese propuesto acompañarle a su motel, seguramente hubiera huido del lugar sin dudarlo, sin embargo, me daba la confianza, extrañamente Armand, producia en mi un efecto de total apego a su persona, confianza y seguridad.

-Bueno, si no te molesta, te hare compañia-dije sonriendole, antes de responder a su otra pregunta.-Me gustaria ser mas fuerte, sí, definitivamente, pero bueno... no aporto a mucho y dejo que me traten como un chiquillo, pese a la edad que tengo, supongo que eso no ayuda en mucho.


Comente, andando a su lado, saliendo de la iglecia al fin.

Le segui tranquilamente, inspeccionando el lugar y al casero que parecia bastante cansado, a veces me daban ganas de dormir asi, tan despreocupadamente, pero por desgracia, mi mente estaba llena de tantos recuerdos, casi todos llenos de cosas que no deseaba, tristes o tragicos.

Entre a la habitacion, sentandome en un viejo sofa que ahi estaba, mirando a Armand de forma fija, medio sonriendole.

-Mi familia...-murmure- Es la cosa mas rara que puedas imaginar, mis padres, dos hombres, murieron en un ataque hace cincuenta años, y reencarnaron en mi hermano gemelo y en mi, asi que practicamente soy mi propio padre, madre... algo asi... tengo una hermana mayor, mi primera hija en mi vida pasada, de la cual no recuerdo mucho, solo retasos y son demaciado tragicos para desearlos.

Plaricaba abiertamente, sin temor alguno a que toda aquella informacion pudiera servir para hacerme daño.

Le escuche lentamente, sonriendo ligeramente, era bueno tener alguien con quien hablar y no te juzgara o criticara.

-Supongo que tienes razón, aun que me duele un poco ver a mi hermana y la forma en que me mira, es como si.. - solte el aire que contenia antes de seguir hablando- Es como si ella me siguiera viendo como su padre y me siento mal por ella.

Levante los hombros ligeramente, sonriendole, caminando hacia la cama.

-Por que no- dije sentándome del otro lado de la cama, quitándome los zapatos y el cinturón, antes de meterme bajo las cobijas y recostarme a su lado, sin dejar de sonreír- Es raro dormir así y mas con alguien a quien acabas de conocer.

Era cierto, lo sabia pese a no estar seguro al cien, de que lo conocia, pero habia algo en el que me unia a el, a ese vampiro, era esa misma extraña sensacion que despertaba en mi el estar cerca de Belial, o de mis hermanos.

-Yo tampoco quiero olvidarte-dije recargandome en su pecho, cerrando los ojos, pues me sentia algo cansado, y asi entre sus brazos, me sentia resguardado.